REPERTORIO AMERICANO 19 Beba cervera SELECTA primera ilusión de los hombres de hierro del Rio de la Plata fue la Sierra Argentina, escondida al Noroeste. Desvanecida esta esperanza la sustituyó el Paititi, perdido en Mojos, entre brumas indecisas, en el Septentrion lejano, y cuando este Dorado también se evaporó, en lontananzas antárticas brilló la Tierra de los Césares, el último Dorado que cautivó la fan.
tasía.
La visión de la Sierra de la Plata enloqueció a los primeros conquistadores españoles e hizo posible la conquista del Faraguay y demás países platenses. De donde deduce Domínguez la necesidad de una ilusión, de una idea directriz en nuestra vida, único modo de realizar algo perdurable. Nada importa que el guido sca una simple fantasia. En la loca empresa de cautivar lo imposible empujamos a la humanidad hacia adelante, echando los cimientos de la grandeza y de la civilización futuras.
Domínguez fue, además, propagador del idealismo entre la juventud de su patria.
ideal perseDe malta y lúpulo.
Los familiares (En el Rep. Amer. Cuento popular de Villa Colón, Costa Rica. Gran astro. Qué sería de tu felicidad si te faltasen aquellos a quienes iluminas? ΕΙ apóstrofe de Zaratustra pudiera, casi, sintetizar la esencia de su concepto filosófico sobre el mundo. La realidad exterior no existe; el universo llevamos en la caja craneal. la luz y el color y el sonido sólo son cerebrales fantasmas. reza el lema de uno de sus trabajos. en seguida agrega: todo es como el color y el sonido en el cerebro. Es verdad que estamos siempre colorando mundo con el prisma de nuestro temperamento. Pretendemos hablar de los demás y sólo hablamos de nosotros mismos. No podemos salir de la caja craneal, nuestra prisión oscura, la caverna que dice Anatole France.
Los párrafos que siguen son final de un es.
tudio sobre Valle Inclán. se ha retratado a sí mismo Valle Inclán?
Acabamos de dudarlo. En algo intervenimos, en la distribución de los colores. Lectores habrá que con distinto temperamento, copiando pasajes diferentes a los resumidos por nosotros, produzcan otra impresión otra estampa. El tinte del prisma interior.
el fantasma cerebral. Decididamente, no podemos salir de la caverna!
En otro estudio insiste en idéntico sentido.
bre y las letras echaban llamas al imprimir.
las. El compadre hasta temblaba de miedo. En qué camisa me habré metido? pen só. En la de once varas le respondió el Malo.
Pisuicas se fué y el hombre, muerto de micdo, espero que cantaran los gallos. Cuando amaneció fué al mon a buscar la olla. En vez del gato achicharrado encontró siete gatitos negros como la pura trampa, con los ojos colorados y encandilados, que al verlo le dijeron. Qué quiere, mi amo. Qué quiere, mi amo? Miau. miau.
Eran los Familiares que debían acompañarlo y favorecerlo durante siete años, ni un día más. 0con Dos compadres pobrísimos, un día se despidieron en el cruce de un camino. Aquí nos veremos dentro de un año. dijeron. Que Dios nos ayude.
Pasó el año y se volvieron a encontrar, pero uno venía riquísimo, botando plata, bien vestido y en magnífica cabalgadura. El otro se presentó más pobre que las ratas y con un quintal de deudas a la espalda.
Hola, compadrito. con que Ud, se ha hey cho muy rico. preguntó el pobre. Millonario, le contestó el compadre adinerado. Supongo que usted no me ha de negar qué negocios lo tienen en ese estado. Ah, compadrito, si usted quiere sale de pobre mañana mismo que es viernes. Con que con esas andamos. a lo mejor Ud. tiene contrato con el Malo. No, es que tengo Familiares. Voy a contarle en voz baja y si le parece, mañana mismo hace el contrato.
Hablaron largo rato y el rico explicó al pobre lo que debía hacer.
Al día siguiente, que era viernes, día de embrujos, se fué el compadre pobre a la montaña vecina, con una olla de hierro y un gato negro de esos que tienen en la cola los siete pelos del Diablo.
Encendió una fogata, puso la olla sin agua y en ella echó al gato.
Tapó la olla de hierro y avivó más el fuego. El gato daba unos alaridos espantosos, que los árboles se estremecían y a los animales del bosque les temblaba el corazón. El hombre invocó al Demonio.
Con los alaridos del gato llamó a Satanás.
El hombre asustado quiso huir, pero al pa sar por un higuerón se topó con el Diablo. Un aguacero con rayos y truenos le decuvo el padolor en Oir consiste en la formación de sonidos ine teriores que parecen exteriores (Taine. Nos parece oír a lo lejos nuestra vibración cerebral como nos parece ver a lo lejos nuestros espectros interiores, como nos parece sentir el el dedo mutilado, lejos del cerebro. El sonido es sensación, está adentro, allí se produce el tintineo y el cráneo pensante se conduce como una caja musical que creyese oír hacia afuera su armonia o como si la estatua de Momnón escuchase su propio sonido a la distancia. todos somos estatuas melodiosas de Memmón. Creemos que a viento recita su monólogo en la selva y que el trueno retumba on el espacio y la música parece llorar en las cuerdas del violin, sin comprender que música, trueno monólogo, son notas cerebrales, sensaciones in ternas, ausentes en el violín, en el espacio y en la selva.
El señor se fué a su casa con los Familiares, los guardó en una caja, y como le aconsejara su compadre, les daba de comer tachuelas, alfileres, vidrios quebrados y polvos de hierro. Los sacaba a asolear a donde no los vieran y les pedía cuanto descaba. Casi siompre les solici taba plata o que le sacaran siempre ganancioso en los negocios.
Se fué haciendo rico, ricazo, millonario. Tenía plata a montones, casas, buenos negocios.
fincas, lecherillas. Se casó con una linda señora a quien le daba un lujo desmedido.
El secreto lo sabían solamente él y su com.
padre. Los dos se alimentaban bien y tomaban medicinas para no morirse en el término de siete años, porque entonces sí que se los llevaba el diablo.
El señor ya enriquecido se había hecho insolente, ni la esposa podía hablarle y no pensaba jamás deshacerse de los negrillos porque cada día ambicionaba más. La señora nadaba en plata y lujo, pero no podía ir a la iglesia porque se lo tenía prohibido el esposo.
Los Familiares se hacían invisibles, se metían por las casas de los ricos y robaban para 50.
su amo. de este modo, viviríamos en ilusión perpetua. Pintura, música, pocsia. todo! no se.
rían sino cerebrales fantasmas. habitantes interiores del propio ser.
El Diablo ya venía con pluma y papel a hacer el contrato.
Agarro al compadre pobre por un brazo y le dijo. Me has llamado, estoy para servirte. Di lo que quieres y firmaremos el contrato. Necesito plata, mucha plata, para salir de pobre.
Escribieron con la sangre del propio homUn día las dos esposas de los compadres comadrearon y entre las conversaciones que tu vieron salió lo de los Familiares.
La señora del rico embustero se asustó y lo primero que se le ocurrió fué buscar los animales y perderlos. todo esto ya se estaba cumpliendo el plazo de los siete años. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica