1Repertorio Americano Tomo XLI CUADERNOS DE CULTURA HISPANICA San José, Costa Rica 1944 Sábado 24 de Junio Año XXIV. No. 974 No. Reflexiones (En el Rep. Amer. Virginia Woolf, eternamente viva 13 ole mente Virginia, invitas al Universo a su fiesta, a sueño ancestral. Te siento tan en mí que tus que te sigan las que palpitan dentro de lo ojos tristes se confunden con los míos y ya cierto, es decir, a las que viven, invitación es no sé ni dónde terminas tú, ni a dónde copecial para la mitad del mundo.
mienzo yo. así en esa unidad, rompiendo Invitas a trabajar, labrar por éste, por ésta. con el mito de Adán y su costilla, luchamos por aquel por aquella, con el nuevo movi. hoy, mañana, siempre para definirnos propiamiento que emerge del fondo de todas las co mente y poder decir con valentía, somos.
sas, dando sabor distinto a este siglo. es invitacin total para las dos mitades del UniHoras benditas verso, que son una unidad. Invitas a mirar las mismas cosas sin ojos diferentes, y a sen. Bendigamos las horas del silencio, de la tirnos todos una parte del cosmos. Lo breve armonía y de la soledad! Horas verdaderas en de esta vida puede corresponder a siglos en el que somos nosotras mismas entrando resueltatiempo como en el caso tuyo. a ti hemos en la vida. Horas dulcemente serenas, de imitar, porque el inverso es doloroso: vi acompasadas, llenas de fe en el futuro apoyado das, multitudes de años, que sumados dan so en la solidez reflexiva que nos han dejado en lamente un instante en el tiempo.
el alma otras horas diferentes, enfermizas, deTú, Virginia Woolf, has abierto la puerta primidoras, retrógradas.
de este siglo a toda vibración con esencia de Pero ahora quiero solamente pensar en esVirginia Woolf infinito. Debemos ayudarte, continuarte. Por tas horas buenas en que nos perturba la trage(Por Francis Dodd)
que tú vives eternamente en tu obra fructi dia de ver la vida a través de los ojos de la ficas. El pozo de estancamiento de ideas, ese mitad del universo. Horas que rompen definipozo que tú combatiste, disminuye lentamen tivamente con toda sumisión, salvando nueste, y la marcha nueva del río de la vida le tros pensamientos y lo intimo de nuestro sér, za el círculo cerrado de la imitación dentro abre cauce desde su simiente.
del naufragio en el mar de la vida. Horas que del orden antiestético del universo. Horas en Con todo esto, tú has traído a la vida de excluyen los disfraces, el desperdicio de fuer que nos olvidamos de la gente zonza, del brimás de una mujer la necesaria soledad, el zas, el sacrificio estéril, el deber equivocado y llo exagerado de los pisos, del alimento puncuarto propio, complementos necesarísimos a automático.
tual, de la costumbre de quedar bien con el nuestra pobreza de siempre. Porque pobres he Horas en que asistimos al entierro glorioso vecino de nuestra ayuda jnnecesaria de muletas mos sido desde que se inventó la pobreza, de nuestros prejuicios, del miedo, del cariño en la vida conyugal, cuya finalidad es cuando hemos emitido nuestras íntimas con aferrado y ciego al poco más del pan nuestro abandonadas en el último rincón de la casa, a vicciones. Hoy, como tú, me siento ebria de de cada día. Horas en que se rompe con firme que las cubra la mugre del tiempo y del olvido, de donde han de saltar de pronto, algún día, golpeándonos en lo intimo, haciendo de Decálogo aproximado y elemental para que los Presidentes nosotras resentidas, de Costa Rica conserven la Democracia Horas en que matamos la timidez que ha de tornarse estatua de sal allá en los años de (En el Rep. Amer. nuestra madurez. Horas emocionales, llenas de Ai tomar posesión del poder se servirá de sus amigos, y nuestro propio espíritu, que nos hacen sentir la recordando que ya no es el director de un partido, entre el amigo y la belleza que es verdad, el amor, el sufrimiento, capacidad, empleará la última.
la creación, dentro de un movimiento propio Recordará el primer poder de la democracia es la insadormecido. Horas que salvan en las noches que trucción pública.
negras, tenebrosas, la inclinación de la balan3. Que su libertad propia depende de la de su pueblo.
za que oscila entre el ser y el no ser Se avergonzará de dar órdenes a serviles.
Horas de fé, que hacen brillar en el fir5. Recordará que las gentes de uniforme o hábitos en ocasiones mamento la luz de la esperanza y que debidran no los tienen puestos y que su primer acto de violencia no podrá queser perennes por ser gloriosas y sublimes al darse aislado.
estar dentro de lo propio. Horas que a mi No tendrá consejero particular, tendrá consultores.
me dan la sensación de la verdad, de la belle7. Recordará za y de la unión con Dios.
que lo que le robe a su pueblo se lo roba a su ¡Benditas horas mías!
honra, a su futuro prestigio y al de sus descendientes. Manifestará el amor a su patria, no dando órdenes, sino Vera Yamuni coordinando sus fuerzas. Recordará que los errores que cometa por torpeza son reCosta Rica, junio, 1944.
parables, los, de la maldad jamás le los podrá reparar en sí mismo.
10. Sabra que habiendo llegado a ser por un lapso el destino de su patria, su fundamental ambición será la sencillez.
ser Max Jiménez Habana, Cuba 1944. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional. Costa Rica