68 REPERTORIO AMERICANO El arte de vejecer John Keith Co.
Por Azorín (De La Prensa. Buenos Aires, 10 de cetubre de 1943. San José, Costa Rica AGENTES REPRESENTANTES DE CASAS EXTRANJERAS He ido a ver a Juan Pascual. Nadie puede. ver a Juan Pascual; no hay equivoco en la Cajas Registradoras NATIONAL (The National Cash Register Co. frase; Juan Pascual no recibe a nadie. He 10 Máquinas de escribir ROYAL (Royal Typewriter Co. Inc. grado yo ver al personaje. La casa es cómoda: Muebles de acero y equipos de oficina (Globe Wernicke Co. hay en ella alfombras de nudo, tillados lu. Implementos de Goma (United States Rubber Export Co. cientes; en la sala he visto, en tanto aguarda Máquinas de Calcular MONROE ba, una reproducción del Desnarigado de Ro Refrigeradoras Eléctricas NORGE din, varios paisajes de Beruete, vistas de Cuen Refrigeradoras de Canfín SERVEL ELECTROLUX ca, un boceto de Rosales. Ante mi, había, en Plantas Eléctricas Portátiles ONAN el testero, un magnifico retrato de la madre Frasquería en general (Owens Illinois Glass Co. de Juan Pascual, pintado en París por Fran. Conservas DEL MONTE (California Packing Corp. cisco Domingo Márquez. Estaba yo conten Equipos KARDEX (Remington Rnad Inc. plándolo cuando he advertido que se posada Maquinaria en general (James Motley, una mano en mi hombro. Juan Pascual había JOHN KEITH Socio Gerente RAMON RAMIREZ Socio Gerente entrado quedito en el salón. me decía. Venga usted conmigo; aqui no estamos bien especialmente en los de medicina, aprendo a Allende de que los viejos también las leyeron Hemos comenzado a andar por corredores, observar; aquellos hombres fueron buenos ob cuando eran jóvenes. Pero el joven nos da a través de salas, y hemos pasado por una ga.
servadores. veo también cómo la erudición lo reconozco el bello espectáculo de la ple lería o solana de cristales. En el fondo de la cambia. Nada hay más fallecedero que la eru nitud de la vida. La plenitud con todos sus casa, estaba el aposento de Juan Pascual. Era dición; digo la erudición del momento. y no la arranques entusiastas y con todas sus intrepi.
una salita, con alcoba. de paredes desnudas y atañedera a los grandes nombres. Quién co deces. No quisiera yo, con todo, volver a la con muebles sencillos. Lo miraba yo todo con noce hoy a las autoridades que cita en su li mocedad. Tengo ahora un dominio de mí mis curiosidad; reparaba en el contraste de esta bro Gaspar Morardo? Todos esos autores eran mo que no tenía antes; las pasiones se han habitación, pobre, con el resto confortable de reputadísimos en su tiempo; a todos debía co amortiguado y puedo contemplar el mundo con la casa.
nocerlos un médico amante de su profesión. toda serenidad. cuánto vale esta ecuanimi. Es ésta su habitación predilecta, Juan sin embargo, hoy no son más que una curio dad con que juzgamos y esta quietud en que Pascual. le he preguntado.
sidad histórica. Mañana lo serán igualmente vivimos! No lea usted, cuando sea viejo, las Sí, aquí vivo yo, y duermo, y trabajo. Sin muchas autoridades médicas que están hoy en macrobiáticas. Le voy a dar a usted tres norllegar a la aspereza, no me convenía la mo. pinganitos. Así es el mundo y así es la ciencia. mas que le ahorrarán ese trabajo. Si quieres licie; el choque, en el campo, al ponerme en Sobre todo, la ciencia de curar, vivir sano, hazte viejo temprano, dice el re.
contacto con la Naturaleza, hubiera sido siem No sé a dónde me encaminaba. Pero es lo frán. Me hice yo viejo a los 50 años; piens pre muy rudo Aparte de que el habitáculo ha mismo decir una cosa que otra; lo importante vivir diez más sobre los 85 que cuento. Las treg bitual influye también en los pensamientos. es que lo que se diga no sea vulgar. He leído normas son éstas: 1, no enfriarse; no emConvenía yo con Juan Pascual y estaba ob también con viva satisfacción el libro del doc pacharse; 3, no sofocarse. cierta edad el servando atentamente a mi personaje. Ha re. tor Gueniot, publicado en París, con el título enfriamiento es mortal. El doctor Huertas, gran parado en mi inspección, y sonriente me ha de Pour vivre cent ans. El autor escribió diagnosticador, médico de Sagasta y de Cas.
dicho: este libro a los noventa y nueve años. No se telar, me decía siempre que nos tropezábamos. Cuánto tiempo hace que no nos vemos? puede decir que no tenía experiencia en la ma No se enfrie usted! el doctor Huertas Creo que diez años. cuánto tiempo tenía tería. Pero vuelvo a Morardo, dejando a un que se bañaba en agua fría en pleno invierno, yo hace diez años? Pues setenta y cinco; conlado también a los clásicos Cornaro y Lessio. con las ventanas abiertas, murió de un enfriaque ahora tengo ochenta y cinco. No lo pareEn este librito del escolapio hay un paso que miento. No empacharse vale por no tomar em ce. Está usted pensando que no lo parece. El siempre me ha impresionado; es el siguiente: pachos llegando a la repleción. No detemos arte de vejecer es muy difícil. y yo he procuLa juiciosa razón me ha demostrado que la jamás ahitarnos; levantémonos de la mesa con rado saberlo y practicarlo. Vejecer es un artensión y la viclencia del cerebro hace flojas, apetito. Si en la vejez tenemos un desarreglo caismo; me gusta más que envejecer. Si deci. perezosas inhábiles las demás partes orgá intestinal, todo se subvertirá en nuestro orgamos envejecer parece que es la fuerza de la nicas, retarda e impide el curso de los humo. nismo; el equilibrio se habrá roto y nos edad la que nos lleva al final; diciendo vejecer res, y que esta inercia, esta inacción; este re. costará mucho el restablecerlo. en cuanto al tardo es como si nosotros, a nuestro albedrío, fuéra.
impedimento es una fuente inagotable no sofocarse, obvio es que las emociones, en mos guiando nuestra ancianidad, Fuera de que de infinitas enfermedades que redundan des la vejez, en toda edad, consumen nuestro suco contamos con otro vocablo: vegetar. Pero éste pués en el espíritu y entendimiento e impiden nervioso, como se decía antes, y nos enervan.
ya parece más perteneciente a la vida animal los generosos progresos.
Los tres tropiezos del frío. el hartazgo y la que a la dotada de racionalidad. Ha leide Como entraba por la ventana un rayo de sol emoción. causen, en definitiva, los mismos usted las macrobiáticas? Tengo aquí varias. que le estaba dando en la cara, Juan Pascual desastrosos efectos. Tal vez lo que temo yo más Se ha levantado, y con agilidad y presteza, ha cambiado de asiento y se ha llegado un poco es la emoción. La violenta, desde luego. En casteha ido a un estante y ha sacado varios libros. más cerca de mí. Sonreía; había en todo su llano tenemos para denominarla sofoco, sofoqui.
Los ha puesto en la mesa y ha traído uno en la talante una dulce placidez. Con la misma voz na, berrinche. berrinchín. Se dice también para mano. Blandiéndolo, me ha dicho: sosegada de antes ha proseguido: expresar que alguien estaba arrebatado, estaLos libros son interesantes; pero la vida Lo que más debemos evitar, tanto viejos ba volado. No esté usted nunca volado, queri.
lo es mucho más. Esto es lo que los jóvenes como jóvenes, es la fatiga mental. Cuando se do amigo. deje, con toda calma, que las co.
no quieren comprender: ya hablaremos luego está fatigado no se hace nada de provecho.
sas se desenvuelvan ellas mismas. si tene.
de la animosa juventud. Este volumen es La Debemos dejar la tarea en el punto en que la cos que decidirnos en un trance apretado, ponMacrobiática de Huffeland. traducida al cas. afluencia natural cesa. Si nos fatigamos y con gamos entre la aparición del conflicto y su so.
tellano en 1839. He leído el libro con prove. la fatiga continuamos, trabajando, el carácter lución dos, tres o cuatro días: todos los que cho; pero hay otros libros referentes al caso ser agría; estamos propicios a los piques y podamos. Demos tiempo al tiempo y no olvideque me interesan más. Aquí tengo también un resquemores. En cada palabra encontramos do mos que un día viene tras otro día librito del siglo xvil titulado El arte de vivir ble y malévolo sentido. Meditamos después, sano y largamente. su autor es el escolapio cuando la fatiga ha pasado. y vemos que la Gaspar Morardo. está puesto en castellano obra cumplida no es la misma que hubiéramos por otro discípulo de San José de Calasanz, podido hacer con fluidez. He dicho antes que Tengo predilección por los fbros del siglo hablaríamos de los jóvenes. Los jóvenes son xviii; soy yo también, no lo niego, un hombre menos interesantes que los viejos; los viejos de esa centuria. En los libros del siglo XVIII, han visto las cosas y los jóvenes las han leido e Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica