REPERTORIO AMERICANO 117 Dr. García Carrillo en su Unidas: las famosas libertades proclamadas posesiones, más fuerte se hará. Cada día que por el Presidente Roosevelt en la Carta del pasa significa mayor número de vidas americaAtlántico. Queremos encargarnos de que no nas y chinas.
resuenen como frases vacías, y de que se trans Para hacer aún más convincente su punto formen en realidades para nosotros, para nues. de vista citó a un autor clásico chino: Para ectrocardiogramas tros hijos, para nuestros nietos y para toda la vencer conocete a ti mismo y conoce a tu eneMetabolismo Basal humanidad.
migo. y añadió: Es muy descansado ver al Radioscopía Terminó su breve alocución con una extra vecino llevar la carga. Su voz tuvo restalli Corazón. Aparato Circulatorio na anécdota china: Un monje budista esperaba dos de látigo al recordar que durante los priCONSULTORIO: 100 vs. al Oeste de la conquistar la gracia con sentarse todo el dia meros 412 años de la agresión, China soporto Botica Francesa en actitud de plegaria y murmurar constante sola y casi sin ayuda la sádica furia japonesa.
mente: Amita Budha, Amita Budha. Cerca de Teléfonos: 4328 y 3754 (El conservador New York Times, allí el prior del templo se pasaba las horas puversión textual del discurso: echó al olvido las liendo un ladrillo contra una piedra. Cuando.
dos frases tomadas por la Sra. Chiang Kai gusto en recibirlos en la Casa Blanca. Fué el presa de curiosidad el monje interrumpió sus Shek de los viejos textos de los sabios chinos. general, acompañado por un intérprete milioraciones para preguntar al padre prior el obtar. Al salir declaró a los reporteros que había jeto de su tarea, éste contestó: Estoy tratan Nosotros en China, como ustedes. con tratado con el Presidente sobre la situación do convertir un ladrillo en un espejo. Pe tinuó la oradora queremos un mundo me del Pacífico. Cuando se le preguntó si estaba ro, padre prior repuso el joven monje. es jor, no solamente para nosotros, sino para to satisfecho de la ayuda aliada a China, el 3eimposible hacer un espejo de un ladrillo. Si da la humanidad. No basta, sin embargo, con neral un hombre muy civilizado contes. contestó el prior. de la misma manera proclamar nuestros ideales, ni con cstar con tó: que es imposible que conquistes la gloria sólo vencidos de que los tenemos. Para preservarlos, No estaremos satisfechos mientras el enecon decir Amita Budha todo el día y todos los mantenerlos y llevarlos delante tenemos a ve migo no sea totalmente derrotado.
días. Recomendando a sus oyentes que guat ces que jugarnos lo que más queremos, en el den en su fuero interno la enseñanza de la esfuerzo por cumplir con esos ideales, aun coCinco mil años de civilización anécdota, agregó: Creo que no basta el que rriendo el riesgo de un remoto fracaso.
tengamos ideales y proclamemos tenerlos; es Agregó que después de 512 años de amar Si la Sra. Chiang Kai Shek hizo un gran preciso que actuemos para convertirlos en rea ga experiencia China ha aprendido que lo papel en el Congreso, también demostró ser lidad.
más sabio es no aceptar el fracaso ignominio una gran actriz y una mujer de mucho sprit En el Senado habían tomado asiento los se samente, sino arriesgarse a sufrirlo con gloria. ante los corresponsales de prensa que particicretarios de Estado, magistrados de la Su Tenemos fe en que, a la hora de redactar los paron en la entrevista en que la dama acomprema Corte y su propio Presidente, Stone. términos de la paz, los EE. UU. y nuestros pañó al Presidente Roosevelt. La más viva reDurante el discurso de la Sra. Chiang Kai Shek valientes aliados no se dejarán ablandar por el seña de esa entrevista se dió en la columna todos escuchaban embelesados. El Sen. Van miraje de circunstanciales razones del momen diaria de un conocido corresponsal de Wasdenberg, de Michigan orador de clieve él to.
hington: Raymond Clapper.
mismo se inclinaba hacia adelante. con la Al acabar su discurso la señora Chiang per He aquí la historia, tal como la conto: misma tensión con que los serios estadistas ba maneció en pie, saludando al público. Habia Los corresponsales de prensa que se enconbían escuchado, hace 100 años, los debates de presentado la causa de China lisa y llanamente, traban en la Casa Blanca durante la conferenlos grandes oradores Clay y Websier. En las mejor y con más efectividad, quizás, de lo que cia en que apareció (la Sra. Chiang) con el galerías, repletas, la Sra. Roosevelt era una se había hecho en cualquier otra ocasión. El Presidente Roosevelt participaron en una escepersona más entre todas las que escuchaban. pueblo chino esperaba respuesta: y ésta ter na que probablemente no volverán a presenciar respirando apenas, bebiendo las palabras. An dría que ser en hechos, no en palabras. jamás.
tes de que éstas terminaran estallaron las sal Comentario. El valor emocional de las pa: Fué un drama de la alta política en el que vas de aplausos. Viejos observadores de la vida labras de la señora Chiang Kai Shek se comu desempeñaban los papeles personajes reales.
política declararon que nunca habían visto a nicó al gran público lector de los Estados Un Puede ser que algún día encarguen a Helen los senadores portarse con tan poca reserva. dos a través de las columnas y más columnas Hayes el desempeño de un papel semejante.
Como si fuera una gran actriz, la dama chi de informes periodísticos; pero algunos cdito pero nunca podrá hacerlo mejor que la Sra.
na recibió el aplauso con una digna reveren riales indicaron que su llamamiento no sería, Chiang en la vida real. Era la primera dama cia, en vez de saludar con un simple movi no podría ser contestado en seguida. El New del Este, delicada, femenina, sagaz, viva, rápimiento de cabeza.
York Times escribió: da, humorista. contra su propio maestro. Ai En la Cámara de Diputados. Flanqueada El sentimiento americano está en pro de iniciarse la conferencia de prensa, el Presidenpor dignatarios del Congreso, la Sra. Chiang enviar a China todo lo que se pueda entre te pidió a los reporteros que no hicieran a la Kai Shek se presentó ante la Cámara de Dipu gar desde luego. Ahora se concentra sobre Ale Sra. Chiang preguntas de doble filo. Ella, a tados. Los aplausos que ahí interrumpieron sus mania porque las fuerzas más considerables su vez, hizo ante el Presidente el papel de palabras fueron más entusiastas aún que los están en Europa y existe la posibilidad de ver. hombre fuerte que puede realizar milagros.
del Senado. Los diputados saltaban de cer a Hitler primero. La Sra. Chiang Kai Shek, diminuta, los asientos, gritando frenéticamente; y en las gra Los hombres olvidados. En abril, el genera pies colgando de la alta silla de Roosevelt, esderías, llenas a reventar, los espectadores ha lísimo Chiang Kai Shek envió a los Estados taba empeñada mientras jugueteaba con su bolcían lo mismo que los diputados, violando las Unidos una misión militar para participar en so, en arrancar suavemente al Presidente una normas. Acababa de llegar al climax el dis los planes de la estrategia contra el Japón. promesa de ayuda a China. Mr. Roosevelt, el curso de la ilustre visitante: Encabezaba la comisión el Gral Hsiung Shih gran técnico de las conferencias de prensa, pro Ahora la opinión dominante parcce con Fei. Durante más de meses esperaron los co curaba con igual suavidad, no dejarse marear siderar la derrota de los japoneses como de im misionados que se les invitara a participar en por la técnica de la ilustre dama. Imaginen portancia relativa, y a Hitler como nuestra una junta con los funcionarios militares alia la escena. Doscientos reporteros reunidos. La preocupación principal. Pero no se basa en he dos, para exponerles sus planes; pero esa jun Sra. Chiang sentada entre el Sr. y la Sra. Rooschos reales, ni conviene a los intereses de las ta no se realizó nunca, ni siquiera se vislum evelt, que, protectora, apoyaba su mano sobre Naciones Unidas en su conjunto, el permitir braba su realización.
el brazo de la mujer china.
que el Japón siga siendo no sólo una amena En enero, disgustado al fin, el generalisimo La Sra. Chiang brinda un amable y viza vital, sino una verdadera espada de Damo chino dió a su misión la orden de regresar. vaz saludo, con elogios para cada uno de los cles, lista para caer en cualquier momento. Cuando el Gral. Siung Shih Fei estaba arre presentes. Un reportero lanza un pregunta di No olvidemos que cuanto más tiempo se glando su equipaje sonó el teléfono. El Pre recta. Todo el poder humano de China está permita al Japón el control absoluto de esas sidente de los Estados Unidos tendría mucho lanzado actualmente a la contienda? La dama conserva su firme actitud, pero contesta que Suscríbase al REPERTORIO AMERICANO por medio de los hombres de China luchan en la medida en que tienen municiones. Cuando se envíen STECHERT CO.
más pertrechos a China, más hombres entrarán en la lucha.
SUBSCRIPTION AGENTS Con la mayor facilidad lanzó a sí la pelo 31 EAST 10TH STREET, NEW YORK, S. ta a las manos del Presidente. Este contestó que mandaría municiones con toda la rapidez sus Este documento es propiedad de la Biblioteca electrónica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica