Hitler

Repertorio Americano SEM N RIO DE CULTURA HISPANICA Tomo XXXVIII San José, Costa Rica 1941 Sábado 25 de Octubre Año XXII No. 923 No. 19 En este número: La sublime honradez de Hostos Yuki Onna Página lírica Caliban Antonio Gallo Varias firmas Enamorado Cuesta Luis Villaronga Lafcadio Hearn Mario Hernández, Humberto Mata y Amparo Casamalhuapa Mejía Colindres Strix Brenes Mesén Graciany Miranda Archilla Benjamin Jarnés Cuando será. Hitler y Rosas Testimonios Murray Butler proclama nuestro derecho a la independencia La detención del Gral. Domingo Vázquez en Corinto en 1901 El chotabras Recado vertical al mundo Ejercicios Lámpara de oro alumbrando entre las sombras Ecos y comentarios El Político (IX X)
Violines y cañones La espuela y el imán Pío Bolaños Francisco Luarca Arias Larreta Hilda Chen Apuy.
La sublime honradez de Hostos (En el Rep. Amer. DRUCKS En Itinerario de América, de Buenos Aires, meses y hasta en pocos días algunos improse reprodujo hace unas semanas un artículo de visaron riquezas fabulosas, cunde en todas las Manuel González Prada, publicado original clases sociales el morboso deseo de enriquecermente en Lima, que nos hizo recordar a nues se. Ningún medio de adquirir parece ilícito.
tro Hostos. Nos hizo recordar la honradez, Las gentes se habrían arrojado a un albañal la sublime honradez de Eugenio María de si en el fondo hubieran divisado un sol de oro.
Hostos, en contraposición a las depredacio Cegadas hoy las principales fuentes de riqueza nes de los astutos políticos de los países del nacional cerrado el ciclo de las vastas opeSur raciones financieras, solamente quedan los neManuel González Prada es uno de los es gocios de menor cuantía, los mercados de poca critores más ilustres y de los hombres más in monta, las sisas de cocinera, algo así como las tegros del Perú, su patria, y de Améri sobras del festín, los desmenuzos del pastel, ca. Es una figura continental. Blanco Fom las raspaduras de la olla. la dentellada de bona le dedicó un ensayo, como también a los grandes paquidermos sucede el mordisco nuestro Hostos, en su libro publicado en Ma de los pequeños roedores.
drid, Grandes Escritores de América. Gonza Hasta ahí González Prada. Hay en esos pález Prada fué un poderoso factor de renova rrafos del enérgico escritor peruano un nomción y fortalecimiento nacional después de la bre que nos recuerda a Hostos: es el de Meiggs.
desastrosa guerra del Perú con Chile.
La biografía de Eugenio María de Hostos no Eugenio María de Hostos He aquí algunos párrafos del artículo de podría escribirse sin mencionar a Meiggs. Era González Prada: necesario que Meiggs existiera para la mayor Téngase en cuenta también que cuando la Nuestros mercaderes políticos dilapidaron gloria de Hostos. Contraste de sombra y luz. tentación de Meiggs se le presenta a Hostos los bienes nacionales y convirtieron el Mon Por los mismos años a que se refiere Gon ya éste tenía el alma llena de cicatrices de las tecristo de Sudamérica en mendigo de las bol zález Prada, en que los mercaderes nacionales heridas recibidas de los hombres. Que había sas europeas. Durante muchos años toda la realizaban sus suculentas negociaciones, pere sido engañado por los políticos de Madrid en ciencia infusa de los hacendistas criollos se grinaba por Sudamérica uno de los apóstoles cuanto a los ofrecimientos de reforma para las redujo a saldar el déficit con préstamos con más puros que han existido desde que el munAntillas. Que en París, entre los emigrados pocedidos por los consignatarios; préstamos que do es mundo. Su honradez raya en lo sublime, líticos, había padecido soledad, hambre frío.
eran el mismo dinero fiscal dado con interés en lo maravilloso. Su honradez fué su CalyaQue en Nueva York babía sufrido el desdén subido. Nuestra historia financiera (si por fi rio y su corona de espinas. Estaba nuestro y la mala voluntad de los miembros de la Junnanzas se entiende el pedir dinero para mal apóstol en Lima. Año 1870. Escribía en los ta revolucionaria. Que en Lima, en la misma gastarle y no pagarle) se halla escrita en los periódicos de aquel país, pues quería vivir Lima, había sufrido al ver la desconfianza con libros de corredores y banqueros más o menos únicamente de su trabajo. El contratista que le miraban los nacionales cuando se entejudíos; ahí, en el haber, consta el precio de Meiggs se acercó al apóstol y le ofreció dosraban de que aquel ideólogo extranjero era un las conciencias nacionales. Nada o muy poco cientos mil pesos si conseguía con un artícupobre que se hospedaba en el modesto hotel se benefició el país con el huano y el salitre. lo suyo que el gobierno le adjudicara el con Seronville.
Según Billinghurst, la explotación de las hua trato del ferrocarril de la Oroya. Hostos reY, en el preciso momento en que apuraba neras, desde 1941 hasta 1879, produjo cerca chazó la oferta. Se negó a alquilar su pluma esta última amargura, se presenta el contratista de ochocientos millones de soles; y de esa su al contratista.
Meiggs y le ofrece una fortuna con un prema, solamente diez y ocho a veinte millones Téngase en cuenta que Hostos andaba por texto en apariencia decoroso, a la mano. fueron invertidos en obras públicas. La rique Sudamérica en propaganda por la libertad de el sublime Hostos no la acepta ni siquiera coza nos sirvió de elemento corruptor, no de las Antillas; que Hostos pudo haber cogido mo compensación a los diez años de lucha y progreso material. La venta del huano, la ce ese dinero con el pretexto de que era para delebración de los empréstitos, la construcción peregrinación dolorosa por su querida revo dicarlo a la lucha por la independencia de Culución. como él decía.
de ferrocarriles, la emisión de los billetes y ba, pues la insinuación a ese respecto le fué ¿Habráse visto en los anales humanos una expropiación de las salitreras dan margen a hecha. Pero el sublime apóstol, según rechazo los más escandalosos gatuperios. Los contraprobidad semejante a la de Eugenio Maria de la venduta, rechazó el pretexto que se ofrecía Hostos? Ese solo gesto de Hostos, entre mil tos con Dreyfus, Meiggs y Grace, equivalie como decoroso. Podía aparecer como decoroso que constituyen su vida y su obra. no basron a la celebración de grandes ferias donde ante los hombres, pero no ante su conciencia taría para inmortalizarle. No le da derecho figuraron como artículos de venta y camba y eso bastaba para rechazarle. Ya Hostos anlache, los diarios, los presidentes de la Repú teriormente se había negado a recibir dinero a la recordación agradecida y emocionada de blica, los Tribunales de Justicia, las Cámaras, su patria, de las Antillas y de América?
de los cubanos para que no se creyeran que los ministros de Estado, los cónsules y demás su propaganda libertaria estaba maculada por LUIS VILLARONGA funcionarios públicos. Al ver que en pocos el interés.
San Juan, Puerto Rico, setiembre de 1941.