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REPERTORIO AMERICANO 191 El alma y el tiempo (En el Rep. Amer. LUIS ULLOA UGARTE y Hnos. FABRICANTES de LADRILLOS REFRACTARIOS los que benefician café e importan maquinaria para lo mismo, recordamos que no deben importar sus Ladrillos Refractarios, PORQUE AQUI se PUEDEN SUPLIR de PRIMERA CALIDAD, con gran ahorro de numerario.
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en mí San Juan, Puerto Rico.
LUIS VILLARONGA El llanto de. Viene de la pág. 184. por mí cuando desperté y miré en torno y vi el rayo de sol ese rayo de sol que yo tanto amo, me dije. cómo construiré yo mi día. Cómo actuaré yo durante el día para construir un hermoso día. Un día hermoso y fuerte. Un día como una arquitectura. Un día sólido y profundo. Cómo actuaré para que, llegada la noche, yo pueda sentirme sereno, tranquilo, contento? sentí el ansia honda fuerte de actuar convenientemente; de actuar serenamente, pulcramente, nítidamente. Sentí el deseo vivísimo, ardoroso, de que mis actos, mis palabras, y aún los movimientos de mi cuerpo, y aún el ritmo de caminar sobre la tierra, fuesen claros y armoniosos. miré el rayo del sol y me senti inundado de ternura. sentí una ternura infinita y profunda por el día que empezaba. Por el dia puro, tan cándido, tan sereno, tan radiante.
Tan ajeno al tumulto. las preocupaciones. los rencores. El día que yo podía ir desgranando si quería, minuto por minuto, serenamente, gozosamente, mientras miraba el movimiento del rayo de sol en el piso del cuarto. yo sabía que aquellos minutos podían ser míos todos, y yo gozarlos profundamente, descendiendo en cada uno de ellos hasta el fondo de mí mismo. yo sentarme en mi sillón frailero y mirar a cada uno de esos minutos con cariño; más aún, estrechar a cada minuto contra mi corazón, reconociendo en cada uno una dádiva maravillosa que yo recibía para que yo, en el fondo de cada uno de ellos, pudiera encontrarme a mí mismo y contemplarme a mí mismo llorar sobre mi de gozo, de ternura, de ansiedad. entonces, así recogido en mí mismo, reconocer la identidad de cada minuto con mi propia alma; que el minuto fugaz y mi propia alma eran una y la misma cosa. reconocer que el Tiempo es el alma y el alma es el Tiempo sentir que si siento gozo es porque siento a mí mismo y porque yo soy una armonía; porque yo soy compendio de todas las armonías: la armonía del cosmos, la armonía sideral, la armonía de los átomos en vibración perenne, la armonía de las fuerzas de cosmos que en mí gravitan ahora armónicamente, que en mi danzan ahora equilibradamente, gozosamente. en mí sonríen. Porque no soy yo quien sonríe. Es el cosmos. Es toda la armonía sideral. Las estrellas mismas sonríen en mí. Mi euforia es la armonía cósmica que se manifiesta por medio de mí. yo digo al artista: Todas tus miradas, tus contemplaciones, tus gozos, tus ternuras, tus experiencias, tus dolores, van todos al sótano de tu subconsciente allí se quedan.
hasta que un día, en un momento de euforia, en un momento de inspiración, surgen todos en una sintesis maravillosa, en un raro compendio de alma y de universo. Se abren como una flor. Emergen en el espacio como una estrella. Es la luz de la clarividencia. Es la visión interna y radiante del cosmos. Es como un cristal claro a través del cual se percibe la esencia de las cosas. En nosotros experimentamos la sensación del universo todo. Intuimos nuestra identidad con el universo todo. Sentimos nuestra solidaridad con el universo todo. así como antes sentíamos nuestra identidad con el tiempo la sentimos ahora con el espacio. asi vemos claro que el tiempo y el espacio no son más que cosas que están dentro en la luna, y la sombra que lo acompaña de cerca, eran una sola sombra larga. El viajero y su sombra: Quién eres? Me llaman Sombra. Sombra y llanto. Llanto y sombra. Ay del que ha perdido su sombra. Ay del que ha perdido su llanto! Se abre una puerta.
Sale San Pedro a ver quién llama. Hablan en romance viejo. Escuchad. brazos de la rusa, otra María de las estepas.
Trajo hasta sus versos el hipo del sollozo, aquel rosario de perlas desgranadas que botan y rebotan y no se deciden a acabar. Perdió en el naufragio su Estetica de los perfumes. Qué Des Esseintes! Desde el cementerio, lo llamaba, lo fascinaba la sombra de su hermana. una noche, una noche toda llena de rumores y de lágrimas, se encaminaba, solitario, a la tumba de los suicidas.
Lo circunda el campo americano, más que aquella atmósfera capitosa que hacen los perfumes de París. Es el campo en que se abren el pecho las guitarras, en que planen su falsete las voces campesinas. Las estrellas son gotitas de lloro. La flecha venenosa del indio vuela todavía por el aire, trocada en lamento. Esa vieja lágrima de Urbina, que viene del fondo de la raza. Esa pupila turbia de Horo. en Díaz Mirón, poeta de bronce, mas bronce con arrullos. Qué hacer con la vida, sino acabar con ella. Cómo poseerla del todo, sino estrangulándola contra el corazón? El ansia vital acaba por volcarse en la muerte, porque no le basta la vida. Allà va sólo con su desesperación, vacío de plenitud nunca satisfecha, el joven dandy infortunado. Su sombra. De dónde vienes, viajero. Vengo de llorar, San Pedro. No entiendes mejor oficio. Si lo tengo, no lo quiero. No sabes que aquí se canta?
También es el canto acerbo. No sabes que aquí se rie. Pues cierra tu puerta, viejo. Qué vas a hacer en la puerta. Sentarme a llorar, San Pedro, contar a todo el que llegue por qué me echaron del cielo, que yo no puedo olvidar las tristezas con que vengo.
Los que lloran como yo sabrán lo que pasa adentro.
Se sentarán junto a mi, y haremos un campamento.
Adentro se habrá de oir la voz de nuestros lamentos hasta que logre callar a los que cantar ad entro.
y al cabo de muchos siglos será tanto el sentimiento, que llegará a los oídos del Eterno, y él mismo vendrá a saber por qué lloramos los muertos. De dónde vienes, viajero. Vengo de llorar, San Pedro.
ALFONSO REYES Dr. García Carrillo Electrocardiogramas Metabolismo Baral Corazón. Aparato Circu atorio CONSULTORIO: 100 vs. al Oesto de la Botica Francesa Teléfonos: 4328 y 3754