Civil War

318 REPERTORIO AMERICANO Etica para los costarricenses (Envio del autor) Monseñor Claudio Maria Volio y Jiménez, Obispo de Santa Rosa de Copán, en el próximo aniversario del 11 de abril de 1856.
vidada y paupérrima Provincia se inició y mantuvo durante el régimen federal, del que fué el estado más fiel y cumplido mereciendo por ello que el prócer Arce primer presidente de nuestra patria le consagrara el libro justificativo de sus actos en pro de nuestra federación.
dorra o Recuerda que en la gente unionista de Morazám el Padre de la Patria Costa Rica, despotizada, aislada y segmentada por Carrillo, acudió al más grande de los centroamericanos llamándolo como a su libertador, recibiéndolo y aclamándolo como tal por medio de los Moras, los Peraltas, los Pachecos, los Calvos, los Castros y las más ilustres familias costarricenses; que anulados los actos despóticos y separatistas de Carrillo y reintegrada Costa Rica a la República Federal, la reacción que culminó en la tragedia horrible del cruento sacrificio del Padre de la Patria, no fue incubada ni dirigida por un nativo costarricense sino por un aventurero foráneo que halagó las bajas pasiodes intereses mezquinos como diez y ocho años después pasiones e intereses semejantes sacrificaron a Mora y a Cañas, salvadores de la independencia centroamericana.
queo que el Destino diputó por patria nuestra.
Entonces, desplegada a todos los vientos la bandera azul y blanca del 21; erguidos los cinco volcanes como escalas de Jacob; luminoso y vitalizador el sol naciente; sereno, reconfortante, aplacador el arco iris: y batientes los dos océanos como tributarios del pueblo céntrico del mundo, verás a tu Costa Rica resplandecer como fúlgido diamante en la divina constelación de cinco estrellas que servirá de norte, de consuelo, alegría y esperanza a la redimida humanidad.
SALVADOR MENDIETA.
e Este artículo fue copiado del Nº 35 del Semanario Nacional de 23 de marzo de 1930, de Diriamba; periódico del que era Director el Dr.
Salvador Mendieta.
Oye, tú, quien quiera que seas, si has nacido entre el Sapoá y el Sixaola y entre uno y otro mar, ya procedas de la meseta interior, ya de las llanuras guanacastecas, ya de las tierras anegadizas del Sarapiqui, Parismina o Siquirres, ya de las húmedas y ardientes del Golfo Dulce, El General o Puntarenas. No te creas aislado en el mundo como ciudadano de la república de Costa Rica, diminuta, despoblada, pobre y ridícula en su pequenez aldeana de república gemela de AnSan Marino: piénsate, por el contrario, y siéntete, miembro del pueblo centroamericano, llamado a polarizar las energías de cuantos hablen español y portugués y en cuyo territorio predijo el Libertador que estaría la sede de la capitalidad del mundo; y aspira por lo mismo a que tu nativa Costa Rica se funda de nuevo en la República de Centro América, que centralizando a los hombres hispano lusoparlantes allanará el camino de la República Universal, donde convivirán en el trabajo, la cooperación y el amor los hombres del mañana, sin distinción de razas, de credos, ni de idiomas. No te creas distinto del nicaragüense, el hondureño, el salvadoreño o el guatemalteco ni, por ende, los reputes extranjeros cuando lleguen a buscar el hogareño calor de tu atrayente y dulce Costa Rica: recuerda que indias y españoles son los padres del pueblo centroamericano a que pertenecemos; que desde los albores del descubrimiento y la conquista Costa Rica forma con el resto de Centro América una sola demarcación administrativa y, con Nicaragua, una sola provincia eclesiástica, militar y civil; recuerda que todas las familias costarricenses, por una u otra rama, están enlazadas con las del resto de Centro América, especialmente con las de Nicaragua; no te olvides que ni en Nicaragua, ni en Honduras, ni en El Salvador, ni en Guatemala, se te tiene a ti ni a ningún costarricense, por extranjero y ni siquiera por extraño al nativo hogar nicaragüense, hondureño, salvadoreño o guatemaiteco: corresponde, pues, al cariño de tus hermanos, pensándote y sintiéndote que formas parte de la familia centroamericana ligada por Dios a un común destino en el pasado, el presente y el porvenir.
Recuerda que el esfuerzo bendito de la independencia se debió a Centro América, unida y grande, y no al de cada provincia; que Goicoechea de Cartago la preparó en la silen.
ciosa labor de las escuelas; que Cerda y Argüello de Granada, la vitalizaron con arresto heróico desafiando la fuerza formida.
ble del rey; que Arce y Delgado de San Salvador levantaron el estandarte de CentroAmérica, ofrendando sangre, vida y hacienda; que Valle de Choluteca cristalizó en el acta inmortal los anhelos del alma colectiva centroamericana, empujado por Larreinaga de León estimulado por Aycinena, Barrundia, Molina, Bedoya, Córdoba, Montúfar, Castilla Diéguez de la ciudad de Guatemala y aclamado por el pueblo viril de esa capital, a quien sobre todo y ante todo debemos la ruptura de las cadenas realistas y la semilla fecunda del árbol de la libertad.
Al enorgullecerte de Santa Rosa, de Rivas, de San Juan del Sur, de San Carlos, El Castillo, el Río San Juan y Granada, fíjate que la épica Guerra Nacional no se llamaría así ni se habría realizado si Centro América entera no fuera, como es, una sola e indivisi.
ble nación, una sola sensible mano, cuyos cinco dedos no pueden aislarse ni desentenderse unos de otros, y a ninguno de los cuales puede tocar mano extraña sin que la nuestra recogida formidable no le dé el punetazo mortal que simboliza el monumento erigido en San José con el nombre que representa a CentroAmérica en la integridad de su ser; y sin que deje de verse en la tiniebla estigiana de los odios que engendra la guerra civil esa mano bendecida levantar la tea luminosa de la fraternidad y el heroísmo empuñado por el Erizo indio, descalzo y sencillo en su abnegación inmortal, y que lo mismo pudo nacer en Jalapa, Cojutepeque, Teriguat o Nandaime que en Alajuela. Elevándote sobre el patriotismo de aldea.
que tenían los caciques güetares, dirianes, niquiranos y caribisis de tiempos préteritos, piénsate y siéntate centroamericano y mira sin miedo el porvenir, cierto de que restablecida la unidad nacional de Centro América vendrá la seguridad de la independencia, la base granitica de la paz, el florecimiento perpetuo de la libertad y el bienestar sin tasa que a sus hijos brinda la quintesencia del globo terrá¿Cómo se forma el héroe nacional?
El héroe nacional es necesario, es manifestación sociológica de este drama llamado historia. Cómo se forma el héroe nacional?
Aquel que fué brazo y boca de los instintos, limitaciones y tendencias de un pueblo (gentes que desde largo tiempo conviven en terreno más o menos circunscrito. ese tal fue hombre fuerte, porque palabra y obra ftan representativas (latencia biológica. el futuro se asomaba en él. Durante su vida aparece triunfante, bandera, a pesar de momentáneas derrotas (que son los momentos en que surgen instintos opuestos, anárquicos. Muerto, vive como símbolo y guión. ¿cómo se forma su imagen histórica?
Los pueblos, inconscientemente, le quitan lo impropio y le aumentan virtudes: es la obra lenta de la purificación. En tal sentido la historia es mistificadora, pero mistificadora lógica y que responde a necesidades vitales del devenir. El pueblo va haciendo del héroe la imagen de lo que desea llegar a ser; en ella materializa su programa, encarna su futuro. Es el mismo génesis de los dioses, en escala menor.
Dios es lo que nos falta y lo que anhleamos: es el hombre perfecto, el ideal en cada época de épocas. También el cielo es la morada en donde hallaremos lo que anhelamos, todo integro. No es Dios, pues, el creador del hombre, sino que éste crea a su imagen culminada a su Dios; y crea también su casa ideal, el Cielo, e inventa su héroe político, el Héroe Nacional.
Así, sin culpa, es como se falsifican los documentos, destruyendo los perjudiciales, interpretando favorablemente las dudas y creando leyendas. Inmenso poder del espíritu humano, que se unifica con el todo en el abismo (subconciencia) y cuya cima lleva lucecilla admi.
rable, engañosa pero divina: la conciencia. Inmenso poder del espíritu humano, con su facultad de olvidar lo perjudicial, y agrandar y tener presente lo que le conviene. Creador así de dioses, cielos y naciones! En tal sentido el hombre es creador. Fernando González, Santander. Bogotá, 1940. su Todo el progreso humano está detenido por los obstáculos que ponen las frases hechas de los partidos y de los pedantes. Un ejemplo de ese obstáculo es el argumento tan frecuentemente empleado para impedir que se haga ninguna reforma radical en nuestro sistema educativo, es decir que la educación secundaria deberia darse solamente a los muchachos capaces de aprovecharla. Hoy en día, esos argumentos han sido relegados al pasado. Ten presente que la prosperidad de Costa Rica, que durante la colonia se llamó la ol(J. Howard Whitehouse, Inglaterra Moderna, London, de agosto de 1941.