REPERTORIO AMERICANO 291 Páginas líricas (En el Rep. Amer. El autor de estas poesías es un joven: Mario Hernández. Joven apenas de veinte años. En el Liceo de Costa Rica, de estudiante, dejo huella luminosa. Tres disciplinas diéronles alimento a sus mejores inquietudes: la literatura, la psicología y la biologia. Desde que era apenas un niño, escribe versos. Su temperamento asaz emotivo sólo encuentra apropiada expresión en el áureo molde del verso. Dijérase que vive atormentado por aprisionar lo mejor de su vida, lo más hondo de su ser entre los hilos misteriosos de la poesía, tal como lo hacen las almas privilegiadas, las que se abrieron a la vida para trocar el dolor en milagro de una canción. El joven poeta, lo es de verdad. Agil de espíritu, encuentra ahora en el refugio generoso de la moderna forma, el mejor cauce para derramar la pujanza de un subjetivismo tan hermoso y tan puro como su edad. La edad que hace inmortales a quienes dijeron en ella un mensaje henchido de lo eterno.
Costa Rica, octubre de 1941.
Mientras Yo, Otoño, Escribo sinfonías de colores en mis Tamas, al peso doblegadas, el tiempo pasa y caen frutas que sólo aguardan blancos dientes que se hinquen en su carne, de miel y luz colmada.
Mientras Yo, Pozo, rezumo por mis poros agua fresca, la del tis tis que es música de noche sin estrellas, no hay un cántaro cántaro que baje a mis entrañas, para hacer el milagro sin palabras de henchirme y ser henchido.
Mientras Yo, Parra, aguardo suaves manos, que estrujen mis racimos en sus labios con sed de sed ajena, corre y corre mi savia buscando en vano escape, enloquecida en la terrible espera.
Mientras Yo, Anfora plena, busco en vano una copa donde escanciar mi vino, las gotas que rebosan humedecen el polvo. sólo van dejando una hilera de círculos que marcan en la tierra mi camino. soy brasa que espera el huracán que aviva, reloj que aun no ha dado sus doce campanadas, o suspiro de vieja repujada vajilla que aguarda sólo el día en que ha de ser besada. Tú)
Forma sin forma: niebla.
Carne volada en gajos: osamenta. Yo)
Mi taladro traspasa el viento de tu alma, y no hay roca, ni chispas, ni fuego en tus entrañas. Tú)
Agua que se desliza por un vidrio: escarcha.
Lava lavando montes: catarata. Yo)
Mis ansias son silentes en su silencio mudo; tu mutismo es callado, pero también es turbio. Tú) HERNÁNDEZ Luz de luna en un bosque: frágil cuna.
Desierto al mediodía: tosca tuna.
Setiembre 23 del 41. Yo. 0Leningrado vencerá!
Te quiero y sólo el eco a mis gritos responde; te busco y no te encuentro. Dónde estás. dónde. donde. Tú)
Dos tornillos sin fin. Yo) M. HERNÁNDEZ Setiembre del 41.
Beba cervera SELECTA El corazón se empina en el aliento helado; la sangre flamea trombas de voces en disturbio; la arteria y la carne, la piel y la lengua se yerguen y claman. Leningrado está er peligro!
Polen y clorofila, rizomas y cortezas, savia y fruto; ala y vegetal, piedra y césped, cemento, arcilla vidrio: abrid vuestras vidas y escuchad este grito. Leningrado está en peligro!
Matriz y orgasmo genitor del ideal en eterna verdad; porvenir y preñez, sed, hartura, latitud y meridiano; abismo y Sol, estremecéos banderas de huracanes. Leningrado está en peligro!
Volcanes indios de la América viva, Tetemplad vuestros pasos, amartillos la voz, ponéos al hombro vuestras venas coléricas, y de frente a Leningrado!
Que el Amazonas ruja verticales sus nervios; que las selvas se eleven en las verstas proficuas; que los Andes petrifiquen sus cabezas de cóndor y que todos rodeen sus múltiples trincheras en torno a Leningrado.
Pensamientos, tornaos en fusiles y aceros!
Libros, haced barricadas y plumas bayonetas!
pues millones de estrellas trabajadoras rojas están en Leningrado!
Id, elementos simbólicos de la América Indiana.
Pero nó! Sobráis en la defensa de nuestro Leningrado!
Aqui el pecho del Hombre se ha vuelto cbús y tanke; aqui la sangre se hizo metralla bombarderos, De malta y lúpulos