78 REPERTORIO AMERICANO (Viene de la pág. 80. Sólo será una yoz Escribe: Agenor ARGUELLO. En el Rep. Amer. Como el herrero forja el hierro y el constructor construye casas nuevas.
Como la mano arroja al surco el grano fértil.
Como en el buche del pájaro el nido da la nota; como el verso poliedriforma al poeta.
Con aliento lapidario que brota de las manos de los fuertes.
Con la palabra musculosa, con lo que nace de la nada y se proyecta, con el milagro inaccesible del espermato, con la fe, con el grito, con la rueca.
con los cantos de los arrecifes, con el soplo pulmonar de los vientos, con el sudor del hombre sobre los sexos, que son surcos abiertos como brazos en la púber emoción de toda espera, que son milagro y son poema que son gracia que son verso.
Frente a esto, lograr uno solo de los principios consagrados, el de la unidad, significaba el planteo de un arduo problema, que solucione haciendo concurrir en un lugar y a una hora eminentes de cada pueblo vinculado directamente a la gesta del Libertador, a personajes y acontecimientos que realmente debieran estar muy enlazados y próximos.
Deben ser conceptuados como felices aquellos pueblos que tienen por hijos hombres de la envergadura moral e intelectual del soldado, poeta Edgardo Ubaldo Genta, espíritu lúcido y vibrante y sereno, digno representativo de la grandeza literaria hispanoamericana, que ha sabido volcar en estrofas de ritmo y cadencia impecables el sentimiento cívico y varonil de los pueblos libres del Nuevo Mundo que tuvieron en Bolívar a su más grande y egregio adalid!
El general Genta al dar a la luz pública La Epopeya de Bolivar no ha tenido otro norte que glorificar en cantos homéricos las incomparables y jamás superadas hazañas del Genio de la libertad, para que ellas se transmitan a futuras edades y puedan supervivir al mármol y al bronce. Genta ha puesto en cada verso de sus Poemas Américos de los cuales es parte inintegrante La Epopeya de Bolivar, todo su amor a la libertad, toda su ardiente pasión a la gesta emancipadora, toda su inspiración de bardo y toda su fe de soldado, de patriota y de sin par americanista. Cada frase alada de Genta, exalta, emociona, conmueve, deleita y coloca al lector frente a la figura prócer de aquellos grandes capitanes que con Bolívar rcdimieron una raza esclava y mártir!
Con eso y algo más. Con eso y algo más estás hecha oh, Verdad venidera, luz que vienes bogando de la noche, mar sin límite, noche sin frontera.
Sólo será una voz. La voz abierta del hombre nuevo a una conciencia nueva.
Sólo será una voz. La voz cerrada del útero. La voz eterna.
Cuán plausible sería que los gobiernos de esta nuestra América convulsiva y siempre revolucionaria, adquiriesen algunos ejemplares del libro La Epopeya de Bolivar, para distribuirlos entre aquella juventud que todavía estudia y lee y asimila las nobles enseñanzas de aquellos capitanes que liberaron y organizaron naciones en América Latina. Cuán grato sería que apartándonos de ese materialismo que infecta las almas, volvamos nuestras miradas y nuestro espíritu a Bolívar, tal cual lo hacen muy pocos pueblos y para esto, nada más aconsejable que leer calmadamente, amorosamente, La Epopeya de Bolivar, el más bello libro que escribiera el más grande poeta del continente. Genta!
Luis TERAN GOMEZ.
La Paz. Bolivia, 1949.
La voz eterna que nos llega de lejos.
La voz eterna que nos viene de adentro.
La voz del mar que clama en sus oleajes enfurecidos.
La voz del sueño.
Inconmensurable. Hórridamente fantasmal.
Vaga y ascética.
Ambigua y exacta.
Arquitectural y recia.
No es la idea ciega en el anhelo de los gérmenes potentes.
No es el andamio de velas inseguras, mástiles agarrados poderosamente a las crenchas del viento.
No lo remoto; no lo vago; no lo efímero; no lo frágil; no lo que tiene la característica religiosa del amuleto.
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conseguir una suscrición al Repertorio Americano Es lo eterno del hombre en la concreción de sus vastas posibilidades en la forja del hierro de su propia inteligencia.
El brazo del obrero, el arado del hombre de los campos, la piqueta del minero, el rapsoda navegante en la góndola de luz de su quimera; el hacha que derriba; la doctrina que incendia. Todo.
Todo será una sola voz.
La voz cerrada dei útero en el engendro de lo eterno.
Octavio Jiménez ABOGADO NOTARIO Oficina: 25 vaars al Oeste de la Tesorería de la Junta de Protección Social TELEFONO 4184 APARTADO 338 Managua, 20 de noviembre de 1949. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica