Violence

REPERTORIO AMERICANO 149 Encuentro de un hombre solo con otros hombres (En Rep. Amer. IV qué me lo dieron ya cortado y seco, qué me enlataron, qué me desgarraron, qué me encogieron, qué me desgarraron, qué me alienaron, qué me enajenaron, qué queda de lo que era cuando aún no era, cuando el tiempo se hubo detenido y yo pude mirarme y conocerme en latitud, on luz, en colorido, y en bronca, recia, fuerte negra y dura profundidad. Ah, si pudiera detener el tiempo y conocerme así, ya detenido. Cómo poder vivir más plenamente?
Señores. quieren que hoy viva sólo una emoción. Quieren que hoy tenga el corazón azul, recién nacido, limpio de hierros y remordimientos y que una sola gota roja sola comenzara a correr por mis arterias una gota granate, calentésimay que su recorrido por mi carne fuera su beso vivo delantando?
No me digáis que esto es buscar la muerte Sólo quiero una vida hecha cristales y no esta huida rota por las horas. Si, por ejemplo, averiguar pudiera si ese pliegue, esa sombra, ese reflejo, son mios, son de mi carne, de mis días.
Si esa mancha amarilla es la tristeza de haber perdido frutos sin poseerlos.
Si ese ceño, esa arruga, ese guiñapo, son de tanto decir. Como usted gusteSi esa pequeña gota de luz clara fué la vergüenza, un día, de verme solo y el deseo de escribir estas palabras.
Quieren, preguntaría. quieren dejarme un solo día bien dueño de mi mismo, dueño de mi trabajo y de sus cosas, y dueño de mis sueños y mis dudas, dueño de equivocarme, de ser tierno, de andar perdido, y de vivir con todos y de cantar con todos una sola una única, hermosa, joven, fresca, grande canción? ¿Quieren dejarme hoy con la piel blanca, con la cabeza como un limonero esperando una sola, una solísima inquietud?
VI II Verla llegar, palpar, tender sus redes.
sentirla como estruja y cómo daña la pulpa en carne viva de mi idea, cómo enciende sus mechas amarillas.
cómo proyecta sombras horrorosas, cómo enturbia y apaga mis sentidos y gecándome va, parasitaria. que una voz amiga contestara. Puedes hacerlo un día, ven con nosotros, juntos te ayudaremos, somos muchos y lo sabemos todo. Ven y trabaja junto con nosotros los socavones de la mina roja, ven y recoge las espigas de oro, ven y cantemos la canción más fresca.
Como tú antes éramos sólo hombres, hoy somos los compañeros de los hombres.
Más lento el ritmo, por favor, más lento, para poderme detener un rato con una sensación: ir saboreándola, tomarle el peso, olerla, dormir juntos, llevarla de la mano por el bosque y preguntarle al fin. Pedazo mío, ime has conocido ya. quieres que hable. mos. tendríamos muchas cosas que decirnos y podríamso, quizás, reconocernos y habituarnos el uno junto al otro a esta hermosa misión de vivir juntos. Aquella tarde volveríamos con el ánimo muchacho como si el aire fuera desnudándose. podríamos, entonces, resolvernos a encontrar otros trabajos y tros días ya como huéspedes, prestos a esperarlos, a batir palmas y regocijarnos al verlos ir llegando uno por uno. Quieren que fuera así? Que hubiera un día sólo del odio, otro de la infamia, de la ternura alguno, y de la duda.
Pero uno tras otro, en orden blanco, no simultáneos, no, que ya no puedo comprender que me queda que sea mío: qué brazo es mío, qué tendón oscuro, qué parpadear agito, qué amor tengo, qué, de todo esto, en fin, me pertenece, Joaquín GUTIERREZ Santiago de Chile, 1951.
Relato de un drama no finito Pero. ay. qué baraúnda, qué deilrio, qué. Buenos días, Señor qué noche es clava.
III Te miro, siento sed, me vienen a cobrar esa corbata que no me sirve, se me quiebra el lápiz, matan a mi vecino, aúlla una mujer pariendo pobre, humillo, sin querer, a un gran amigo, me harto de carne y hojas de lechuga.
leo un folletin de peluqueros, finjo no tener plata para ahorrarla porque mi hijo quiere tener un cascabel.
blasfemo, corro en busca de mi hermano que se está suicidando poco a poco, iquiero pensar. pero esta vida ajena hecha de mis pedazos y no mía burla mi pensamiento y lo convierte en cualquier pensamiento masticado, hecho ya un triste bolo de saliva. En Rep. Amer. En substancia, yo definiría al Ecuador mienzo del libro, que estropean, a juicio de este modo: País que incluye en un ám. nuestro, la hermosura de las descripciones: bito geográfico reducidísimo casi todos los El río Esmeraldas corre sobre un plano climas de la Tierra, de condiciones natu inclinado, veloz como los pies de un atleta rales únicas como las de sus Islas Encan fugitivos de un hexámetro de Pindaro.
su teoría de la evolución y las de su te El viento marinero que viene recorrien.
cho andino en donde el día y la noche son do las áridas llanuras con los pies mojados tadas que indujeron a Darwin a formular de humedad salubre como el viento home.
exactamente iguales en duración. Pueblo in. rico de la Iliada. Los cielos en la monta.
dio y blanco, negro y mulato y mestizo en ña, de azul transparencia, claros y sere.
medio, resumen de los valores esenciales nos como un madrigal de Gutierre de Ceti.
ecuatorianos que va, con una facilidad na. Suaves colinas y laderas inclinadas, increíble, de la violencia al sueño. Toda la con cadencia de oda horaciana dicha por acción constructiva del Ecuador se realiza Fray Luis de León. Pastizales extensos constantemente en un punto difícil de fi en donde, sobre el verde tierno de la hier.
jar entre estos dos estados de la concien. ba, estalla como una metáfora imprevista cia colectiva.
la flor morada de la alfalfa.
El libro de Leopoldo Benítes, Ecuador: El relato, agudamente analizado e inter.
drama y paradoja, entreabre al lector esta pretado, abarca toda la vida del Ecuador, fantástica perspectiva. En términos pre desde sus primeras manifestaciones con cisos, constituye una de las síntesis más fundidas con la leyenda, hasta la edad en vívidas que se han hecho de la historia que. bajo la República, se debate aún por del Ecuador. Decir síntesis es ya ello una definir su forma visible.
ejecución feliz que implica una disciplina País de violentas desemejanzas natura.
intelectual. cuando está lograda con cui les la costa tropical, el callejón interan.
dado estético de la forma nos hallamos en dino y el oriente amazónico su diversa tonces en presencia de un escritor de cate. fisonomía física no sólo imprime un carác.
goría. Sentada esta calidad, no podemos ter distinto a los varios grupos humanos, dejar de anotar ciertos aditamentos, al co sino que disocia, separa la sociedad ecua todo esto me ocurre en un instante.
el tiempo breve que entre dos insomnios.
llamamos día. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica