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REPERTORIO AMERICANO 205 El Rey de los Hunos un conocemos el gato en la liebre) la exhiben lasti enseñe la pronunciación peninsular, siempre que de nervios; eso de llamarse con orgullo El Azote mosamente algunos oradores, cantantes, recita el objetivo del estudiante norteamericano no sea de Dios y de hacer correr la noticia de que donde dores y anunciadores de la radio, criollos genui el de viajar por la América, declaramos que re pisaba su caballo no volvía a nacer hierba, no nos con infulas de castellanos viejos, y muchassulta enfadoso para un hispanoamericano educa era sino su forma de la guerra de nervios. Por veces hemos tenido que reprimir el natural im do que colegiales de este país le estén pregun otra parte, también hizo muchas conquistas con pulso de gritarles a la cara que no sean majade tando si habla Castilian o algún dialecto pre la ayuda de los traidores.
ros. Parece que ciertos americanos padecieran de colombino.
El paralelo se puede prolongar todavía en muun complejo de inferioridad de ser americanos, CRISTIÁN RODRÍGUEZ chos aspectos. Es el mismo ejército voraz que hoy pugnando por parecer lo que no son. c: 11 42nd St. New York, se lanza sobre los países más civilizados, de EuSi bien nada tenemos que objetar a que se ropa. el mismo de hace veinticinco años, que también quería proteger a Bélgica, y que en sus ciudades ocupadas ponía, como lo cuenta Clemenceau en Grandezas y Miserias de una Victoria. la palabra pillaje en los afiches militares que indicaban el camino de los almacenes en (De El Tiempo, Bogotá, 15 de mayo de 1940. donde se guardaba el producto de las rapiñas cuyo carácter oficial era así reconocido.
Anunciaban ayer los cables que dos mil carros tos y los cantos salvajes dominan algunas veces alemanes avanzan por algún sitio de los países el estruendo de los carros y de los caballos. Es No es, pues, Hitler, el creador original de su Estado conquistador. Ese carácter le viene al invadidos, formando carrousel infernal. la misma horda ruda, cruel, y dócil a la volunEstado alemán desde los hunos, acaso desde muMuchas veces en el curso de esta guerra se ha tad del jefe la que avanza por los mismos paicho antes. Los germanos que marchaban en los recordado a los bárbaros y se ha citado a Atila ses, quizá también hacia lo mismos campos Cacjércitos de Atila, confundidos con eslavos y a propósito de Hitler. Pero estos dos mil carros taláunicos, en donde al fin iba a see vencido El infernales, cómo hacen pensar, más que ninguna mongoles, y profundamente mezclados con los Azote de Dios.
hunos, no han perdido en mil quinientos años el otra imagen, en las carretas de los hunos.
Cuando Atila invade las Galias, hace correr sabor acre, excitante, enloquecedor y fatal de sus Atila nació en una carreta, mientras la hor el anuncio de que él hace la guerra únicamente da rodaba por las llanuras danubianas.
antiguas correrías.
Esto a los romanos, y que los galos no tienen nada lo celata Marcel Brion, en su admirable vida Pero frente a ellos, los pueblos civilizados de que temer, no obstante que va incendiando sus del rey de los hunos, de cuyas páginas sur ciudades y violando sus mujers, de la misma maOccidente tampoco pueden olvidar indefinidage a cada instante el más impresionante paralelo mente, las estrechas alianzas que para detener nera que hoy Hitler jura y perjura que ha invaaquel incendio tuvieron que formar contra esos con Adolfo Hitler, en muy parecidas circunstan dido a Holanda y a Bélgica para protegerlas, y cias. Atila lanzaba sus jinetes y sus carros sobre bárbaros, una y otra vez. Porque sólo cuando lo que sólo hace la guerra a los ingleses. Peco deciudades y ciudades, poc el mundo entero, pillan trás del anuncio de Atila llegan los aterrados recuerden, llegará a encontrar a Hitler sus campos Cataláunicos. no olvidar tampoco, que hoy do y arrasándolo todo. En los países conquis fugitivos que relatan los horrores de la invasión en los pueblos de Occidente hay que contar a tados una parte de la población civil se quedaba, por Bale, por Strasburgo, por Tongres, por BeAmérica, que no está tan lejos de Hitler con sus se establecia, se hacía dueña del comercio. En sanzón, por Arcás, desde el Jura hasta el mar.
flotas, como lo estaban de Atila, sobre sus carre.
aquel tiempo todos los pueblos de Europa y de Atila se ve detenido de pronto, después de tas y caballos, las tierras de la China, ante cuya Asia estaban poseídos de un miedo cerval a Ati largos meses, ante los muros de Metz, y luego la, como hoy ante Hitler; a ese pueblo bárbaro gran muralla aquel huno llegó.
ante los de Orleans, que para la época eran tan que se había propuesto dominar al mundo con formidables fortalezas como la actual línea MaALEJANDRO VALLEJO.
vencido de su superioridad sobre el resto de la ginot, ante cuya resistencia se ha visto también humanidad. Pueblo que no tenía religión, los detenido Hitler durante largos meses.
Tome y lea hunos acogían las creencias y los sentimientos Los hunos eran malos asaltantes. dice Brion, de las naciones que iban conquistando, pocque así como eran invencibles en las llanuras. Su Leopoldo Lugones: Lunario sentilo que les importaba a los hunos no eran las gran secreto era la rapidez desconcertante de mental 00 almas sino los bienes materiales, el vino, las mer sus carretas y de sus caballos, de igual forma Rubén Darío: Cantos de Vida y Escancías, las mujeres. Como hoy en Dinamarca que Hitler es desconcertante con sus guerras re peranza 00 sojuzgada, Alemania procura mantener las tra lámpagos, de paracaidistas y de cartos blindados Rafael Cardona: El sentido trágico diciones de los países invadidos para no lastimar del Quijote por regiones que no están suficientemente pre3. 00 sentimiento nacional. según reza una leyenda venidas.
Ernst Henri: El plan de Hitler 00 publicada recientemente en un diario, al pie de Pero Atila no era un gran guerrero; él era soEnrique José Varona: Violetas y una fotografia de la guardia alemana en el pa bre todo un diplomático. Tenía el genio de los Ortigas 00 lacio de Cristián. Un diplomático, el embajador grandes proyectos. de las combinaciones. Ven Con el editor del Rep. Amer. los condel rey Theodosio, escribe un diario de su misión ció a los pueblos en gran parte por una guerra sigue. Calcule el dólar a 00.
ante Atila, de una gran semejanza con el sensacional libro que ha publicado recientemente el último embajador inglés ante Hitler. Cuenta que encontró a Atila rodeado de sus ministros y generales, y agrega: Fui sorprendido de ver la simplicidad extrema de sus vestidos, en tanto que los jefes hunos estaban vestidos de telas delicadas de vivos colores, probablemente robadas en sus expediciones a China y Persia, bordadas de pájaros y de flores. Ve uno la austeridad de Hitler la fachenda de sus mariscales agobiados de bordados en sus uniformes, y de condecoraciones. Atila observó primero al embajador con curiosidad, pero cuando éste le presentó los votos de Theodosio por la buena salud del rey de los hunos, Atila, arrugando el ceño, contesto: Que les ocurra a los romanos todo el bien que ellos me desean. con un súbito furor presenta una escena muy penosa en que Atila enredo de rabos se irrita enormemente, como en las cóleras de Hitler ante los diplomáticos.
Después de arrasar campos, de pillar ciudades, de dejar detrás de sí países desolados, Atila se lanza sobre el imperio de Occidente. El tropel Poco edificante el espectáculo. Y, evidentemente, entre más tiran, entre más violencia, más de la horda hace un ruido estentoreo. Los grise complican. Kyo. у (el inter imperialismo por ej. KYO Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica