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1Repertorio Americano SEMANARIO DE CULTURA HISPANICA Tomo XXXVII San José, Costa Rica 1940 Sábado 20 de Abril Núm. 11 Año XXI No. 891 Contenido: Testimonios Enrique Espinoza Varios Waldo Frank José Carlos Mariátegui En el décimo aniversario de la muerte de José Carlos Mariátegui Del homenaje argentino a José Carlos Mariátegui.
Una palabra sobre Mariátegui Dos articulos (1925)
Tome y lea.
José Carlos Mariátegui recordado por Armando Bazán Gabriela Mistral y el premio Nobel los españoles La siringa Tres poemas Un cuento y dos poemas Rápido comentario sobre la poesía de vanguardia Pienso en Alfredo Suárez Dos sonetos Lo que hizo con sus puños Varios Ximénez Jean Groffier Joaquin Gutiérrez Amalia de Sotela Hugo Lindo Lisandro Alfredo Suárez Joaquín Edwards Bello Blanca Luz Brum Norberto Pinilla En el décimo aniversario de la muerte de José Carlos Mariátegui justiciera apreciación. Porque Amauta. como insinuamos de entrada, era en primer lugar el mismo Mariátegui. Quien tocaba la (Colaboración para el Rep. Amer. rivista, podría decir, parafraseando a Whitman, que tocaba a un hombre.
II Hay revistas que valen por la calidad de sus colaboradores o la inteligente disposición de sus materiales, y revistas cuyo más alto mérito está en el trabajo asiduo de su director.
No tenemos por qué repetir que Amauta era de estas últimas, puesto que ya aseguramos que valía sobre todo por el aporte personal de Mariátegui. El Amauta Mariátegui, dijo alguien desde un principio, confundiendo al órgano con su organizador. así el nombre incaico al que la revista no daba mayor importancia en su acepción original, vino a ser también un título para su piloto.
En Amauta aparecieron mes a mes, durante varios años, las mejores páginas de José Carlos Mariátegui. Gran parte de sus Siete ensayos para una interpretación de la realidad peruana. toda su Defensa del Marxismo. y nume.
rosos artículos sobre arte y literaJosé Carlos Mariátegui fura, además de varias notas ano(Por Julia Codesido. nimas, no por eso menos valiosas.
Lima 1929 Tal vez valga la pena recordar en primer término una de ellas y su historia. La revista había sufriI do un serio tropiezo con la policía gentino Juan Justo, antes de En España, tan cara al espíritu de Lima y el director de Amauta Hasta la fundación de Amauta. componer Teoría y Práctica de la de Marx, no se da tampoco, desde explicaba a sus lectores el retraso revista hispanoamericana de orien Historia traduce al castellano el Pablo Iglesias hasta Julián Besen la aparición. Ese era el motivo tación social bien definida, que primer tomo de El Capital no obs teiro, un teórico de orden revolude la nota; un motivo cada vez sirvió principalmente para revelar tante disentir fundamentalmente cionario. Así que José Carlos Mamás frecuente en el mundo actual nos a su propio director, José Car del marxismo. Berns einiano hasta riátegui viene a ser en verdad el y sobre el que se han escrito sin los Mariátegui, nuestro idioma ca la médula, el doctor Justo deter primero que merece el título de duda millares de articulos innocuos.
recía de un verdadero teórico revo mina la corriente pequeñoburguesa escritor marxista en castellano. Fero Mariá legui, que ponía su talucionario del Partido socialista que fun tal vez el único.
lento de escritor en cada línea que Cierto que, al promediar el si. daron con él en Buenos Aires al la entrega inicial de Amauta salía de su pluma, escribe de paso glo pasado, habían salido del mis gunos emigrantes alemanes bajo la precedieron estas palabras suyas, las siguientes palabras que impormo Perú: Flora Tristán; de Cuba: directa inspiración de Engels, en definitivas: Habrá que ser muy ta mucho recoger en su integridad Pablo Lafargue; y más tarde, de 1895. Dicha corriente, bastante es poco perspicaz para no darse cuenpara ubicarlo entre nuestros conVenezuela: Daniel de León. Pero tática, después de todo, sólo brin ta que al Perú le nace en este motemporáneos: ninguno de los nombrados, y hoy da en ambas orillas del Plata una mento una revista histórica.
renombrados, llega por razones langa serie de oradores más o me Todos, hasta algunos de sus ad La época de la libre concurrenfáciles de explicar, a escribir en es nos inflamados, sin superar ni si versarios ideológicos más conspi cia, en la economía capitalista, ha pañol quiera el romántico Dogma So cuos, se dieron cuenta en el acto terminado en todos los campos y principios de este siglo, el ar cialista de Esteban Echeverría. de la conciencia que entrañaba tan en todos los aspectos. Estamos en Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica