BourgeoisieHitler

REPERTORIO AMERICANO 207 que su marido. No hubiera pues tenido Nos hallamos, dice don Enrique y sus hijos ya mayores donde es aco navente no ha defendido este crique confesársela a él. Véase como de Mesa en Apostillas a la escena. gida con melancólico cariño. Pronto men. Ha escrito su drama más somen estas dos obras Benavente parece página 36, ante el retruécano de las se da cuenta de que su falta ha com brio.
decir el adulterio disimulado no ideas. La misma sentencia, apenas prometido seriamente su felicidad y El teatro de Benavente es bien es problema sino en su trascenden desfigurado el hábito de la palabra, su porvenir. Sus hijos se ven aban complejo. En él hay concesiones, cia a la vida social. Pero la otra salta de este al otro personaje. Es la donados por sus amigos: el noviazgo ataques y distingos. En sus tres drahonra, la de su marido, está en pe técnica del concertante zarzuelero, de la hija se deshace. Esa sociedad mas del adulterio, Benavente ha ligro. Se murmura si él conoce el donde todas las voces vienen a decir vil de Moraleda, otras veces combati reaccionado a favor de un ambiente adulterio lo tolera a cambio de lo mismo el tema musical es da por Benavente, crea un ambiente católico burgués español un poco in certos beneficios económicos que por sucesivamente recogido por la cuerda, hostil, cerrado, denso en torno de a quisitorial. Sus críticas aceradas de azar se siguen de una alianza de el metal y la madera. El marido per quella casa. Paulina decide marchar otros momentos han quedado en susnegocios. Lo que puede deshonra dona a la adúltera no hay hijos, se de ella para siempre. Benavente penso. Existe una relación estrecha al marido es su complicidad con una y huyen juntos.
la condena al infierno de vivir seentre estos tres dramas y los analifalta inicial, en este caso, la de su En La ley de los hijos también el parada de sus hijos, aunque ha sido zados anteriormente en que Benamujer, y ella le advierte. La obra se marido perdona. En el primer acto. perdonada, que era lo esencial para vente pondera el sacrificio femenino.
desarrolla en melodrama cetórico. Paulina vuelve a casa de su marido satisfacer un ambiente cruel. BeJosé LUIS TRINCADO у en que como otro.
Bizancio tie la amenaza o hacer desaparecer el peligro. El estado de espíritu bizantino arranca de una in(De El Tiempo, Bogotá, abril 15 de 1940. capacidad de prepararse ante la amenaza y de computar las probabilidades del peligro. El senDe dieciocho meses a esta parte el mundo Estamos muy lejos del núcleo de la perturba tido personal de la amenaza y del peligro carece vive en expectativa de todas las calamidades, pe ción, dicen los bizantinos del día. Muy lejos en de fuerza de poder comunicativo en situaciones ro sin señales de congoja o desconcierto. En este verdad. Hasta ayer la distancia entre Plymouth y la que estamos analizando. El peligro de la lapso seis o siete naciones han desaparecido; Nova Scotia era de cuatro dias y unas horas. Fatria, del estado es grande, el individuo piensa otras tantas saben que el peligro, más o menos En este momento se puede hacer la travesía en que él hallará en su inteligencia recursos de sutil cercano pero evidente, las circunda. Las conse un día y pocas horas. El aire conduce al desas eficacia para evadir las consecuencias de un decuencias para el mundo del triunfo completo e tre a los lugaces donde el barco solia llevarlo y sastre. Tal pueden pensar a veces los jefes de incontestable de uno solo de los beligerantes se a muchos otros que estuvieron exentos de la un estado dignamente provistos del sentido de la cían las más desventuradas, onerosas y lamenta amenaza. Esto lo saben tan bien los gobiernos responsabilidad: ellos encontrarán los medios de bles de que la historia haya dado testimonio. como los periodistas de cada día. Lo dicen de sustraerse a la complicación o al desastre. Pero Jamás el supuesto vencedor, desde los tiempos tarde en tarde unos y otros, pero las palabras tampoco es un estado aquí en otras zonas lo preclásicos, ha formulado con más claridad ciparece que se difundieran sobre la superficie de que está en peligro: es toda una civilización, un nismo sus propósitos de exterminio. En el nom los mares. Hay contacto, pero el un elemento no concepto de la vida, según el cual está organizabre de su dios los turcos que amenazaban a Bi es penetrado por el da la sociedad y al cual, con todas sus fallas, le zancio no expresaban sus amenazas con tan mi La acción de una amenaza constante sobre un debemos un ambiente moral más o menos habinuciosa amplitud porque su conciencia, aunque hombre o un grupo de hombres, la conciencia de table y algunas amenidades de que carecieron avanzada para los tiempos, no había logrado la un peligro real creada en muchos meses, facili muchas culturas anteriores, como la libertad de precisión fastuosa de la ciencia alemana de nues tan el cumplimiento de la amenaza o la llegada expresarnos.
tros dias. Además, el turco mataba en honor a del peligro inevitablemente. Es menester combaB. SANÍN CANO su dios y en obediencia a los mandatos del profeta. Los dicectores de las tribus tudescas, de la rama aria, cumplen su fin de exterminio y ameEl rebaño alemán drentamiento por su propia y desastrosa voluntad. Han creado ellos mismos la causa y los Con excepción que confirma la regla de aquel amago de indiefectos. Es necesario en su concepto que una raza vidualismo casi anárquico del Gran Interregno, en que prevaleció sobedomine el mundo. aunque científicamente la rano el derecho del puño, el Faustrech peludo del siglo trece, que aún palabra raza no corresponde a una realidad deaguarda por el barbero, lo propio del espíritu alemán, y lo que lo conmostrable, esos hombres han creado el mito a forma, sostiene y le da carácter especifico, es su complexión gregaria, sabiendas de que el mito obca con más eficacia enteriza, de una sola pieza, de la que proceden las facultades de potencia de sobre las multitudes que la realidad.
sus masas en marcha; pero que al mismo tiempo lo incapacitan y envaran La amenaza no se refiere ya un pueblo ni a para las iniciativas, agilidades y sutilezas del espíritu mediterráneo, y lo ouna raza, sino a todo el mundo. la eficacia del bligan a buscar siempre a un jefe a quien seguir, un fuhrer a quien aclareto está regida tan sólo por la capacidad en el mar; limitando su concepción de la libertad, a someter éste al plebiscito, ejercicio del estrago. Sin embargo, las naciones para obedecerle ciegamente después. Das ist Befehl: esta es la orden.
que se consideran alejadas del peligro viven un El jefe es, de todos modos, el elegido del pueblo, en el que éste se poco la vida de Bizancio, en los momentos fireconoce y se recrea, y en el que el inconsciente poligonal del rebaño, nales de su historia. las costumbres bizantinas que es instinto, se hace conciencia linear. Un pueblo necesita siempre rcmacen y se desenvuelven graciosamente como de un hombre que comprenda su voluntad, que la resuma, la explique en tiempo de las Irenas y las Cantacucenos.
y la lleve a donde debe ir. había dicho ya, con acentos de precursor, el Recibo diarios de muchas partes de América y racista Gobineau.
Europa. Con excepción de los diarios de propa(Juan Tinoco, en la obra: Caminos sobreganda especial (aliada o tudesca) publicados en humanos. La Habana. 1940. tierras de neutrales, los diarios respetables a quienes abona su antigüedad hablan de la guerra, como de un espectáculo no escaso de interés que Su biblioteca se cumple a una gran distancia José Martí: La Edad de Oro. Un vol. Rubén Darío: Sus mejores poemas.
no es fácil de prever. Las noticias de la guerra ilustrado. Habana, 1935 00 Edit. Nascimento. Santiago, Chile.
habían pasado a las páginas interiores y los gran Luis Vives: Tratado de la Enseñanza.
1929. 00 des encabezamientos habían desaparecido, cuan Un vol. pasta. Ediciones de La LecFrancisco Contreras: Rubén Darío. Edit.
do vino a azotar los nervios fatigados la invatura. Madrid. 50 Ercilla. Santiago, Chile, 1937 00 sión de Noruega y Dinamarca por Alemania. Benjamin Franklin: El Libro del Fernando Sainz: El método de proEl nuevo acto de expansión ha conmovido algu Hombre Bien, Madrid, 1929 50 yectos. Edit. Losada. Bs. Aires.
nos resquicios de la conciencia mundial, pero a Carlos Salazar Flor: Derecho Civil 1939 50 nadie le ha ocurcido pensar que en esta nueva Internacional. Tomo 00 muestra de la actividad de Hitler haya un peli Constancio Vigil: El Erial. 5a ediCon el Adr, del Rep Amer. los congro para América.
ción, 1929. 50 sigue. Calcule el dólar a 00 y cuyo desenlace Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica