REPERTORIO AMERICANO 123 minios, dándose aires de protector de su Señor. En sus Solos. colección de ar los hablar con tal donosura, naturalidad amigo, un poco para vengarse de las hu tículos de crítica, figuran también va y gracia. Lo hemos visto en Adiós Cormillaciones y perrerías que éste le solía rios, como la Mosca sabia. De la Co dera y en los diálogos de Celedonio y administrar.
misión. El Doctor Pertinax. todos ellos Bismark en la catedral de Vetusta, de La Dos tipos. El tímido, el mosquita muer crizados de punzante sátira.
Regenta. Su fina sensibilidad y su espíta, el hipócrita, pero amigo de hombrear Hemos leído Pipa haciendo algunos ritu de justicia le llevan a fijarse con presiempre que la ocasión se muestra procortes para eliminar alguna disgresión ferencia en los niños desgraciados, los picia, y el violento, audaz, francote, aun ideológica que hubiera distraído la aten pobres, los abandonados y sin hogar, coque sensible y domeñable ante las pom ción de los chicos y alargado desmesura mo el inteligente Pipá.
pas y dignidades sociales. Las manifes damente la lectura.
Después de la lectura del capítulo de taciones externas del poder y de la au Corroboramos en la lectura de este La Regenta, escasísimos comentarios. Se toridad le seducen. Sobre todo, las más cuento con cuánta ternura mira Clarín lee para gozar de las travesuras de Pipa violentas: el palo. Si él hubiera sido a los niños. Siempre que tropezamos con y de las delicias que le vemos sentir en señor, alcalde, canónigo, fontanero, guar los niños en sus obras, comprobamos con casa de la marquesa. con esto nos basdia del Jardín Botánico, sereno, algo gran qué cariño, emoción y ternura los ha ob ta.
de, en suma, hubiera hecho lo mismo: servado. No podría de otro modo hacerNORBERTO HERNANZ Dar cada puntapié! No era más que delantero y sabía su oficio: huir de los mainates de Vetusta.
El magistral ha subido a la torre inesVida del Dr.
y Gral.
peradamente. Observemos como reaccionan los dos pillastres ante la presencia de (Viene de la página 120)
aquel empingorotado señor. Birmark, desconfiado lleno de miedo, hubiera queу Presidente Zelaya, cargo que desempeñaba Díaz, ambos amparados bajo la sombra de la rido salir corriendo. Celedonio estaba cuando la tristemente célebre batalla de Na traición y del pabellón de las barras y las estrellas.
acostumbrado a aquellas visitas y sabía lo masigüe en que tomaron parte ocho mil soldaque tenía que hacer en tales casos: cam dos salvadoreños y cuatro mil hondureños con Ministro de Guerra de Díaz era el General biar el continente altivo de antes por tra las fuerzas de Nicaragua unidas a los emi Luis Mena, quien fué despojado de su puesto y una actitud humilde. Su rostro se ha grados hondureños, comandados estos por el se puso de acuerdo con el partido liberal y el bía revestido de repente de la expresión General Terencio Sierra, que fue presidente de General Zeledón como general en jefe levanto oficial. Celedonio tenía doce o trece Honduras. En esta batalla, acompañado de los la revolución de 1912, que después de una lucha cruenta dió como resultado la ocupación años y ya sabía ajustar los músculos de doctores Rodolfo Espinosa, de Benjamin Zelesu cara de chato a las exigencias de la dón y Rafael Zenón Rivas, atacó al General brutal de Nicaragua por el ejército norteameriliturgia. Sus ojos eran grandes, de un Paulino Godoy, nicaragüense que comandaba cano y cuya presión se siente aún en este descastaño sucio, y cuando el pillastre se hondureños y después de sangrienta lucha queventurado país.
creía en funciones eclesiásticas, los mo dó la victoria por Nicaragua y los mencionados Mil novecienfos doce vía con afectación, de abajo a arriba, de doctores por su heroico comportamiento fueron arriba a abajo, imitando a muchos saascendidos a Coroneles del ejército nicaragüen Este es el año terrible para Nicaragua, es cerdotes y beatas que conocía y tratase en el mismo campo de operaciones.
en este año la segunda invasión de los Estados ba.
El propio día del triunfo en Namasigüe, avi Unidos Norteamericanos ayudando a los trai.
saron al Doctor y Coronel Zeledón que en Ma dores para mantener a éstos en el poder; está El Magistral. Personaje destacadísimo nagua había nacido una hija suya y en recuer de Presidente Adolfo Díaz, uno de los hombres de la novela. Quizás, quizás la creación do del triunfo que acababan de obtener quiso más nefastos para la libertad de su infortunamás vigorosa de Clarín. Su talento era llamarla Victoria.
da patria, si es que hombres así la tienen. Pero tan grande como su ambición y ésta era En 1909, cuando estalló la guera civil con como he dicho, ya está Zeledón combatiendo a algo irresistible y sin límites. Releemos tra Zelaya, encabezada por el General Juan la ignominia al frente de valientes voluntarios, el párrafo magnífico en que el autor nos Estrada, el Doctor Zeledón desempeñaba el car está como un león defendiendo a su madre, la anuncia ya en el primer capítulo por go de Ministro Plenipotenciario y Enviado Exporque éste sí, éste, si tuvo Patria; combatió aquella su afición a las cumbres.
traordinario ante el Gobierno de Guatemala, a los invasores y a los traidores en la propia Uno de los recreos de Fermín de presidido por el Licenciado Manuel Estrada Ca ciudad de Managua que ocupó casi por comPas consistía en subir a las alturas. Era brera.
pleto y habría puesto fin al desastroso gobiermontañés, y por instinto buscaba las cum En esa misma época, cuando el Doctor José no de Díaz dando el triunfo a la revolución bres de los montes y los campanarios de Madriz se hizo cargo de la presidencia de Ni que junto con el General Mena había llevado las iglesias. En todos los países que ha caragua, Zeledón fue nombrado Ministro de la hasta el corazón de la Capital; pero le vino la bía visitado había subido a la montaña Guerra hasta que aquel mandatario abandono defección del general conservador Dionisio más alta, y si no la había, a la más so su puesto y su patria, impelido por la presión Thomas que permitió la entrada de refuerzo berbia torre.
del Gobierno Norteamericano.
que le llegaba al Gobierno al mando del hon Cuanto más subía, más ansiaba suSiendo Ministro de Guerra tomó parte en la dureño General José María Duron, quien enbir; en vez de fatiga, sentía fiebre que batalla de Tisma, donde el ejército de Chamorro contró la muerte en las calles de León después les daba vigor de acero a las piernas y fué completamente derrotado y el caudillo con de haber asesinado cobardemente a muchos es aliento de fragua a los pulmones. Llega servador huyó vergonzosamente hasta la Costa tudiantes que cayeron en su poder y entre los do a lo más alto, era un triunfo volupAtlántica buscando el amparo de los buques cuales recuerdo a José Argüello Cervantes, tuoso para de Pas ver muchas leguas de americanos que estaban anclados en aguas ni hombre que a estas horas figuraría entre los tierra, columbrar el mar lejano, contem caragüenses para dar el golpe final y poner la pensantes de Nicaragua; esto lo hizo Duron la plar a sus pies los pueblos como si fuecadena al cuello del pueblo nicaragüense. noche antes de que León se levantara como un ran juguetes, imaginarse a los hombres Acompañó Zeledón a Madriz hasta México, solo hombre respondiendo al grito de libertad como infusorios, ver pasar un águila o donde murió éste, y poco tiempo después regre que habían lanzado los valientes que luchaban un milano, según los parajes, debajo de só a Nicaragua en donde junto con los señores en Managua tratando de echar fuera del país sus ojos, enseñándole el dorso dorado José Dolores Gámez, Manuel Maldonado, doca los traidores y a los intrusos. En los combapor el sol, mirar las nubes desde arriba, tores Santiago y Leonarlo Argüello y otros dis tes de León se distinguieron por su valentia en eran intensos placeres de su espíritu al tinguidas nicaragüenses, fundaron un periódi las líneas de fuego, el Coronel Pedro Rafael tanero, que de Pas se procuraba siempre co de oposición al orden de cosas de aquella Osorio, hondureño y Lucila Matamoros, salvaque podía.
época, lo que dió lugar a que expulsaran del doreña que fué ascendida a Coronela después pais a Gámez y a Zeledón quienes se refugia del combate del puente de Guadalupe, cerca Ton en El Salvador donde pasaron varios meses del cementerio leonés. Estos dos amigos de la mientras podían regresar a Nicaragua.
causa redentora después del desastre tuvieron Clarín publicó varias colecciones de Como resultado de la guerra intestina de que salir hacia Honduras, pero fueron persecuentos. Fin 1886 apareció la primera con 1909 a 1910, llegó a la presidencia de Nicara guidos con gran empeño por soldados conserel título del que forma el primer lugar gua el General Juan Estrada. Poco tiempo vadores dándoles alcance en la hacienda Las en la colección, Pipá. Más tarde, El después fue éste sustituído por don Adolfo Delicias muy cerca de la frontera donde amPipá Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica