REPERTORIO AMERICANO 31 PAGINA LIRICA (En Rep. Amer. Tú me contaste tus sueños sin dejar de sonreir, Yo supe que había lágrimas al final de tu jardin.
y te confesé mis penas que ya no se quieren ir; el mundo fué anden de amores y hoy recordarlo es vivir.
Te dije. La vida tiene lo que el juego de ajedrez: se mueve una pieza ahora, más tarde empieza a doler. Salimos. La calle estaba como limpio amanecer.
Sólo corazón adentro no cesaba de llover.
Alberto BAEZA FLORES La Habana, 1957.
NOCTURNO DE AMOR PARA JOSÉ ALBERTO Par eso en la Navidad, que hoy discurre con agrado este nieto le traemos en esta Sagrada Tierra, elevamos nuestros cantos las flores del corazón, que en silencio recogimos para dar gracias a Dios, en nuestro mundo interior.
ya que, alejando las penas, nos concede el gran milagro Esas flores no se secan de esta triunfal Noche Buena!
porque son nuestra ilusión; ellas siempre se sustentan SALAS PEREZ en las fuentes del amor.
León, Nicaragua, de 1957. el. Amor. según lo afirma la suprema erudición, DESPERTAR EN LEÓN es la Ley que dió a los hombres el Divino Redentor.
Levanto mi cabeza soñadora Quiera el cielo que este nieto, a los primeros rayos de la aurora. vida nuestra y nuestro amor. y admiro los luceros encendidos.
tenga siempre, ifija en mente. Pensamientos de Dios. indefinidos!
esta Ley Santa de Dios.
Porque ellos son los mundos del espacio SALAS PEREZ que no tienen ni reyes, ni un palacio ellos viven la Santa Libertad En la Navidad de 1957.
dentro del orden, el bien y la verdad.
León, Nicaragua. Por eso es que buscamos sintonía con la Aurora de Dios en cada dia y al mirar en el cielo estos luceros, encontramos más nobles derroteros.
NAVIDAD EN PONECOYA Derroteros de amor y de consuelo, donde viaja tranquilo nuestro anhelo, para encontrar, al fin de la jornada. Para nuestros familiares la esencia de Dios mismo. o de la nada!
y buenos amigos de León. SALAS PEREZ Hemos venido, felices, León, Nicaragua, a visitar este mar 26 de Diciembre de 1957.
donde hay esteros y cielos, que forman un sólo altar: LA CONFIDENCIA Es la bella Nicaragua, la de Pallais y de Dario, la de los lagos que encantan, Llovía lenta la noche la que cumple bien su sino sobre el sueño y la ciudad, ibamos callando ausencias de ser Tierra protectora por calles de soledad.
para el que sueña y trabaja, Yo te dije. Aún llevas luz para el que lucha y confia de rocío nocturnal. y en Dios pone su esperanza.
y sonreiste en silencio tal vez para no llorar.
Tierra que es sólo un portal con ornamentos del Cielo; Buscamos refugio breve ¡bellos esteros y lagos para nuestra confesión; y montes regios. serenos!
el mundo olvidó su prisa y calló el tiempo el reloj.
Tierra de nobles mujeres Te vi como niña triste fraternales y muy bellas, al fondo de un corredor, que cautivan y consuelan y el corredor era el mundo y al corazón encadenan, y la tristeza el amor.
St. Ya no había prisa, ni ansiedad, ni temores.
La luna se dormía entre las blancas flores.
Te abracé con ternura y te dije al oído que una sola palabra desterraba el olvido.
Espejo de mi sueño, corazón de quimera, eras como la brisa sobre la primavera La noche fué perdiéndose con sus callados pasos, y tú fuiste durmiendote como un río en mis brazos.
Murmuraste un anhelo y te besé en la frente.
Cuando cerré los ojos hacia el día naciente, aún flotaba en la alcoba una palabra: siempre.
Alberto BAEZA FLORES La Habana, 1957. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica