REPERTORIO AMERICANO 233 este Estoy aquí de nuevo. Yo y mi En el Tercer Congreso Eucarístico historia. Yo y mi tristeza. Yo y la nada. De LA PE. Montevideo, Noviembre de 1938 Primero respiro, es decir, reconozco este aire dorado de primavera que poceéis, camino sobre el ancho mar, saludo el recuecdo de mis amigos los pescadores, y tomo fuerzas para veros el rostro. Después miro la cruz como la sombra encontrada de mi cuerpo y del horizonte, y me causa asombro, simple de mi, que no hayáis poblado de hechos en santidad y en perfume de colinas ¡ay. de colinas humilde madero de mi naufragio que todavía flota sobre las aguas. Dadle un destino, hermanos míos, en la historia, si no condenaréis al árbol inocente, después de haberlo hecho así con el Hijo del Hombre. Dadle un destino fogoso, que él no nació para sostener el fruto de la impiedad, mi martirio, sino para pensar la sombra de Dios y apretarla cariñosamente hasta el fruto. ahora, muerto, debe estar pronto ya para cumplir su destino de llamas de estrellas.
Desde hoy os perdono si os enFariseos cuentro perdidos y os ilumino en mi Grabado de Lorenzo Gigli corazón de polen puro. Me conocéis ahora? Ya no tengo mejillas que ofrecer y ya no tengo látigo que zareno, para que de ella se espanten que yo desciendo para engrandeceros y en las plazas, para ser estimados emplea. Ha corrido mucha sed ba los pájaros pequeños, pero ya sin mi en el Padre, hay una matanza de ni de los hombres. no sepatu jo los días, y mucha hambre sobre rostro y para que en ella se posen ños sobre las ciudades de mi pue Guierda lo que hace tu derecha. los caminos anda despavorida. Soy las carniceras aves, pero ya sin mi blo. no pensáis en Herodes, un 110 os hagáis tesoro en la tierra donsólo una fatiga que hace palidecer culpa. Yo me fui de la Cruz y an tetrarca que existió hace unas horas de la polilla y el ociu corrompen, el horizonte al alba y la sombra del do, y sigo repitiendo por el mundo mías, y en otros que yo he ido derri y donde ladrones minan y hurtan.
mediodía. Soy sólo eso que olvi iyo fui una realidad! iyo pedí el bando por mis cielos. Es que te ¡Cuánto mejor, os digo, que en dáis al lado vuestro cotidianamente pan común, el agua solidaria y el méis al fuego. Es que olvidáis quién vez del templo hecho según vuestra y que yo creo que es el polvo libre vino colectivo! la leche del día. era y no sabéis quién es? Ya no medida de monedas, fuera otra vez y mío de vuestras cadenas. más alto aún, yo defendi la fe, queda memoria de cuando las gen aquí en el mundo aquel mi templo No me miréis más en la Cruz, es decir, el espíritu común a todos, tes me admiraban porque me veían breve, sola mi catacumba, sólo yo y jay de mi. con vuestros ojos que es decir, Dios, mi Dios!
resplandeciente? Os lo cepito ahora: cada uno que en si me contentara!
se arrastran y precisan tocarme para ¿Es que vosotros esperáis de mí soy el fuego, porque cautericé mu Solo yo y descansando en esos cover. Yo la abandono ahora como a todavía. No comprendéis que yo chas llagas y usé látigo como el fue razones amistosos, descansando de los tres dias, porque no estuve nunespero vuestro amor aún y siempre? go y hube de quemar la paja en tanta fatiga repasada, olvidado de ca voluntariamente en ella, con esta que cuando yo espero, hay tor fuego que nunca se apagará. co mí, en la segura humildad de los voluntad mía que son las auroras.
mentas o fiebres sobre la tierra in mo os advirtiera el Juan. creyentes, transfigurado en cada uno ¿Cómo podéis vonerarme en el su hóspita, según que aguarde con los Os lo repito ahora: yo soy sobre de ellos, volando en su conciencia, plicio. Nó, hijos míos, nó! Yo soy ojos abiertos, o soñando?
la cruz el espíritu eterno; es decir, ya sin riesgo, como un pájaro siemel primer pájaro, la primeca con ¿Dónde está ege poderoso amec soy la llama con que sueña el ma pee, como el alma!
dición animal, la primera aventura que mueve al espíritu, que en se dero.
Entonces yo dijera cada cora humana de la naturaleza. Cómo guida enciende o ilumina la sangre. Oh, cautivos de Dios que no zón y a todo el lago de mi espíritu, pensáis que haya seguido al árbol! por ésta pasa al músculo y se eter vagáis tranquilos por el campo ri dulce vaivén de luna en los oídos.
Quizá cuando queméis la Cruz en niza en hechos. No comprendéis sueño de su aliento. Qué veo en Solo de soledad te quiero hoy, mi las hogueras necesarias de la jus que lo primero es aparejar el cami a tánto pendón idolatrado? amigo fiel y libre! Aún sin el rito, ticia, halléis vosotros, en el calor de no del Señor, enderezar sus vere. Qué veo, mi Señor, sobre la som con la música mía de tu soledad las cenizas, la sombra de mis alas. das, como decía el Bautista? Para bra de tu rostro, sobre la tierra humana, con la tristeza mía de tu inYo fui una realidad total y me después amar, amar, amar, que yo ésta que enriqueces. Aquí hay mu certidumbre única. Con la alegría gané el derecho a ser un sueño siem desciendo sobre todo el amor como la choz de aquellos que no pasan el mía de tu engrandecimiento de luz.
pre. vosotros no me amáis en rea luna sobre el mar, sobre ese mar ojo de la aguja. Aquí hay muchos con un conmovedor altar: tu conlidad ni siquiera para soñarme. Vos que me ensalza a la vez que me llo que vienen a sacudir sus sábanas. ciencia de la pequeñez.
otros no me amáis de carne y hue ra en la pureza de su sal. Aquí hay muchos que rezan con las Porque vosotros, en cambio, feliso, formas modestas del monte y de Vosotros obedecéis al hijo de Za manos unidas como semillas, pe greses, aún espacáis de mí y yo esla luz. Amáis a un Cristo que lle car as y bautizáis. yo os bendigo ro que no sabrán jamás la prima pero de vosotros primero. Porque no váis en vuestra imaginación, a vuesen ello. Pero echáis en sacos ave vera, la tuya. oh mi Señor. con soy yo quien debe sentir fe, sino tra semejanza madurado, y dócil a riados aquello que Juan no se llevó que me duermo vosotros. Porque yo dejé caer la necesidades de consola a la indecisión de la bandeja: Yo Aquí hay un espectáculo, grande gracia en una lluvia de primavera ción. un Cristo de aire, de aire y a la verdad os bautizo para arre de pequeñeces; aquí hay un estu y vosotros sois la naturaleza para papel en vez de carne y hueso. Yo, pentimiento; mas el que viene tras diado gesto de cristiandad; aquí no florecer. para fructificar, hijos mis hermanos en la piel, yo no ten de mí, más poderoso es que yo, los hay más que dudas u clvidos o im míos, sobre el vacío y el ruido.
go más aire que ésde que amaso a zapatos del cual yo no soy digno de paciencias! Nadie divide el pan o Fedid a vuestros poetas, a hora con llanto para daros estas llevar: él os bautizará en Espíritu el pez o el llante y se han o. vidado tros profetas, algunos de los cuales palabras.
Santo y en fuego.
aque lo que les cije: se hacen oir en mi ventana azul Ya podéis adorar tranquilamente ¿No recordáis, hollejos de mi o. Cuando haces limosna, no hagas. joh, Bergamín, el de España, te el símbolo. Yo me fui de la Cruz que vido, ingratos que yo veo a pesar tocar trompeta delante de ti, como llevo en mi tecnura! la calidad acquedó sin mi rostro de pobre Na vuestro, no recordáis que cada vez hacen los hipócritas en las sinagogas tual de mi esperanza en vosotros.
a torno vuestras vues Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica