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338 REPERTORIO AMERICANO a recursos de la opinión pública. Le cupo asimismo dar a la opinión pública la fuerza o consistencia de factor en el gobierno de la nación, por la brillantez de sus ideas, por el valor de sus actos, por sus inspiraciones y por la severidad inquebrantable de su vida. También la opinión pública es gobierno y se puede hacer tan fecunda cuando la presiden hombres del temple y del genio de un Volio. También a él le corresponde el título legítimo de Maestro de nuestra democracia junto con otros de su misma altura, aunque pocos, acaso, pero grandes como montañas iluminadas.
Es hermoso recordar aquí lo que el Lic. Jiménez, don Ricardo, dijo frente a la tumba de don Julián Volio: Sea esta tumba para cuantos la visiten, fuente de inspiraciones simples y patrióticas; y de la oscuridad de esa fosa, salga esa luz, así como de la oscuridad de la noche brota triunfante el sol.
Es hermoso igualmente pensar que para la justicia de las edades hay almas que desde el seno de la muerte siguen siendo, no un simple reouerdo, sino luz palpitante y viva.
RÓMULO TOVAR Si triunfan los aliados.
a juicios hechos, por consecuencia, a supuestas verdades inflexibles; por consecuencia, prejuicios tenidos por doctrinas aun cuando el mundo nos grita con voces que vienen desde el firmamento que la vida es progresiva por naturaleza.
Los dos hechos más destacados que se recuerdan de su acción cívica es su actitud contra el Gobierno del Grl. Guardia y su participación con don Jesús Jiménez, en defender los derechos de asilo de la República. Como dos hechos políticos trascendentales. Trascendentales son porque el uno constribuyó a afianzar el temperamento de la República. Su actitud entonces significó una victoria moral de ésta.
Tenemos derecho para hablar así. El señor Volio era en aquella hora una eminente personalidad, el hombre que podía ser juez de los otros hombres y de los hechos. Se mantuvo firme frente a los sucesos extraños que amenazaron la estructura de la humilde nación. en eso consistió la victoria. También prefirió el destierro a la humillación. Los acontecimientos son efímeros; lo peligroso es que los acontecimientos se conviertan en hábito. La República ha continuado viviendo normalmente sus doctrinas de origen. Las continuará viviendo.
El otro hecho es el que más ha servido para prestigiar a la República. Esta, como asilo del hombre en persecución por razones políticas, para decirlo con el orgullo que sintieron los que formularon la doctrina y la defendieron enérgicamente, es una gloria del continente.
Eso es lo que la ha hecho grande en el concepto de los otros, si vale la pena ser grande por servir a nobles intereses humanitarios. No es sólo humanitario en nuestra América acoger al perseguido político, es también trabajar por la depuración de los procedimientos en todo el continente, es trabajar por el afianzamiento de las buenas doctrinas de la civilidad, es trabajar por la afirmación de la verdadera democracia, como decía el señor Volio. Hay cultos religiosos, pero también hay cultos civiles. Nuestro país está consagrado al culto de la dignidad del hombre que defiende doctrinas, ideas, principios, por la acción de costarricenses que comprendieron en su momento que la patria perdura si se pone al servicio de intereses eternos.
Complace mucho, también, ver al estadista Volio formando parte de la legión de hombres que en un momento determinado, aquel que él vivió espléndidamente, organizaron el movimiento liberal no como partido propiamente sino como fuerza del espíritu nacional. El espritu liberal no es sólo lucha contra tradiciones del pasado. Es sobre todo, progreso constante, capacidad de renovar intereses, aptitud de perfeccionamiento. No nos referimos a la antitesis entre liberalismo y conservatismo que enfermó trágicamente a otros países. Nuestra fortuna consiste en que hombres como Volio interpretaron el liberalismo como salvación por una parte y como dignificación por otra.
Así asentaron las dos doctrinas que vive el país como adquisiciones excelentes: la libertad de conciencia y la dignidad del espíritu.
Uno de los admiradores del señor Volio, don Alejandro Alvarado Quirós, se quejaba con justa sensibilidad de que el señor Volio, a pesar de sus prestigios, no pudo ser exaltado a la Presidencia de la República. Efectivamente, tuvo merecimientos para ello y títulos recomendables. Le cupo, en cambio, ejercer otro papel no menos superior al ejercicio de la primera Magistratura, desde la cual se pueden hacer muchos bienes. Le cupo ejercer el papel de aleccionador, de constructor desde la tribuna, desde la prensa, desde las instituciones de enseñanza, desde todos esos eminentes o sutiles ¿Cuáles serán las consecuencias de la el goce de una vida completa y fecunguerra? El triunfo de los aliados asegura. da; pero las urgencias de organizar la ría la continuación de los regímenes de destrucción de lo que ha edificado, le immocráticos y de la vida social dentro de piden dedicarse a laborar por su propia sus lineamientos actuales. Naturalmente ventura. Si analizamos lo que se ha reamodificados por la terrible experiencia. lizado en el período inestable, angustiaEn Alemania una Alemania a la que do e histérico de los veinte años transcuse habría puesto en condiciones de no rridos entre las dos guerras, podríamos hacer daño por muchos años se esta calcular lo que se hiciera en la calma blecería un régimen basado en los prin creadora de una paz completa. En estos cipios de la social democracia. Italia se cuatro lustros recibieron extraordinario vería obligada a echarle mucha agua a impulso las ciencias y las artes; la navesu vino fascista. La humanidad no que gación aérea; el automovilismo; el radio, rría ya tolerar ni el recuerdo de los sis, el cine, la medicina y la cirugía. Todas temas que encendieron la segunda guelas actividades humanas fueron modificarra; pero si Alemania y Rusia obtuvieran das en sentido favorable. Veinte años de la victoria, el mundo sufriría una modifi progreso, en medio de la inquietud y el cación total. Por muchos años, la liber sobresalto. Cuántas cosas bellas, nobles tad resultaría eclipsada y la humanidad y generosas hubiéramos hecho en otras marcharía bajo el látigo de los déspotas. condiciones!
No quedaría en pie ninguna de las insti Es preciso confiar en el poder inagotuciones democráticas en Europa. Fran table de recuperación y el sentido social cia e Inglaterra desaparecerían como del hombre. Con el triunfo de los aliagrandes potencias. Dueñas de Europa y dos y la extinción definitiva de la pesadide las colonias, y entregada el Asia al lla totalitaria, en pocos años se curarían Japón, Rusia y Alemania buscarían en todas las heridas de la guerra y alcanzaAmérica la satisfacción de sus necesida rían la civilización y la cultura, niveles no des expansionistas. acaso, hallaran en soñados. El triunfo del despotismo aplaalgunos de estos pueblos víctimas del zaría por mucho tiempo, sin duda, el redespotismo a través de su historia fácil nacimiento; pero tampoco habría que presa. Desde ahora debe América aper desesperar, porque más grande que el cibir sus defensas contra los enemigos poder de recuperación es el de reacción.
exteriores e interiores.
Desaparecidos los hombres que encarnan hoy la tiranía, las futuras generaciones buscarían nuevamente el cauce naturalde la libertad Sin la guerra, la humanidad hubiera ya resuelto cuantos problemas dificultan (De Calibán. El Tiempo. Bogotá. Dr. GARCIA CARRILLO Médico. Cirujano ELECTROCARDIOGRAMAS METABOLISMO BASAL Corazón Aparato Circulatorio Consultorio: 100 varas al Oeste de la Botica Francesa TELÉFONOS: 4328 3754 Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica