226 REPERTORIO AMERICANO PUESTO de LIBROS fuerza misteriosa del prestigio sigue rondando en torno de su casa modesta y se obstina en acompañar un nombre al cual no es posible anteponer el más insignificante título oficial. sin embargo, si fuera hacedero flotantizar una vida, la del doctor Escobar daría para enriquecer, para rehabilitar, para hacer centenares de reputaciones de pobres hombres que han fatigado las tribunas de los parlamentos y las prensas de los periódicos en la vana persecución de lo que este anciano ha acumulado a fuerza de desdén por lo perecedero, de elevación de espíritu, de práctica constante de vida interior.
Si por un lado es de lamentar que las eximias cualidades mentales del doctor Escobar, no hayan rendido al país todo lo que de ellas hay derecho a esperar a exigir, íbamos a decir, de otro, es siempre motivo de orgullo para un pueblo darse el lujo de poseer en el santuario de sus mejores reservas espirituales, el pensamiento elevado y el corazón generoso que viven y alientan en la frágil osamenta de este asiduo y callado lector del Quijote, ide este místico laico que rescata en su silencioso retiro, sabe Dios cuántos pecados de los que a diario manchan y empobrecen la vida civil de un pueblo.
Contenido de la 2da. edición de los CUENTOS VIEJOS de María de Noguera. Ilustraciones de Amighetti Irtroducción, del Sr. Garcia Monge.
Don Juan del Bijagual.
Aventuras de un principe.
Tio Conejo y tía Boa.
Tia Garcita Morena y tío Sapo.
La viejita del sandillal.
Los dos compadres.
Otras aventuras de tio Conejo.
La princesa Rana.
El Cadejos del cadejal.
El príncipe Tonto.
Tio Conejo y tia Tigra.
Lo que soñó Juan Tuntún.
La Mano Peluda.
Historia del compadre que se sacó los ojos.
Los niños sin mamá.
El fallo de tio Conejo.
Sultán y Visir.
Los tres hijos del campesino.
Historia del hijo que dejó perdido el rey.
El principe cabellos de oro.
Anécdota entre animales.
De venta, a 00, en la Libre.
ría de los señores Trejos Hnos.
Pídalo también al Adr. del Rep. Am.
Al lector. Viene de la primera página)
mental tuvo su cátedra en la antigua Uni periódico de Diógenes Arrieta, el poeta, el peversidad Nacional, que en hora feliz y fecun riodista, el orador, de quien reproduciré aguda fundó un Presidente liberal.
nas de sus brillantes páginas en esta bella coCon el ilustre jurista Doctor Eladio Gu lección. Discreto sin debilidades, juzga Jose tiérrez estableció un estudio de abogado en Ignacio Escobar a los demás como si todos fuela capital de la República. Los dos salieron ran como él; su pensamiento es como un buzo de la Universidad: Gutiérrez era Secretario y que va hasta los senos profundos de la concienEscobar Profesor del célebre Instituto. Se pre cia; la filosofia le ha atraido fatalmente desde sentaron a la sociedad a dar testimonio de su juventud, y de ello es prueba los discursos sus conocimientos y de su probidad, espe que publico, donde la belleza de la forma corre cialmente de esta virtud del varón fuerte, y parejas con hondos pensamientos y emociones a demostrar la eficacia de la enseñanza mo inefables. En una sociedad menos atormentada, Tal que habían recibido de labios de sus maes y si hubiera podido llevar una existencia bajo tros y del ejemplo de sus progenitores. Desde una ley menos dura de la que le tocó en su juel principio de la carrera que entrambos em ventud y en su edad madura, este anciano haprendían, confiados en sí mismos, sin valederos, bría escrito libros de honda filosofía, amenizada ajenos a la intriga, sin patrocinio oficial, no con todas las galas de la dicción, que hoy leeobstante que el Partido Liberal a que pertene ríamos con el intenso placer que produce un cian gobernaba el país, el público se dio cuen Max Müller, un Goethe, un Renán.
ta y esto los honra mucho de que los dos Bien preparado estaba para ello.
jóvenes eran dos sacerdotes de la justicia y que Regentaba en la Univerisidad dos cátedras: las causas civiles que se les confiaran quedaban la del idioma español y la de Geografía. Puedo en la conciencia de dos hombres de bien. decir, sin pecar de exageración, que abrió nueEpoca crítica para un partido político es vos rumbos en estas dos enseñanzas. Ordinaaquella en que, fatigados sus prohombres con riamente los estudios filosóficos son áridos, no la carga de las responsabilidades comunes, van tienen el encanto atrayente de los fenómenos que dejando a la vera del camino, desengañados y estudian el físico, el químico o el geólogo. Estristes, el gobierno en manos de hombres poco tudiar las palabras, las formas gramaticales, los escrupulosos, para quienes el deber da resvalores de los tiempos, las declinaciones del puestas equívocas y oscuras. En una época verbo, es por lo común, permítaseme decirlo así, así, Gutiérrez y Escobar se retiraban y alza pisar guijarros a pie desnudo o coger plantas ban sobre la piedra fundamental de una pro espinosas a mano limpia. Pero eran tales el arte bidad insospechable una fábrica de verdadera y la gracia con que José Ignacio Escobar conciencia jurídica, que era casi un altar.
ducía a sus discipulos por los oscuros laberinLargos años anduvieron mano con mano, co tos de la Gramática, que ésta con su verbo lurazón con corazón, inteligencia con inteligencia; minoso se vestía de colores y poesía, y les hacía y hoy, en los linderos de la ancianidad honra creer a los tardos que eran ágiles de pensada, el uno se ha ido a cultivar la tierra y el miento y a los inteligentes que eran más.
otro a vivir dentro de los muros de su hogar, Con el aula universitaria de Escobar comtranquilos, festejados con la simpatía y el res prendía uno que sí era verdad que el lenguaje peto de toda, así, de toda la sociedad colombia tiene fastos ocultos bajo su superficie, y que na. Arda para ellos por muchos años, la lám cada palabra contiene una enseñanza. El lenpara con fuego suave y discreto de una gloria guaje, dádiva celeste, es un suelo sagrado dorde serenidad y de amor!
que es el depósito del pensamiento, como dice Escribe en su diario la señora Hugues alma Max Müller delicada que recogía en Abbatsford las impre El profundo conocimiento que adquirió de la siones que le dejaba el trato con Sir Walter lengua castellana le sirvió más tarde en el ejerScott que los abogados son de todos los hom cicio de su profesión. El gremio de los abogados bres los que conciben las opiniones más desfa sus colegas, recuerda siempre la obra maestra vorables de la naturaleza humana, pero que de análisis lógico y gramatical que llevó a cabo Sir Walter era una excepción: jamás ví a otro al estudiar una cláusula de un testamento. El más inclinado a mirar las acciones de sus alegato jurídico es, visto por fuera, una pieza prójimos con mayor benevolencia; parecía co literaria; nuestra literatura jurídica cuenta con mo si juzgara los corazones de los otros por varias joyas hechas por manos del mismo arsu propio corazón. Le dejé con la profunda im tífice.
presión de su excelencia; grandes y variados La Gramática enseñada y estudiada por él eran sus talentos; rico en genio e imaginación, con tal arte y primor, es una disciplina mental notable en todos los negocios su sólido juicio. no inferior a la que se requiere para ahondar Es esta la impresión que a mí me ha dejado en los textos de la ley. Más les valiera a los José Ignacio Escobar durante la larga amistad jóvenes cuya mente esterilizan con el estudio que he tenido la honra de cultivar con él. Le de las lenguas muertas el ponerlos al yunque conocí en cierta ocasión inolvidable de mi vida del propio idioma: allí moldearían el pensamiende esoritor: hacía mis primeras armas en un to propio, allí descifrarían el pensamiento ajeno; allí verían llegar por los cauces ardientec de la pasión, la ola viviente, alimenticia y renovadora del idioma, o las linfas refrescantes de las aguas de primavera del alma popular.
La otra cátedra que regentó con su superior habilidad fue, como ya lo dije, la de Geografía.
No la Geografía seria y erizada de las clasificaciones, islas, penínsulas, montes, ríos principales y tributarios, abras, ensenadas y golfos, no; era una Geografía animada, una Geografía fisiológica, una Geografía que ponía ante los ojos de sus discípulo las condiciones generales del globo en relación con el hombre, con el destino de los hombres.
De él puedo decir lo que un discípulo del Profesor Guyot: La sencillez de sus maneras era el signo de la pureza y de la lucidez de sus pensamientos, y sus explicaciones de las leyes de la naturaleza, trátese de la materia. de la fuerza o de la vida, me satisfacían porque parecía que ponían al estudiante en comunicación intima con la naturaleza misma La ciencia de Ritter y de Humboldt tuvo en él un afortunado propagador, y de ello dejó muestra en su excelente tratado sobre el relieve y el desagüe de los continentes.
Voy a terminar. No sé, oh lector! si habré podido darte a conocer a José Ignacio Escobar, eminente personalidad colombiana. Mejor que yo, lo harán las producciones de su ingenio que reproduce esta notable antologia. Haya o no podido interpretar fielmente mis pensamientos, quedan estas líneas como prueba de una amistad que reconcilia al hombre con el hombre.
DIEGO MENDOZA Bogotá, oclubre de 1917. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica