REPERTORIO AMERICANO 25 Poesías de GRACIANY MIRANDA ARCHILLA Envio de Julia Marchand, San Juan de Puerto RicoNanas Bolivar II Este señor de azucena se enfermó de lejanía: era tan bueno, que olía a santo y a yerbabuena.
Sobre su augusta melena jamás el sol se ponia, pero su melancolia era miel de luna llena.
Cuando estés en mis brazos que se alargan de (amar, iqué hartazgo de inocencia y amor me voy a (dar!
En tus ojos divinos las estrellas veré y en su fondo de gloria un lucero seré.
Manojitos de rosas te dará el tuiseñor y un rocio de suspiros sonará cada fior.
En las copas brillantes de nostálgico tul mariposas de plata servirán mucho azul.
Bogaré tras el viento de mirada turquí que una cuna de luna robará para ti. a mis brazos lejanos, que se alargan de amar, las abejas del día te vendrán a besar.
Tanto creció en la ternura, que con mano de armonia hizo el Dolor transparente.
Divinizó la Locura. y entro a la Mitologia abrazado a un continente!
Paladion III Graciany Miranda Archilla (1937) ahora voy cantando por todos los caminos. Me brillan más los ojos desde que tengo un (hijo me huelen más las manos desde que tengo un (hijo.
Limonero. en qué piensas?
Es el sol un rubi y el viento de oro suena panderetas de añil.
Limonero, no pienses; peor pensar que morir.
Ponte un traje de lluvia: sé ración de marfil sobre el ala sedosa de mi amor colibri.
Limonero, no pienses, que te mata el sufrir.
Al bautismo del beso, que con sol encendi, verdemente te invito; nananán, nananin sé padrino celeste de mi niño de abril.
Voy despertando rosas y desnudando lirios, y antes de que despierten les rezo en los oídos. Me brillan más los ojos desde que tengo un (hijo, me huelen más las manos desde que tengo un (hijo.
Es alegria de seda o es locura de mirto lo que inunda las venas, derramando sus filtros donde el sol ha callado y el amor ha reido. mi paso es perfume que enloquece caminos cuando voy, como Midas, trocando en oro el (vino. aunque el eco murmura remedando mi grito. Le lloran más los ojos desde que tuvo un (hijo, le duelen más las manos desde que tuvo un hijo, Mi canto se remonta por cima del Destino. Me brillan más los ojos desde que tengo un (hijo, me huelen más las manos desde que tengo un (hijo!
Haikais japoneses. Traducción y envío de Jorge Carrera Andrade. Consulado Gral. del Ecuador en Yokohama, Japón. Setiembre de 1938Pesa lo justo un copo para inclinar a tierra la hoja del gladiolo. Basho)
El agua enlaza las islas coronadas de pinos: Mar de Matsoushima. Hokoushi)
La cigarra.
Nada revela en su canto que debe morir mañana. Basho)
La otoñal cigarra yace difunta al lado de su vacia cáscara. Joso)
Pimiento de mi tierra: Añadidle unas alas, y es la roja libélula. Basho)
Sobre el mar, muy lejos. a dónde va el verde y brumoso viento. Joso)
El viento de la costa desordena sobre el mar los dibujos sabios de las gaviotus. Sora)
Bajo la nevada inmensa cuántas semillas ocultas esperan la primavera. Inembo)
Monge, it driet Section Casa certada: En torno del farol de papel los murciélagos danzan. Rasentsou)
Con briznas de cebada oh rana monja te construiré una casa. Tchigetsou Ni)
neia May Pepino cortado: Su jugo corre patas de araña dibujando. Kikakou)
El poeta ecualoriano Jorge Carrera Andrade y su señora al pie del famoso Budha de Kamakura Bajo la hoja, prisionera, la tristeza del mundo mira pasar la anémona. Yaba. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica