38 REPERTORIO AMERICANO Viban los compañeros al pie de esta cuchara (para siempre!
Lo han matado, obligándole a morir a Pedro, a Rojas, al obrero, al hombre, a aquel que nació muy niñin, mirando al cielo, y que luego creció, se puso rojo y luchó con sus células, sus nos, sus todavías. sus hambres, sus pedazos.
Lo han matado suavemente entre el cabello de su mujer, la Juana Vázquez, a la hora del fuego, al año del balazo y cuando andaba ya cerca de todo.
Pedro Rojas, así, después de muerto, se levantó, besó su catafalco ensangrentado, lloró por España y volvió a escribir con el dedo en el aire. Viban los compañeros! Pedro Rojas.
Su cadáver estaba lleno de mundo. De España, aparta de mi este cáliz)
ESPAÑA, APARTA DE MI ESTE CALIZ Poesías de CESAR VALLEJO Sacados de Nuestra España, Paris, en el número homenaje a César Vallejo LA CENA MISERABLE TRILCE LXV Hasta cuándo estaremos esperando lo que Madre me voy mañana a Santiago no se nos debe. en qué recodo estiraremos a mojarme en tu bendición y en tu llanto.
nuestra pobre rodilla para siempre! Hasta cuánAcomodando estoy mis desengaños y el rosado (do de llaga de mis falsos trajines.
la cruz que nos alienta no detendrá sus remos.
Hasta cuándo la duda nos brindará blasones, Me esperará tu arco de asombro, por haber padecido.
las tonsuradas columnas de tus ansias Ya nos hemos sentado que se acaban la vida. Me esperará el patio, mucho a la mesa, con la amargura de un niño el corredor de abajo con sus tondos y repulgos que a media noche, llora de hambre, desvelado.
de fiesta. Me esperará mi sillón ayo, aquel buen quijarudo trasto de dinástico cuándo nos veremos con los demás, al borde cuero, que para no más rezongando a las nalgas de una mañana eterna, desayunados todos.
tataranietas, de correa a correhuela.
Hasta cuándo este valle de lágrimas, a donde yo nunca dije que me trajeran.
Estoy cribando mis cariños más puros.
De codos Estoy ejeando ¿no oyes jadear la sonda?
todo bañado en llanto, repito cabizbajo ¿no oyes tascar dianas?
y vencido: hasta cuando la cena durura.
estoy plasmando tu fórmula de amor.
Hay alguien que ha bebido mucho, y se burla, para todos los huecos de este suelo.
y acerca y aleja de nosotros, como negra cuchara Oh si se dispusieran los tácitos volantes de amarga esencia humana, la tumba.
para todas las cintas más distantes. menos sabe para todos las citas más distintas.
ese oscuro hasta cuando la cena durará. De Heraldos negros)
Así, muerta inmortal. Así.
Bajo los dobles arcos de tu sangre, por donde LOS PASOS LEJANOS hay que pasar tan de puntillas, que hasta mi paMi padre duerme. Su semblante augusto (dre figura un apacible corazón; para ir por allí, está ahora tan dulce.
humildóse hasta menos de la mitad del hombro, si hay algo en él de amargo, seré yo.
hasta ser el primer pequeño que tuviste.
Hay soledad en el hogar; se reza; Así, muerta inmortal.
y no hay noticias de los hijos hoy.
Entre la columnata de tus huesos Mi padre se despierta, ausculta que no pueden caer ni a lloros, la huida a Egipto, el restañante adiós. y a cuyo lado ni el Destino pudo entrometer Está ahora tan cerca; ni un solo dedo suyo.
si hay algo en él de lejos, seré yo.
Así, muerta inmortal. mi madre pasea allá en los huertos, Asi.
saboreando un sabor ya sin sabor. De Trilce)
Está ahora tan suave, tan ala, tan salida, tan amor.
PEDRO ROJAS Hay soledad en el hogar sin bulla, sin noticias, sin verde, sin niñez.
Solia escribir con su dedo grande en el aire: si hay algo quebrado en esta tarde. Viban los compañeros. Pedro Rojas. y que baja y que cruje, de Miranda de Ebro, padre y hombre, son dos viejos caminos blancos, curvos. marido y hombre, ferroviario y hombre, Por ellos va mi corazón a pie.
padre y más hombre, Pedro y sus dos muertes. De Heraldos negros)
Papel de viento, lo han matado. pasa. TRILCE XVIII Pluma de carne, lo han matado. Pusa!
Oh las cuatro paredes de la celda. Abisa a todos compañeros pronto!
Ah las cuatro paredes albicantes que sin remedio dan el mismo número.
Palo en el que han colgado su madero, lo han matado; Criadero de nervios, mala brecha, lo han matado al pie de su dedo grande!
por sus cuatro rincones como arranca Han matado, a la vez, a Pedro, a Rojas!
las diarias aherrojadas extremidades.
Amorosa llavera de innumerables llaves. Viban los compañeros si estuvieras aqui, si vieras hasta a la cabecera de su aire escrito!
qué hora son cuatro estas paredes. Viban con esta del buitre en las entrañas Contra ellas seríamos contigo, los dos, de Pedro más dos que nunca. ni lloraras, y de Rojas, del héroe y del martir!
di, libertadora!
Ah las paredes de la celda.
Registrándole, muerto, sorprendieronle De ellas me duelen entretanto, más en su cuerpo un gran cuerpo, para el alma del mundo, las dos largas que tienen esta noche algo de madres que ya muertas y en la chaqueta una cuchara muerta.
llevan por bromurados declives, Pedro también solia comer a un niño de la mano cada una.
entre las criaturas de su carne, asear, pintar solo yo me voy quedando, la mesa y vivir dulcemente con la diestra, que hace por ambas manos, en representación de todo el mundo, en alto, en busca de terciario brazo y esta cuchara anduvo en su chaqueta, que ha de pupilar, entre mi donde y mi cuando, despierto o bien cuando dormia, siempre, esta mayoría inválida de hombre.
cuchara muerte viva, ella y sus símbolos. De Trilce)
Abisa a todos compañeros pronto!
Niños del mundo, si cae Españadigo, es un decir si cae del cielo abajo su antebrazo que asen, en cabestro, dos láminas terrestres; niños ¡qué edad la de las sienes cóncavas. qué temprano en el sol lo que os decía. qué pronto en vuestro pecho el ruido anciano. qué viejo vuestro en el cuaderno. Niños del mundo, está la madre España con su vientre a cuestas; está nuestra maestra con sus férulas, está madre y maestra, cruz y madera, porque os dió la altura, vértigo y división y suma, niños; está con ella, padres procesales!
Si cae digo, es un decir si cae España, de la tierra para abajo, niños ¡cómo vais a cesar de crecer. cómo va a castigar el año al mes. cómo van a quedarse en diez los dientes, en palote el diptongo, la medalla en llanto. Cómo va el corderillo a continuar atado por la pata al gran tintero. Cómo vais a bajar las gradas del alfabeto hasta la letra en que nació la pena!
Niños, hijos de los guerreros, entre tanto, bajad la voz, que España está ahora mismo re(Partiendo la energía entre el reino animal, las florecillas, los cometas y los hombres. Bajad la voz, que está con su rigor, que es grande, sin saber qué hacer, y está en su mano la calavera hablando, y habla y habla, la calavera, aquella de la trenza, la calavera, aquella de la vida. Bajad la voz, os digo; bajad la voz, el canto de las sílabas, el llanto de la materia y el rumor menor de las pirámides, y aun el de las sienes que andan con dos piedras!
Bajad el aliento, y si el antebrazo baja, si las férulas suenan, si es la noche, si el cielo cabe en dos limbos terrestres, si hay ruido en el sonido de las puertas, si tardo, si no veis a nadie, si os asustan los lápices sin punta, si la madre España cae digo, es un decirsalid, niños del mundo; id a buscarla. De España, aparta de mi este cáliz. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica