173 REPERTORIO AMERICANO Canto a la alondra De SHELLEY Traducción y envio de Pio Bolaños. Costa Rica y febrero del 38 Salve a ti, alegre Espititu!
Ave como tú nunca fueru, que del cielo o sus cercanias vertiera su entero coruzón en profusas melodías de imprevisto arte.
Enséñanos, que o hada, que gratos designios son los tuyos: nunca he oído llores al amor o al vino que ansien dar salida a desborde efusivo tan divino.
Muy alta siempre y elevada de la tierra tú saltas, como nube de fuego, el intenso azul aleteas, y cantando sin cesar, te remontas y remontada aún gorjeas.
Coros de himeneos cantos triunfales en competencia al tuyo, sería todo, sólo vana ostentación, algo en que sentimos va oculto recóndito deseo.
En la dorada iluminación del Sol que se hunde por encendidos celajes, tú oscilas y corres como incorpóreo goce, apenas iniciando su carrera. De qué esencia son las fuentes de tu festivo canto. Qué campos, ondas o montañas. Qué formas de cielo o planicie. Cuál la bondad de tu propio amor. qué ignorancia del dolor?
Aún la pálida púrpura en torno tu vuelo se disipa; como una estrella del cielo en la clara luz del cia y aunque permanezcas invisible, hasta aqui oigo tu agudo regocijo.
Con tu puro y sútil júbilo no puede haber abatimenio: sombras de fastidio nunca llegan hasta ti.
Tú amaste; mas nunca conociste del amor su penosa saciedad.
Rápidas como las flechas de la argentada esfera, cuya viva luz ccerca el claro amanecer hasta que difícilmente vemos, sentimos está allí.
Dormida o despierta tú de la muerte debes creer cosas más hondas y reales que soñamos nosotros los rrortales. o, cómo podrían tus nolas correr por arroyo cristalino?
La tierra y el aire todo es rumoroso con tu coz, como cuando en límpida noche, de un solo enjambre la Luna echa afuera sus rayos de luz y el cielo rebosa.
Esperamos antes y después y nos altera cualquier cosa; nuestra más sincera carcajada en alguna pena está forjada; nuestros dulces cantos son aquellos que expresan tristes recuerdos.
Cuál arte sea el tuyo, no sabemos. a cuál más se asemeja?
Del abigarrado arco iris no fluyen gotas tan brillantes a la vista como de tu presencia, lluvia de copiosas melodías: Si aún desdeñat pudiéramos odio, y orgullo y temor.
si nacidos fuéramos para ni una lágrima verter, no sé cómo tu alborozo alguna vez acercárseros podría.
Como poeta oculto en la luz del pensamiento cantando himnos espontáneos, hasta que excitado el mundo, simpatiza con esperanzas y temores descuidados: Mejor que otras cadencias de ritmos musicales mejor que todas las riquezas que en libros se encuentran iel arte del poeta fuera; tu desdén de la tierra!
Como noble doncella en la torre del castillo confortando a su cuitado amante, le anima en secretas horas con amorosa y dulce música, que inunda su glorieta; Enséñame la mitad del gozo que tu mente debe conocer, igual delirio armonioso de mis labios fluiria; el mundo escucharía entonces, como yo estoy escuchando ahora!
Como dorada luciérnaga en húmeda cañada esparciendo inobservada sus etéreos colores por entre flores y malezas que la ocultan a la vista.
Dr. E: García Carrillo ofrece a usted sus servicios profesionales Medicina General Como rosa emparrada en sus propias verdes hojas al cálido soplo reventada, hasta que la fragancia que despide con fuerte aroma, adormece esos robadores de pesadas alas.
Corazón y aparato Circulatorio Electrocardiografía Canción de lluvia Vernal en el prado centelleante, flores excitadas por a lluvia, todo lo que fué alegre, y diáfano, y lozano, tu música supera: San José de Costa Rica. Teléfono 3754. De a p. previa cita Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica