Yolanda Oreamuno

136 REPERTORIO AMERICANO Vela urbana a marroso a la que lo con con ces es nariz; aguja He llegado temprano. Tal vez sólo a la muerte se llega demasiado reola de responsabilidad. Se deben temprano. Ya estaba la casa replesentir horrorosamente responsables ta de gente. Desgraciadamente tenPor YOLANDA OREAMUNO y maternales. Nos están cuidando a todos con insistencia, con go que atravesar el hall y hacer Colaboración Costa Rica y marzo del 37 tenacidad. Algunas creen mereciuna cadena de saludos. Ya emdo un descanso y se sientan alrepieza también esa incierta y exdedor del moledero, con café y traña turbación que me suhe cogalletas desde luego.
contar co algo a la garganta cuando cuentos de espantos y de tristetengo que saludar. El sa ludo debe legalmente ir acompania zas. y a arreglar con una consdo de una sonrisa. pero resulta ciente suficiencia la situación de la familia que arriba está lloranlo bago y cuando ya he vueldo. Se sienten terriblemente coto la cara y la persona no se dar cuenta de mi buena vo.
modas en la cocina con su car pucs luntad, es que revienta esa sonrisa go, ese cargo que se arrebatan unas a las otras con desesperación amarrada y difícil La pobrecita Tienen que quedar muy bien in ha venido su dudablemenic.
biendo desde el estómago. por la Yo he decidido con un profungarganta, trepando una escalera do sentido de ética no tomar café.
de esfuerzo por la boca, en la lenMe vuelvo a acomodar. En gua, y va a parar a la punta de la nariz. No puede el impulso frente hay uno de esos antipáticos que lleva quedarse en la boca y relojes de pared que dan las hosigue hasta los pómulos, y entonras y cantan una piecita. La cuarque la veo veo, la tonta, la ficta parte, quince minutos: la roca ticia, la atrasada. Yo creo que y uno se queda pendiente espela sonrisa se hizo para los ojos y rando el resto. Es como si si la hu la boca, nunca para los pómulos bieran cortado de un brusco tajo.
y la pero allí se agarra, con Hay que esperar otro cuarto de desesperación, como un trapo, a hora. Qué largo? La piecita sivergonzada y torpe, se queda allí gue en vías de realización. Ahocolgando como una estúpida y no Ta. No. No termina todavía y hallo la manera de hacerla bajar.
mi espera es ya Siento casi deseos de pasarme la había estado esperando una majade.
ya ansiedad. Nunca ría tan grande como ésta. La mano por la cara para borrar el manchon camina despacito, despacito. Mi coEl señor a quien iba dirigido el razón quiere coger el compás del manchón era de los conocidos, de tic tac. Siento algo que me muelos que les corresponde la sonrisa ve las piernas y casi me hace cosde entrecasa, de semanear, pero ahi quillas. Está temblando. Ya tenllegó cuando yo estaba frente a dré que salir corriendo con la bien una señora a quien siempre le he acomodada que estaba. Pero no caído pesada y no se quiso quiEs demasiado rítmico este golpe tar antes de que yo saludara a un en mis piernas. Ahora lo siento señor con quien hay que ponerse MAX en los brazos y en la espalda. Es mi corazón que está como loco Madera de Max Jiméner.
Aquella señora gorda que está porque no puede alcanzar el reloj.
Ya otro cuarto de hora y la pieparada junto a la victrola siempre me crea un vergonzoso conpezar otra vez.
tada a la cabecera. La chiquilla cita está casi completa, sólo le fal.
flicto intimo. No la llamo porque Alli, en aquella silla en el comechiquito se le acurruca y le pregunta in un pedacito muy no sé que nombre se le puede dar, dor, creo que estaré mejor para sistentemente que por qué se mu les Pera de tamaño suficiente para ni la beso. o la beso? Ella espera esta noche interminable. La toco rió su mamá llevarme a la desesperación ¡Maldimuy sonriente con la cara rajada y me convenzo de que es bastante Ahora es ella suavemente mato reloj. y maldita piecita y malpor una mueca sin dientes. un po aceptable. Tomó posesión defini ternal. Si no le dijera nada su dito tiempo! no pasa. no co bondadosa. Siento que me va a tiva de ella. Estoy cerca de la puer. compasión seria perfecta. Se le pasa. Se debe estar burlando de mi. Entre más me excito más pellizcar. Yo dudo. No, no du ta y en contacto directo con un ha suavizado la cara y su mano do. Estoy decidida. Pero. De qué chiflón.
tiene electricidad cuando acaricia pierdo terreno en esta lucha con el lado se puede besar a una señora En el cuarto siguiente pasando la cabecita rubia y llorosa. La reloj, más me desacompaso. se con unos mejillas tan agresivas? el zaguin. hay tres camas y tamHe ha dormido. La desacompasa mi corazón que me chiquilla casi decidido que no en lo intimo. bién una silla y mucha, mucha señora tiene muchos hijos, segura. sacude como un idiota. Me turbo, Pero ella, ha decidido que si gente. Alli están los que lloran mente por eso compasión es he perdido el compás nuevamente repentinamente se pone seria. No me siento en ánimo de llorar suave, tierna y efectiva como algunas veces al bailar. Traseriedad ha bajado un tanto sus y prefiero quedarme en el co Los demás lloran to de encontrar alguna excusa abcarrillos, ya está más sensible. Sin medor. La gente que está en las Me he vuelto al comedor y surda para darsela al reloj que ya embargo yo insisto en que no camas ya no cabe alli. Han empiezo el décimo cigatro. Son no se ríe a carcajadas sino entre Pero, qué le voy a decir. Le voy locado caritativamente en ellas a las nueve de la noche y comiendientes, entre el diente postizo y a dar la mano. Ella no es, era ese los parientes más cercanos y al zan a circular rondas de café sucio de su péndulo. Qué vergesto y la agarraría de la cintura gunas mujeres defienden encarni tinto para sostener el desvelo. En güenza! No sé como salir del a con seguridad. Un abrazo es más di. zadamente su puesto pensando la cocina no se hace más que capuro. Vuelvo a ver el reloj. Pero ficil todavía. en un arranque con mucho acierto que es muy fé.
Si se hace algo más. Hay musi yo no tengo la culpa. fuiste tú de coraje, cierro los ojos y estiro incómodo dormir en una silla jeres afanosas que llenan bolsas, por insistir en llevar el mismo són.
la cara. Es esto un beso? Es más Nadie tiene dompasión de a que sirven galletas y despachan ¿Quién dice que todo debe ir a cua.
beso sacarse la lengua y éste me quella chiquilla que llora deses sirvientas. Ellas probablemente se tro tiempos? Hace mucho que no supo a pelo de maíz.
peradamente hipo húme pasarán la noche en eso. Nunca hacía esto. Debe de ser por falta de Estos triste. qué se hizo mi son do. Le dicen frases y le hacen ca han entrado en esa cocina, pero costumbre. Más bien, nunca lo ha.
risa? La pobre y ridícula sonrisa riño en la cabeza y le ahora son señoras de casa en acbía hecho antes arropan que me costó tantas contraccio las piernas con cualquier toalla. tividad. Con agilidad y soltura Estas disculpas sólo logran au.
nes del esofago. Pero debo em La señora de la sonrisa está sen se desenvuelven dentro de una au mentar mi turbación. Creo que un seria: La lloran.
CO