Violence

264 REPERTORIO AMERICANO Reflejos en el agua La cólera del filósofo Por RAFAEL SANCHEZ DE OCANA De El Nacional. México, DF 19 de setiembre de 1997 FC Spinoza la gloria Aquel dia, la ciudad, emporio de rique.
was y asiento del buen vivir, veiase agitada Las turbas fanáticas, azuzadas por el principe de Orange, se aprestaban a saciar sus odios en los más ilustres defensores de la causa popular. La revolución habia derrocado a la República, respetuosa de la libertad de conciencia y de las leyes, estableciendo sobre ruinas un gobierno de tiranía sobre las almas y de arbitrariedad política El recuerdo de Calvino, ya pálido en Ginebra, revivía en La Haya con resplandores de amenaza. El cielo holandés de luz vela day sombras luminosas, que aprisionara Rembrandt en su paleta, con suaves y mágicas vibraciones, envolvía seres y cosas en una atmósfera de alucinación. La muchedumbre invade las calles en desorden De la discusión se pasa al grito: el grito en ciende el furor. Sólo las corrientes mansas de los canales, reflejan en sus aguas una temblorosa apariencia de tranquilidad.
Mientras, en casa del pintor Spick, en una habitación que por humilde bien parece celda, un hombre preocupado de las cosas eternas, entrega si cabeza a la meditación y sus manos al trabajo, puliendo lentes con delicada habilidad para ganarse la vida. Es un judió de ascendencia española Allí, rodeado de libros sabios y herramientas de artesano, goza aún de los placeres del silencio, propicio a las especulaciones De su razón ha surgido con matemático ri gor un grandioso sistema metafisico. Nalura sive Deo. partiendo del concepto de substancia, donde la Naturaleza y Dios se funden en musical armonía, aclara el misterio del Universo, y explica el verdadadero destino de cuantos se afanan bajo el sol. De constitución débil. flaco y tisico desde los veinte años, conoce la servidumbre del cuerpo, y luchó siempre por la in dependencia del espíritu. La nobleza de su semblante revela bondad, acentuada por las huellas de la melancolia. Sus ojos acostumbrados a la contemplación del infinito, guardan miradas de ternura para sus semejantes.
En sus años mozos, por rebelde al Talmud, fué excomulgado: Que Dios no le perdone jamás. Que nadie trate con él, ni le conceda amistad, ni se le acerque, ni habite bajo el mismo techo, ni lea obra stya. La violencia de los hijos de Israel cayó brutalmente sobre el alumno más aventajado de la Sinagoga de Amsterdam. Tras el anatema, las persecuciones con la pobreza por fiel cortejo. Los rabinos le denuncian a los Magistrados. No negó con auda cin impia el carácter sagrado de la Biblia?
Al opinar así minaba los fundamentos de la religión mosaica y del cristianismo. Los pastores calvinistas se alarman, y obtie.
nen su destierro. Hasta su misma herma na para vengarse, intenta despojarle de su modesta herencia paterna. El judío renega do gana el pleito y luego cede bienes a favor de quien tan mal le quiere.
En la aventura de su vida, los infortunios se vieron compensados con los regalos de la amistad. Habla y se cartea con los espíritus más esclarecidos de la época. En Solidaridad del obscurantismo De Prensa Hispanica. Bs Aires, 29 37 He nombrado a España y no puedo menos que exclamar: iPobre Es paña! Su solo nombre evocalos horrores adonde llevan el fanatismo de los sectarios y la teocracia como sistema de gobierno. España, dotada de ri quezas naturales más abundantes que Inglaterra, no se la ha podido comparar en ningún momento del punto de vista del progreso colectivo. El atraso secular de España y la miseria que afligió siempre a su pueblo son la obra de la Iglesia que dominaba a reyes degenerados ya señores feudales preocupados unicamente de mantener sus privilegios. El feudalismo español, causa de los mayores males, se nutrió de la Iglesia y ambos hicieron causa común La Iglesia argentina, el clero argentino y los ricos argentinos, no se resignaron a permanecer indiferentes ante una oportunidad de mostrar su solidaridad con los que se proponen volver a la servidumbre y a la miseria los proletarios españoles en de emanciparse, y allá fué el señor Franceschi con un cargamento de baratijas divinas, a reforzar el stock en poder de los curas españoles, tan abundantemente provisto que los escapularios alcanzan hasta para los moros infieles. Solidaridad admirable del obscurantismo sobre todo haz de la tierra. Articulo de don Lisandro de la Torre en El Diario. tre ellos, Francisco van den Enden, médico y filologo, cuya hija, tejida de ensueños a manera de las enamoradas de Shakespeare, según la leyenda, fue la única mujer que turbó levemente la serenidad del solitario. Quién más digno del trato de los hombres que él? Los bienes de los amigos decia deben ser todos comunes, y especialmente los del espíritu. Pero su dulzura y tolerancia en las relaciones sociales, no tuercen la altivez de su independencia. Se niega a aceptar un legado que le ofrece Simón de Vries. y rebaja la pensión que éste le otorga por considerarla excesiva. El mariscal de Luxemburgo le invita que dedique un libro a Luis XIV, a cambio de la liberalidad del rey. el Elector Palatino pretende, también en vano, honrar con sus doctrinas la Universidad de Heidelberg. La ruta de la sabiduria que el sigue, ula per ardua, le impide cualquier compromiso que coarte su libertad.
El pensador enfermizo y solitario, emprende una de las empresas más fabulosas que es dado soñar. En su Etica, obra donde depositó lo más intimo de su ser, trata a las pasiones, es decir a lo más incierto, movedizo, arbitrario y enigmático de la naturaleza humana, a la manera de los geómetras, como si fuesen líneas, superficies cuerpos. Qué sabia del amor quien nunca conoció mujer? Qué de las riquezas el que nunca las tuvo. Qué de et que la despreció. Qué de la ambición el humilde. Qué del miedo que fue el que nunca lo tuvo? Qué del odio el que perdonó siempre El filósofo consagrado a las cosas eternas y desdeñoso de las temporales, que enturbian la serenidad del ánimo y oscurecen la razón, explicó, como ninguno lo hiciera el origen y mecanismo de las pasiones, sin vivirlas, recluido en su celda.
Tal fue su hazaña, por un heroico esfuerzo del pensar En aquel día, que era el veinte de agosto de 1672, los rumores de la ciudad en fiebre llegaron a la casa del filósofo. Aunque ale jado de las luchas políticas se interesaba por la suerte de los hombres, y en sus eseritos había defendido los derechos de los ciudadanos según la ley natural. Por conocer a la raza humana y sus desvaríos, nada puede producirle horror, sorpresa, cólera o pesar. La divisa, no llorar, no indignarse sino comprender, fue compañera de su vida.
El filósofo permanece impasible. Pero al saber que su amigo Juan de Witt, el humanista, defensor de la República y de la libertad había sido asesinado y con él su hermano Cornelious, por vez primera en su vida lloró. Al llanto sigue la cólera, y escribiendo un manifiesto para decir al pueblo la verdad con riesgo de su vida sale a la calle, clavando sobre un muro su cartel, donde acusa a los asesinos: limi barbarorum.
Fue la única lección en público que dió Benito Spinoza. Hoy, en cualquier calle, de culquier ciudad. sus enseñanzas serian provechosos.
en camino