204 REPERTORIO AMERICANO on vous a pris votre pendu?
Les lois ne vous feront, dites vous, nulle grace?
Si madame y consent, y remédierai bien.
Mettons notre mort en sa place, Les pasants y connaitront rien.
La dame y consentit.
no y para uso particular. Por dos grandes ventanas puede verse todo el paisaje, de una de ellas se servían para que las aves pudieran remontar el vuelo en cumplimiento de su misión. Las celditas todavía conservan buellas de los pequeños huéspedes, que no obstante ser en apariencia insignificantes, podían cumplir misiones tan grandes. Por último, nos dirigimos al jardin de las Damas. Llamábasele así por ser y estar al servicio de éstas exclusivamente Las familias nobles tenían costumbres muy austeras, las damas no podian salir a menudo a la calle, por esta razón en tonces tenian que disfrutar de un poco más de holgura. De regulares dimensiones, estaba situado en la parte interior, a un metro ba situado en la parte interior: a un metro de alto laseras en forma ondulada es taban sembradas de plantas y flores de raras especies, de formas caprichosas y delicados marices: constituían una fiesta para la vista. Entre una y otra, un camino de la ja: de piedra permitía pasearse y cuidar de las plantas. la sombre del alero una banca de piedra servia para gozar del aire embalsamado de las flores.
Por fin cerróse tras de nosotros el último exponente de raza ibérica que tanto y tan bien contribuyó a castizar la brava pero leal sangre india.
Carta literaria Buenos Aires, de agosto 1937 surpan la prosapia de Orfeo, en cambio Señora Amelia Cide no escatimo mis aplausos para los verApido. 116.
daderos hijos de la musa Caliope que.
San Jose, como lo hace usted, pulsan la lira con la Rep. de Costa Rica.
misma eficiencia y fervor de un rey Da vid sobre los campos de Judea.
Distinguida poetisa Su emotividad extraordinaria, el fon Dias pasados recibi su libro de poe do y la forma de sus poemas al servicio mas titulado: Interior cuya lectura aporto de un tecnicismo del verso de carácter a mi ánimo un florecimieno de ideales.
nato y esa su luminosidad del cony un placer espiritual que sólo el arte a la categoría del maesverdadero plasmado en el lenguaje de tra en el dificil arte de escribir.
los Dioses es capaz de producir.
Con mis felicitaciones, reciba mis saSi es cierto el axioma latino de que ludos y un fraternal apretón de manos paeta nascitur, indudable que usted na de su atento y ció poetisa con una mentalidad poco coOVIDIO GUADAGNI Poeta yo también, versado a la cri(Director del Gabinete tica severa hacia todos aquellos que ude Filosofía y Letras)
cepto, la elewana nun Tal vez este final concuerde mejor con nuestras costumbres, aun cuando si fuera que hoy se repitiera el caso, es muy probable que la viuda de Efeso tuviera muchas imitadoras, pero, en todo caso, la variante impuesta por el fabulista francés deja sin demostrar la tesis que Petronio había sentado por boca de Eu molpo, a saber: que las mujeres aman con mucha facilidad, que se olvidan muy pronto de los que las aman: que no hay mujer ninguna tan honesta que por liviandad no llegue hasta hacer cosas feroces y que, pa Ta demostrar esto, no necesitaba acudir a las tragedias ni citar nombres de mujeres conocidas ya en siglos anteriores, bastábale referir un suceso ocurrido en aquellos mismos dias. este suceso es el de la viuda de Efeso. Ahora bien, si el final del cuento se varia como lo hizo La Fontaine, el poco benévolo y menos galante juicio que Eumolpo tenía sobre las mujeres queda sin confirmación. Petronio no podía incurrir en tan grave falta. Por lo demás, esta fábula est que plaisant dans La Fontaine. com dice el citado Durand.
Otros traductores de este pasaje de Petro nio fueron. Saint Evremont Dessertation sur Petrone. y Levaleterie Oeuvres melées de Saint Evremond. Finalmente los dos Guerde. padre e hijo, han hecho traducciones del Satyricon, una de las cuales, la de Hegin de Guerde (hijo) ha vertido al francés la obra completa, acompañándola con el texto latino que es el que me ha servido para el presente trabajo.
En Italia, como es de suponer, también se bizo popular este cuento, que fue incluido en Il Novellino o colección de cien novelas antiguas, con el número LIX. Según esta novela, fué el emperador Federico Il quien hizo ahorcar a un gentil hombre por cierto de lito. encomendando la guarda del cadaver a un caballero. Cuando los parientes del difunto, viendo la guarda abandonada. se llevan al ajusticiado, el caballero acude a un monasterio en en busca de un cadáver y alli encuen cuentra a una viuda que llora la muerte de su esposo. pero, mediante la promesa de matrimonio, ésta no vacila en entregar a su futuro esposo el cadáver de su finado, para que lo cuelgue de la horca Los cien cuentos o novelas que componen Il Novellino, parece fueron escritos o recopilados entre los años 1193 y 1350, según opinión de Roque Otamendi (Il Novellino Editorial Tor, Buenos Aires. y la primera edición de esta obra fué impresa en Venecia el año 1525. al cuidado de Carlo Gualteruzzi. Marenduzzo, que se encargo de ilustrar con otra edición hecha sobre el codice gualteruzziano. escribe co mentando el cuento del ahorcado: Esta novela, dice Ancona, está sacada de la Matrona de Efeso, de Petronio (Satyricon, XXV. que aunque tenga alguna semejanza con la novela china de Tchou ang tseu y la matrona de Soung, es considerada de origen griego: más aún, Remusat, traduciéndola del chino, la cree imitada de las fábulas de Efesio, introducidas en China, y a las cuales recurrió el mismo Petronio. Fué notoria en el medioevo y se hizo popular en muchas compilaciones de los libros de los Siete Sabios, en no Julian La viuda de Efeso Capitulos CXI y CXII de Satirycon de Petronio. Estudio y traducción de Maximino de Barrio En la revista Azul. Año No Azul. Argentina, setiembre octubre de 1930 El Satyricon o Satiricon de Petronio, obra En cambio, entre los franceses abundaron tan exteriormente obscena como profunda los apasionados de Petronio.
mente filosófica, es demasiado conocido para El primero que dio a conocer en idioma que sea necesario presentarlo nuevamente al francés este capitulo de la viuda efesia, fui público. Quién no conoce esa obra maestra un monie, cuyo nombre se ignora. Fué pude satira, de ironia y de crítica que se llama blicado en 1475 con el título de Fable du el banquete de Trimakcion. Quién no ha oi chevalier et de la femme veuve por el Herm do hablar del espiritual y picaresco cuento de de los la viuda de Efeso que ha dado origen a no Agustinos de Lyon, doctor en Teologia. En 1614, Brinon de Baumartin pocas imitaciones todas inferiores a su origi compuso sobre este mismo episodio su traginal!
comedia Ephésienne. Imitaciones más o meLimitando nuestras especulaciones a este acertadas se último, que es el objeto del presente trabajo, se encuentran en el Quatrieme discours de Brantóme sur les femmes galantes diremos que el cuento de la viuda de Efeso en el Recueil epistolaire de Méré. El arreha figurado entre los primeros fragmentos glo más conocido de este pasaje es el de La que se conocían de la obra de Petronio y que, Fontaine que hizo de él uno de sus más agrareunidos en libro, fueron dados la luz pú dables cuentos en verso. Sin embargo, el gran blica por primera vez, en Milán el 1477. fabulista francés alteró el original con poca En España, tal vez por la indole escabrosa fortuna, aun cuando Durand opine lo del asunto, no se ocuparon los literatos y tra contrario. Por ejemplo, Petronio termina su ductores de esta obra. si se exceptúa a cuento haciendo que la viuda por su propia José Antonio González de Salas, que escribió una inspiración, salve al amante, condenando al subrillante disertación sobre esta sola palabra plicio el cadáver del marido. La Fontaine Satyricon para dilucidar si su etimologia era quiere suavizar este final que según Dugriega o latina: grave cuestión que entonces rand. es un es un trait horrible et que chouque apasionaba a los eruditos y en cuya discusión toutes les convenances y hace que sea la esclaHeinsius. Scaliger y otros tomaron la defensa va la va de tan macabra proposición. Desde la etimologia griega, mientras que Casau pués que el soldado hubo contado a la viuda bon, Spanheim y Dacier se pronunciaron por su cuita que debía costarle el ser él crucificala latina do, porque tal era el castigo que se imponia Ultimamente el señor Roberto Robert en caso los que abandonaban la guar(hijo) ha publicado una traducción que más dia bien parece hecha de la versión francesa de Guerde. esclave alors lui dit, le voyant éperdu: nos ac notas autora