BolshevismEnrique EspinozaGerman RevolutionHitlerSocialism

300 REPERTORIO AMERICANO mediante su Fallo sobre el. Viene de la página 395)
Sobre todo, acusamos al hitlerimso de la tuales de Alemania, para quienes la libertad matanza bárbara, de la detención y de la de su religión y de la conciencia significa el tortura de millares y millares de compatrio fundamento irremisible de cada cultura.
tas, cuyo solo crimen es, de haber mante En manera y con fines verdaderamente bol nido su fidelidad verdaderamente alemana chevistas el bitlerismo emponzoña metódicapara sus viejos ideales para sus amigos, en mente el alma del pueblo alemán, vez de aparcarse con falta de carácter no racismo materialista, mediante su idolaalemán. Necesita la entera infamia y villania tría del estado y su adoración del poder, pe del hitlerismo, recompensar a los unos por su cados contra el alma y el espíritu del pueblo traición y torturar al mismo tiempo los otros alemán y de la eterna ley moral, que un dia por su lealtad.
se vengaran horrorosamente.
qarin Constatamos, pues, que la política interior Constatamos pues, que el hitler smo está del hitlerismo es tanto anti nacional como concientemente envenenando el alma del puedesbaratadora, destructiva y traidora, infame blo alemán, que está conduciendo una guey vil.
tra cultural bolchevista contra el espíritu y el alma, contra la moral y la religión, una Hace cuatro años que el goberno Hitler guerra que representa el mayor y el más exeprometió desembarazar el camino para la re crable crimen del hitlerismo.
generación cultural del pueblo alemán, y sobre todo fomentar y apoyar a las virtudes reli. Sometemos este fallo sobre los cuatro años giosas.
del gobierno Hitler al examen del pueblo ale Después de cuatro años constatamos que el mány a la verificación de la historia.
hitlerismo ha traído también este supremo y Para nosotros sacamos la consecuencia: sagrado deber. El fetiche del estado total ha Luchar con todos los medios contra este sido puesto sistemáticamente en lugar de Dios, sistema de la destrucción para salvar al pue.
y las almas de los religiosos fueron no meblo alemán nos torturados como los espiritus y cuerpos Es nuestra sagrada convicción que la caida del pueblo alemán. Una guerra rastrera a exde Hitler sea la premisa para la salvación de terminio, hecha a todas las virtudes religiosas Alemania y para la convalescencia de Europa.
ha violentado a los correligionarios de la Pues esta salvación no puede efectuarse con cristiandad, una campaña reaccionaria al hu los principios e ideas de la pasada época limanismo ha violentado a los hombres espiri. beral, con sus métodos capitalistas de imperia.
lismo y el materialismo, esta salvación puede efectuarse solamente con los principios e ideas de la Revolución Socialista Alemana: Libertad Nacional!
Justicia Social!
Autonomia administrativa sobre la base de regidores profesionales y concejeros funcionales!
Regeneración cultural!
Cooperación Europea!
Hondamente persuadidos de nuestra responsabilidad decididos de volver ejemplarizado doramente por el logro de estos fines, nosotros, los jefes de los grupos y ligas firman.
tes del Nacional Social Revolucionario Frente Alemán contra el Hitlerismo invitamos al pueblo alemán hacer suyos dichos fines y luchar por su logro con inexorable e rergia, sabiendo y queriendo que: El hitlerismo ha de morir para que Alemania viva!
Reichsleitung der Schwarzen Front.
Ring deutscher Jung Katholiken Volkssozialisische Bewegung Deustchlands.
Ring Buendischer Jugend Die Fuehrung des Schwarzen Strahlhelms Rovolutionaere Landvolkbewigung Bund fuer foederative Reichgestaltung Diez minutos con el autor de El Salvaje imeses seguidos Por ENRIQUE ESPINOZA De La Vida Literaria: Buenos Aires y julio de 1928 No puede decirse que abunden entre nos. de la nueva edición de El Salvaje. para La Vi.
otros los hombres que han tenido la suerte da Literaria.
de ver esos seres antediluvianos. ciencia cier. El autor de esta historia. ha comenta, sólo sabemos de dos: un escritor y un na zado el dinosaurio golpeando con una pata turalista. El primero es el señor Horacio las páginas ha hecho bien en callarse. NaQuiroga. y el segundo el difunto Clemen da sabe de nosotros, ni de nuestra vida, ni de te Onelli plesiosaurio alguno. El contó a su modo la EI señor Quiroga, según nos cuenta él historia de seis meses en que vivimos juntos.
mismo por boca de su Salvaje, vivió en las pero fuera de tres o cuatro recuerdos al res.
inmediaciones de las cataratas del Guaira con pecto, de algún incidente nocturno, nada un dinosaurio, con el cual hizo vida de sel. puede decir. Es un un hombre discreto, de limi.
va seis meses tada fantasia, tal vez: más digno de crédito por El finado naturalista en cambio sólo ha lo tanto. Vean, ustedes, si no, la timidez con visto a su plesiosaurio en sueños, como co que dicho señor abordó la historia de nuestra rresponderia a un simple escritor.
fraternidad sombria, como él la llama. propósito de la nueva edición de El Sal No cabe duda que su deseo real fue hallarvaje hemos pretendido pedir al señor Quiroga me vivo en plena época actual y vagabuninformes sobre la vida de los monstruos en dear conmigo por algún paisaje lluvioso, se cuestión, inútilmente. En balde hemos invo. gún su hábito. Tal lo deseó. Pero en razón cado la remota actualidad del tema. El se de su corta fantasia no se atrevió a plantarme ñor Quiropa, tan parco de palabras como de vivo en el Iguazú, en el Guaira o en cual letras de molde, se ha abstenido de darnos u quiera de sus rinconcillos de selva. Para fanna sola impresión.
tasear con este vuelo se requiere un poco más Hablen con el dinosaurio nos ha dicho de imaginación que la que cabe en una tibia por fin de despedida. El podrá informarlos cabeza de cuentista.
desean Hay cosas, vean ustedes, que no pueden Es lo que hemos hecho después de a ser retiradas de las tinieblas sin que quemen Francarle al señor Quiroga. ocupado en ba las manos. Una de estas cosas es admitir la cerle un tapado de pieles a su mujer el existencia contemporánea un ser de la cra cuento inédito que publicamos: Una noche mesozoica. Hay tal cúmulo de razones para de Eden desecharla, tal certeza para negarla y jugar Pero he aquí lo que nos ha dicho el di el cuello en su contra, que nuestro autor no nosaurio desde la sombra de unas páginas se atrevió, ni en broma literaria, a tropezar conmigo en un ambiente actual. El más li.
rico estudiante de ciencias naturales tampoco se hubiera atrevido. esto porque, como he tenido el honor de expresarles, es imposible que un animal secundario, yo por ejemplo, pueda haber sobrevivido su era y aunque un autor de cuentos o novelas ignora por lo común cosas mucho más evidentes que ésta, por pura casualidad el nues.
tro sabia que si deseaba un serio y real en cuentro conmigo, forzoso le era hundirse tras mi pista a través de kilómetros de sedi.
mento, o. soñar.
Es lo que hizo nuestro autor: sono que teasnochaba conmigo seis meses continuos contando luego algunos parcos incidentes, To.
do lo cual no habla en favor de su fantasía, habla en pro de su seriedad. Esto en cuanto al señor Quiroga.
En lo que respecta al plesiosaurio que tanto dió que hacer al ingenioso señor Onelli y que todavía le interesa a ustedes. nada se Parece broma: pero así es: nada se de él. Ignoro lo que puede haber hecho o pensado el plesiosaurio. por la sencilla razón de que cuando yo vivía de verdad y no en este libro.
los plesiosaurios habían desaparecido ya hacia muchísimo tiempo de la la faz de la tierra.
Para mi ya eran entonces seres antediluvianos. creerán ustedes? El mundo es más viejo de lo que suelen imaginar los lectores de periódicos. Mitológico pues, era ya el plesiosau rio en mi tiempo. Mucho más cerca de noso tros, pero hacia adelante, están el pterodactilo o algún pequeño mamífero bastante distinto de los que ustedes tienen ahora. Pero no les interesa a ustedes estas frescas cosas, y si el plesiosaurio.
Ahora bien: los dinosaurios no fuimos ricos de imaginación, porque el calor, los dilu.
vios y las tempestades eléctricas bastaban pade lo que