ImperialismStrike

REPERTORIO AMERICANO 301 Alzad las manos, trabajadores: la huelga es el único ángulo mayor de donde salen ondas a morder el paso de los siglos.
aquí canto un himno rojo en las calles trasnochadas de la ciudad que derrite su tragedia en el vientre del sol de hierro.
Desde las ventanas abiertas ladran las estrellas al paisaje calafateado. Los globe trotters de Boston, Chicago y Filadelfia rien desde el ojal de los rascacielos.
mirando la tragedia de las calles angostas como alambres de tranvía por donde pasa la muerte rozándonos la sombra.
En cada vientre de mujer la protesta se hace angustia de colonos del nortey en la cartera de los hombres hay una tarjeta: Paula Romero, un servidor.
Esta llamada escrita en la orilla de los oceános envuelve el grito de 20 pueblos donde el imperialismo yanqui iza sus banderas.
Camaradas de Suraméricaaquí se siente que México es nuestro. Los indios estiran el sol desde los Andes desparramando en el campo semillas de libertad y el grito tal vez inás fuerte de la Revolución.
GBC MANA mismo más EI Hombre. Máscara De Patria. San Salvador. he aquí que, sin saberse cómo ni cuándo, en alguna que aquel hombre existia en realidad, que no era una figura vaga aldea donde no hizo estación el Tren de las Figuras de cera escapada de estas páginas. Pero una vez comprode Cera, subió a él un hombre.
bada tangiblemente su existencia, pude dedicarme a admirar aquel hombre era el Hombre Máscara. Era el Hombre largamente uno de los más Inverosimil. Era el Hombre Postizo. No era el; era otro: iba que me haya sido dado contemplar.
completos ejemplares humanos disfrazado de sí mismo. Su cuerpo, alto y desarrollado, no Porque aquel hombre estilizaba en sí, maravillosamente, parecía suyo: diriase que andaba en zancos. Llevaba una una de mis amadas filosofias, uno de mis interiores Homcara larga, aunque sutilmente bres Tipos, una de mis más caras máscaras.
huevo. Su cabello, negro y rizoso, no podía ser sino peluca.
gorda, como la cara de un he aquí que, al entrecerrar yo los ojos para mejor miSus ojos, muy negros y muy blancos, con menudas venas rarle, para verle mejor y más interiormente a través de una rojas, parecían de porcelana bajo las cejas espesamente ne propicia niebla de ensueño, comenzaron a esfumarse paulagras, cejas de bajo profundo, cejas de ópera. Bajo la nariz tinamente sus contornos: y entonces pude observar que, a colorada, como de cartón, aparecia, mal pegado, pronto a medida que iban borrándose sus perfiles de hombre real, a deslizarse hacia la mejilla grande y lisa, blanca y rosada y medida que iba dejando de ser él, iba adquiriendo progresiazul, un bigotillo de puntas retorcidas, engomadas: un bigo vamente otras características más vagas, otros lineamientos tillo teatral. bajo la barbilla, ovalada y floja, había un pro más nebulosos y profundos, otros rasgos más tenues, más fundo surco de gordura que semejaba el borde de la máscara. generales, y por lo precisos.
Tan perfectamente, tan extraña e inverosimilmente iba recorde entonces que me hallaba en el Tren de las aquel hombre caracterizado de él mismo, que hube de res Figuras de Cera. comencé a entrever lo que aquel homtregarme los ojos para cerciorarme de que no soñaba, de bre significaba para mí: empecé a comprender que aquel hombre era yo; y que aquel hombre eras tú; y que aquél hombre era él; y que aquel hombre éramos nosotros, y vosJOHN KEITH Co. Inc. otros, y ellos. Aquel hombre no era uno, sino muchos. Aquel homSAN JOSÉ, COSTA RICA bre no era ya un hombre, porque comenzaba a ser El Hombre. es que todos somos Hombres Máscaras. Todos vamos Agentes y Representantes de Casas de primer orden disfrazados de nosotros mismos, profunda y misteriosamente Cajas Registradoras National The National Cash Register Co.
más hondo de nuestras entrañas, en las tinieblas adonde no llega todavía nuestra conciencia. No hablo aquí de las apaMáquinas de Contabilidad Burroughs riencias exteriores: una máscara no es una cara, una mera forma externa. Una máscara es séame permitido jugar con Burroughs Adding Machine Co.
las palabras una máscara es más que una cara, es un yo Máquinas de Escribir Royal externo y superficial que recubre el verdadero yo del individuo.
nadie ni aun nosotros mismos nadie cono Royal Typewriter Co. Inc.
Hombre que está debajo del disfraz, al Yo impersonal y sin Muebles de Acero y Equipo para Oficinas nombre que se oculta bajo el nombre y la personalidad. asi hay disfraces de fealdad y de belleza, y hay máscaras Globe Wernicke Co.
de dolor y de alegria, y hay caretas de maldad y de bondad.
Implementos de Goma asi existen hombres feos, que como se dice de Sóel final de vida sin dejar de ser feos United States Rubber Co.
cuanto a los rasgos exteriores, llegan por fin a manifestar Maquinaria en General en ellos una interior y milagrosa belleza, una belleza inefable, intangible y divina, una belleza que establece, por enJames Motley, New York cima de la fealdad misma, el reinado de la Serenidad y la RAMÓN RAMÍREZ Armonía. hay también hombres y mujeres perfectamente bellos, en quienes domina, sin embargo, como un malestar indefinible, una vaga expresión de fealdad; y es que les falta Porque al crates hacia el en JOHN KEITH Socio Gerente Socio Gerente