356 Ofમ: REPERTOAMERICANO 12W ma SABO eminente poligrafo en las rometen en la acción que bores de redactor de El Araucano, el periodico oficial, que si no fué tribuna de ruidosa diSIEMPRE SE HA SABEO fusión, tuvo para él el carácter de altísima cátedra, desde la cual ejerció su provechoso que para juguetes pesados, de rueda magisterio público. Sobre que escribe Bello les como velocipedos, automóviles etc. en en el diario gubernativo? Echemos una mirada mejor lugar por su surtido y precios sobre la obra del eminente ent columnas periodísticas. Allí escribe sobre lite.
el Ciclo Club.
ratura española, sobre La Araucana de Ercilla, Frente a la Biblioteca Nacional sobre la indisputable paternidad de Le Sage en la composición de Gil Blas; comenta las primeras ras Memorias históricas presentadas a la pletar su saber con el conocimiento de las cienUniversidad; discurre sobre el modo de escricias juridicas, y puesto a la obra legó a Chile bir y estudiar la historia; traza las semblanzas ese fruto imperecedero que se llama el Código del Coronel Beauchef, del padre Guzmán y de Civil. Es verdad que sus Principios de Deresu entrañable amigo don Mariano Egaña; con cho de Gentes habían anticipado ya lo que sería dena el lujo; se interesa por las últimas nove la obra del jurista, pero fué necesario que su dades literarias y las más recientes especula espiritu innovador trazara la honda y profunda ciones de la filosofia; se ocupa de las vias de huella de su labor legal, para que su personacomunicación, de enseñanza, de historia natu lidad revistiera los contornos del humanista ral, del teatro, de la la educación, de definitivo.
servicios hospitalarios, de la reforma judicial, del Los hombres del Renacimiento que concibiearreglo de los archivos, del orden ron el aprendizaje de los conocimientos humaregir en las Notarias. Pero Bello no era un nos como el mejor ejercicio espiritual ¿llegasimple zurcidor de frases, ni un mero divulga rían a soñar con la formación de una personador de ideas ajenas; en el articulo más modes lidad tan completa, para la cual ningún orden to ponía algo suyo; vaciaba todo su pensamien de estudio fué desconocido? Porque para ento sin hacer alarde de sus conocimientos ni de contrar a Bello un humanista semejante a él, su erudición profunda.
habria que evocar los nombres de Leonardo y ¿Qué le faltó a Bello para ser el primer hu Goethe, los tipos superiores que ha producido manista americano de su siglo? Le faltó com el género humano.
Ricardo Donoso que debe no soltará en su contra las intranquilidanés de la rutina irritada. Proseguirá considerado como individuo afiliado al grupo de los defensores de los intereses del pais. Mas lo tendrán como un afiliado moderado. hasta del otro lado le vendrán voces de aliento para que continue en en su puesto.
Él por su parte no condenará a los que comen diversas maneras los intereses nacionales. Decimos mal. los condenará en cuanto se muestren vinculados a si los condena. Pero como el medio, la ratina del medio, le da otras vinculaciones, tendrá que flaquear y seguir la ley de física de que los líquidos toman la forma de la vasija que los contiene. Desde luego, deo, en nada menguará su virtud civica. Sin embargo, se perfila un tipo de hombre de transacción.
Miraremos estos aspectos de la vida nacional erradamente, o influidos de pesimismo? Es posible. Porque no estar de acuerdo con que nuestros hombres al definirse lo hagan condicionalmente, es negarse a comprender que existe una ley de evolución que rige todo lo creado. El término medio es, sin duda, la actitud más sabia y prudente para la conducta del cindadano. El hombre de transacción es el representativo de ese término medio. Tiene muy desarrollado el sentido del tacto y cualidad tan sutil lo convierte en amo de situaciones dificiles.
Es preciso darse cuenta de que a veces en la vida de un país el respeto y el ansia de los hombres destaca la figura austera de aquehos varones ejemplares. Mas ellos no tienen nada de común con el hombre de transacción Condenamos el término medio porque nuestro accion espíritu repulsa, con una repulsión espontánea, ese elemento humano de aleación. Queremos alentar en todo entendimiento la admiración por los hombres sólidos y verdaderos. Mientras no se despierte una corriente iente de exalta ción por el espíritu vertical estaremos expuestos al dominio de la mediocridad. En esta hora de nacionalismo, por ejemplo, los que nacionalizan están obligados a ver claro el problema del hombre que ha de sustentar la defensa. Esta sensibilidad pesimista nos estorba la emisión del juicio repleto de esperanzas, No vemos las aspiraciones concentradas. Si, dispersas. lo que todavía es más repulsivo, el atisba y va haciendo presas. si no el egoismo, la indiferencia. El término medio parece imponerse. Algunos dirán que estos movimientos de renovación de los principios sustentadores de la grandeza de un pais siempre siguen un curso lento y vacilante. Muchos se halagarán pensando en que siquiera los tengamos nosotros, los tenga nuestro país. Que la buena voluntad de estos optimistas fructifique. que en verdad el pais se salve.
Estampas No hay tregua posible El egoismo, la indiferencia darán al traste con todo sume el rutina. LGUNOS aspectos de la legislación del país han avanzado de un tiempo para acá. El impulso lo han recibido del ciudadano preocupado por tener una patria en donde vivir sin reatos la libertad. No obstante lo mucho que se ha conquistado, nadie puede afirmar que le llegó la hora de ponerse al margen.
No hay tregua cuando se sirven los intereses perdurables de la patria. Cada día trae para esos intereses una nueva preocupación. Los movidos por el nacionalismo.
que es un sentimiento enardecedor, en direcciones de luz, no piensen que deben ceder el puesto a unidades de refresco. La aspiración tiene que realizarse conjuntamente. El que deserte está perdido y echa grave mal sobre los intereses que defiende.
Precisa darse cuanta de que sin sacrificio no se hace patria. La irreflexión puede hacer al hombre aceptar ciertos principios, pero cuando ya le calen profundo y sienta que lo van separando de la rutina circundante, asume entonces una actitud de desprendimiento clamando porque vengan otros a sustituirlo. En do de su clamor no hay sino la mordedura del sacrificio. cuán pocos son de naturaleza recia, machuchos, tan sólidos y verdaderos, que diria Gracián! Lo existente llena Ins aspiraciones limitadas de muchos. De modo que mientras la la gente se mueva apegada la rusigue sonando el eco uniforme del paso que todos marcan. En cuanto hay alguien que no quiere marcarlo la rutina abre un abismo y lo muestra al disidente. Son muchas las intranquilidades que de ahí pueden salir. El medio ambiente tiene ya su nota invariable y cualquier otro sonido será estridencia que repercuta sorda y vengativa. Cuántos sentirán el ánimo dispuesto a la lucha? Nos parece que muy pocos. Porque no hay que hacerse ilusiones. Cuando ya un hombre quiere ponerse al margen de la tormenta en que se el que se incorpora a batallar por los intereses supremos del país, hay que tenerlo por apocado. el apocamiento es conformidad con la En diversas formas muestra su retraimiento el hombre que en un país vacil ante los halagos de la rutina. Es un espiritu honrado y vigilante. Estas virtudes no son en él cosa pasajera. Lo siguen animando. Pero no es ya un enardecido. Dará sombra y no calor. Es decir, lo más fácil de dar, porque no exige de la entraña humana la combustión que sofoca y rompe la apacibilidad. Se mostrará dispuesto a ayudar y no a cooperar. Dira que es bueno mantenerse en el rumbo de la defensa.
Teorizará. Hará el elogio de los que no desEn el fons SASTRERIA CARDENAS tina Teléfono 3649