90 REPERTORIO AMERICANO a lo largo imaginar, para encerrar galli a la oración la llamaban para sacarlas de la oscuridad y po1185. patos y vacas de arcilla: ir a rezar el rosario y a acos El yerno de la señora entró ner de manifiesto ante nuestros a poner portales con el musgo tarse, la manecita recogia los cuando ella terminaba de na ojos el misterioso encanto que húmedo y perfumado que pas tesoros, los guardaba en quién rrarnos su maravillosa aven encerraban.
recia acabado de coger de la sabe qué profundidades y por tura y nos mostraba el con El yerno se puso a pasear montaña, a disponer en dibu ultimo se ponía a hacer cos tenido de la arquita de la sala, miranjos armoniosos los pedazos de quillas en la cara de la niña Se echó a a reír con risa torpe do la escena con burla comvidrios de colores, los frijoli o a enmarañarle el cabello que le puso a tem a temblar cache pasiva. Cómo podia alguien caracoles, ete, con cuan cuando ella acostaba la cabeza tes barriga. ya espaldas de prestar atención a semejantes ta habilidad hacia bailar los en el suelo.
la señora se tocó la frente con boberias? trompos. Hasta mañana, Baltasar, gesto burlón como advirtién faltaba tiempo para resolver Las horas de almuerzo y que Dios te de comida se le hacian eternas y Hasta mañana. aaaa.
donos que no le hiciéramos los trascendentales asuntos que te dé buena noche.
el país habia puesto en sus apenas sus tíos descuidaban Pasaba el viento: el silencio razón que andaba patas arri arriba manos.
los bocados para volver a sus se ponia a murmurar en los La viejuca seguia pasando Como era secretario de esmusarañas. la chacanlincilla árboles y la noche comenzaba sobre aquellas pobres cosas sin tado se creía un personaje muy se escabullia en busca de la a tejer entre el follaje del valor su inocente sonrisa que importante, muy importante.
pequeña amiga que vivia bajo mango, en el cual ya no se era para mí como una lamel pedrejón del pozo. cuando sentía removerse la ardilla. parita de aceite encendida para sia in Jo Sitivtre. él, en cambio, le caso, porque se trataba de una In dito. De Zwa (Viene de la prima a el espacioso después en Corto tie tiempo sara Se honra al filósofo Bergson Si al acaso manoseas libros como Materia y Memoria o Evolución Creadora, puedes perderte en el laberito. Es mis simple en el centro del Barrio Latino. cerca zamos a esparcir su doctrina. En ese comenzar por el leer los priprincipio del Panthéon, la Bibliothéque Ste. Etien tiempo la fama de Bergson estaba conmeros libros de Bergson, Los Antecedentes ne du Mont. Habia en la clase cerca de finada a un pequeño grupo de admira inmediatos de la Conciencia, y seguir asi sesenta jóvenes, entre 18 y 20 años en dores, y para el gran público era entesu doctrina a la vez crosu mayoria, dedicados a hacerse maestros, ramente desconocido.
nológica y lógicamente. una corriente quienes se preparaban para la Ecole Al terminar mis exámenes, en vez de debe seguirse desde su nacimiento.
que seguir el profesorado, opté por el pe¿Cuáles son los fundamentos de las por primera vez, oi la voz de Bergson. riodismo. No obstante, todas las semanas eorías de Bergson Primero que todo.
el unos pocos hechos que caen dentro del ruido y zumbidos como en una colmena. College de France.
El auditorio, dos o campo de observación corriente, cuya Pero no bien la silueta delgada de Bergson tres docenas de oyentes, muchos de los realidad es fácil para todos verificar. Lo había aparecido en el umbral, cuando cuales se acercaban durante el invierno que llamamos tiempo, dice Bergson, es todo el estruendo se detenia como por tan sólo a recibir calor, se perdía casi decir, duración medida por las manecimilagro. Sobrevenía un silencio religioso.
anfiteatro un reloj o los dias de un calenhice un viaje dario, no es en absoluto la duración real tenía más allá de treinta años, avanzaba que me tomó dos o tres años. Al regrecomo es revelada por nuestra conciencia.
rápidamente hacia la plataforma y coParís quise oir una vez más a simple hecho de ser mensurable muesBergson, habiendo estado durante mi tra que pertenece meramente al espacio.
ma Su cara era delicada, algo delgada, viaje en correspondencia con él. Al lle porque sólo el espacio está sujeto como si su fuerza interior, el fuego de gar al College de France me sorprendió medida. El tiem tiempo real, como nuestra su mente, existieran a despecho de su ver una larga fila de carruajes extendida conciencia nos pone en condiciones de entenderlo, estos antecedentes inmediaancha tira corporal, su frente era muy hasta la puerta.
fisonomia sobresalía ¿Qué hacen aquí todos estos carruajes. tos de la conciencia, nada tiene que ver especialmente eran sus ojos, fijos, con pregunté al conserje.
con esa suerte de duración. Es algo de una intensidad notable, y una penetraMe miró con aire de sorpresa y de naturaleza especial sin semejanza con ción vigorosa, como mirando hacia el piedad.
ninguna otra cosa.
interior en contemplación subjetiva. Su Como consecuencia de las pláticas de Cuando oimos a alguien que dice, voz, delicada y débil como su cuerpo, Bergson, desde luego, me respondió Se me hizo ese minuto un siglo, caepero se caracterizaba por tal claridad y Mi sorpresa se redobló cuando a la mos, sin sospecharlo, en el propio centro.
precisión que ni una palabra se perdía. puerta del anfiteatro, que tres años antes en el corazón del pensamiento de BergSu dicción era lenta, uniforme, obede había estado vacio en sus tres cuartas Este ciendo perfectamente a su pensamiento partes, fuí apiñado y empujado por una habia tal perfección de forma, limpidez muchedumbre que en vano trataba actualmente, considerablemente. realde mente mucho más largo que aquellos de estilo, que las frases más cortas.
forjadas con idéntico cuidado y exactila medida real de un estado de la mente tad con la misma pureza que si hubie Curida pasado repentinamente de la os. no es el número de minutos e segundos Es como acontece en Paris. había efeedificil dar una idea de la admiración tuado con increible rapidez. Damas con que ella soporta, sino la plenitud e intensidad de las sensaciones que despierta y entusiasmo que enseñanza de Berg turbantes, pieles y penachos de plumas. Ile en nosotros. Esta es la duración real.
son desperts en todos nosotros.
gaban en multitud a escuchar sus confecomo nuestra conciencia nos pone en La notable originalidad de su pensa rencias. Sus teorías eran discutidas en los condiciones sorprenderla.
miento filosófico (todo lo que en su doc banquetes de rango, entre el foie gras y novedad, sutileza y admiración, Dostoievsky, autor de Crimen y Castigo el postre.
y de la obra admirable La Cusa de Muertos, iba unido a una facilidad de expresión Aunque un buen número de personas una de las novelas más bellas que se en una forma de originalidad imaginen lo contrario, las ideas básicas han escrito, relata en una de las enrioagradable, que daba a sus pláticas de la doctrina de Bergson no son difi sas páginas de sus memorias, que conde Aquellos de nosotros que lo oimos, comprender. Todo el que está denado a muerte por el Gobierno de los previsto de un conocimiento rudimenta Czares, en virtud de haber tomado parte que sus primeros libros en las rio de la filosofía puede con poco es en una conspiración, fue conducido a la postrimerias del último siglo. fuimos fuerzo, prepararse para comprenderlas. horca. Se le colocó en medio de una tocados de su influencia en un grado Es, sin embargo, importante la forma de fila de condenados y calculó que podría inimaginable. Deseosos de que otros par llegar a ellas. Es esencial seguir el ca vivir cuatro o cinco minutos antes de ticiparan de nuestra admiración, comen mino propio, tener un hilo de Ariadna. que llegara su turno. Durante este tiempo.
son. Es Habia. Bergson se de trina era aparecía en tan leimos