338 REPERTORIO. AMERICANO 00 Du Mirco Mwl. Madrid mismo.
que no tendrá siquiera la disculpa de armonia pacifica del derecho. Por eso No excitándome jamás. Aviso a la hula borracher de la gloria, o por el con mismo es tan grato escuchar a un sol manidad voceadora y gestera.
trario, descender a una descomposición dado victorioso expresarse en el lenguaje anárquica. ello no es sorprendente. civico, humanitario. respetuoso de los Reduciéndolo todo a los términos más La serra desencadena las fuerzas de derechos del pueblo, que empleaba Foch la violencia y la voluntad de domina al hablar de las conquistas de Napoleon.
sencillos. Este segundo ingrediente inción: es un estado naturalmente contra Es un triunfo del espíritu de la civiligrediente, después de todo cristiano es rio a la libertad que se apoya en la zación.
todavia más importante que el otro. Marta. Marta, te afanas por demasiadas cosas!
Andrenio En la inteligencia, como en la conducta, no hay que afanarse por demasiadas sas. No hay que buscarle tres pies al gato. No hay que partir un pelo en cuatro. No hay que darle a la realidad vielPalique de Eugenio Ors tas no euclidianas. es la belleza?
Una mesa fuerto. de cuatro patas, fronte a una pared encalada y con un plato Parroquia de Nuestra Señora del Ro. y toda una politica. y toda una pedu campesino encima. Qué es la verdad?
sario, en un lejano Vaugirard, arra gogía. y toda una higiene. y toda uma Un cuadro signótico de tres llaves. Qué balero rincón de Paris. Grata cena en moral están contenidas ahi.
es el bien? Un el presbiterio, sencilla en los ritos, pero apretón de manos y unas pupilas en un ambiente intelectual de muchas Casi todo nuestro trabajo actual, en upilas que miran derecho.
atmósferas. De postres, conversación No excitarse nunca, este es el ingre el saber como en la vida, consiste en sobre el mariscal Foch, con referencias diente intelectualista, soerstico, helénico, purgarlos de complicaciones superfluas, anecdóticas y psicológicas de quien, entre de la receta. La moderación. La sobrie en el santo prescindir. Para el arte, en los comensales, conoce muy de cerea al dad. Sofrosine, continuada posesión de si eliminar falsos primores. Para la ciencia.
caudillo. El mariscal Foch se encuentra en volver por los fueros del buen sentido.
esos dias enfermo de algún cuidado. Esto. No hay que estar nunca embriagado. Para la moral, en desnudarse tranquilaha devuelto su figura al teje y maneje preceptuaba Octavio de Romeu (en oposición al dicho de Baudelaire. Hay que mente, con dignidad. huyendo a la vez En realidad, son muy raros los que de los tapujos de la hipocresía y de las estar siempre embriagado. de alcohol.
cinismo pueden contar de él algo intimo y a la de virtud, de divinidad, no Este último Año nuevo, un amigo vex auténtico. Ne ya reservado. no ya No hay que nunca em escribió a otro amigo, a quien de veras estar Jacónico, sino taciturno e. por temperaSólo un pecado existe, y es la embrinmento, el mariscal. Parece que únicamente guez. La cólera no es pecado, sinbrinquere Dios te de, por este año, tres cientos y embriaguez de la cólera. La lujuria no de sueño y diez y seis horas de aun entonces se necesitan para que entre es pecado, sino la embriaguez de la lu paza, le deseaba aquél, en guisa de benen confianza, sino en confidencia, tres juria. La caída está dición printero. Foch alla aún. Cuando el si mismes perder Talima se de la serenidad. Perder el dominio de. Ahora, al tercer ingrediente. Este ya alma se conserva no es precisamente de inspiración griega, bra. Los asomos de revelación vendrán. pura, en tanto que ni de inspiración cristiana, sino moderna angenta. Todo está salvado todavía, mien Después de la moderación elegante, desEn ocasión de tercer cigarro debió tras en la noche de nuestras pasiones pués de la apuciguadora sencillez, la utiser cuando un mundano, sentado al permanezcan vigilantes las lucecitas de litaria economia. Guardar sus fuerzas frente suyo en grata mesa, chubo de pre la razón, claras y seguras como las lupara un momento dado.
guntar a Foch de pronto ask no más. cecitas de los puertos.
Mas. por qué no comenzar aplicando como diria un argentino General de Para el hombre de acción, la embria aquí ese último extremo de la receta del qué modo pudo usted ganar la guerra? guez se llama excitación. La acción, en mariscal Foch. Por qué, puesto que ya Entre la sorpresa de todos, el héroe con si misma, tiene sus alcoholes, sus vene estamos entendidos, prolongar el Palique?
sintió esta vez en explicarse.
nos. Cuidado! Se trata de estar conti El de la noche que digo en el pres Con ma receta muy simple cour nuamente desdoblado, de asistir, como biterio de la parroquia de Nuestra Señora testoy que tiene tres fórmulas: público lucido, al drama en que del Rosario, tampoco se sido excelente y el Segunda, reduciendolo todo a los térmis se es autor, protagonista quiza. No solo Aunque la cena habingo on demasia.
diálogo animado y los temas interesantes mos más sencillos, quirir y hacer funcionar una sobrecon y y el ambiente intelectual a muchas atTercera, guardando mis fuerzas para un ciencia. Con aquello.
la existencia resulta mósferas, me figuro. de mí puedo hablar momento dado.
aún compatible; con ésta, no. Se excluyen que, al dar las once, ya estábamos todos Parece nada; pero toda una estrategia, mutuamente, como el ángel y el diablo en la cama.
contorsiones del hords propio La compañera de viaje Do la obra delincuente. Santiago de Chile Eti, diplomático, coméntanos algo. Una aventuru: sentimental, diplomatica, política, de cualquer orden que sea, pero cuéntanos algo.
Rodolfo, el gringo Rodolfo, como le llamamok a casa de sus ojos azules y sus cabellos rojos, dijo. En la vida de un hombre normal como yo, suceden muy poons cosas extraordinarias o dig.
nas de contarse. Ustedes me conocen demasindo y saben que sentimentalmente, soy un hombre poco romantico; además de ser poco romantico, soy casto; no por sistema, por temperamento. Me he enamorado sólo una vez un mi vida y la mujer de quien me enamoré es hoy mi mujer. Qué ventura sentimental o de otro orden.
capaz de interesar a un auditorio como el que forman ustedes, hombres apasionados, puede contar un hombre como yo, normal, poco ro.
mántico y casto por aundidura. Eh, no te hagas ei tonto, gringo! Tú pue des osto, pero es de suponer que no todas las mujeres que has conocido tendrian tu mismo temperamento. Asi es que dejate de explicaciones y cuéntanos alguna cosa Bueno, les contaré; pero estoy seguro que se van a reir de mi cuando termine. Te prometemos que no Bien. Denme un cigarrillo; nb, uno de esos rubios. Eso es Alla va. Hace algunos años, era yo bastante más joven que ahora, atendia la secretaria de un consulado de mi patria en una ciudad de Italia. Llevaba ya tres años allí y dominaba bastante bien el idioma de ese país. De vex en cuando hacin viajes a distintas ciudades de Italia: Florencia, Nápoles, Turin, Venecia, unus veces por obligaciones, de mi puesto y otras por el simple placer de viajar.
Un din entre los dias se me ocurrió hacer un viaje a Milan, viaje que tenin por inico objeto ver trabajar a la Duse, actrix que habia