REPERTORIO AMERICANO 341 mé a la puerta de y cuando baba a SIS han recibido innumerables emociones y se llean en la noche, cansado, a una posada o a un Hotel. No es cierto que por mucho cansancio fatiga que se tenga, gusta antes de ir a re posar, conversar un rato, comentando lo que gelin visto, lo que se ha recordado, lo que se hn sentido? Eso constituye uno de los más paros placeres del viajar y ese era el alegre de seo que yo llevaba en mi corazón cuando linde su cuarto. Avanti grito.
Por el sonido de la voz adiviné que ya se acostado. Cuando están en cama, el tono de la voz de las personas se diferencia del que tienen cuando están en pie. Abri la puer: tin y una fuerte corriente de nire hixo ogoilar la bombilla eléctrica y sacudió los flecos de In colcha rosada de su cama. La ventann 16taba abierta de par en par. Por qué tiene abierta la ventana? inte ogue Trogie. Por preenución me contestó. Por precaución de que. pregunté, extrañado Mire, no se enfade. Pero comprenda usted que yo no puedo confiar en un hombre a quien conozco hace sólo unas pocas horns. Lo he dejado entrar a mi cuarto; pero, por preención, he dejado abierta la ventana. En caso de que No In dejé terminar. Me irritaron dolorosa mente sus palabras y pensé en ese momento que esa mujer no era lo que aparentahn, es decir, ama muchacha honesta, sino una trotamundos que se estaba burlando de mi, de mi, que no intentabu ni siquiera preguntarle nada que pudiera molestarla. Frinmente, casi con desprecio, le dije. Señorita, recuerde que usted me invitó a venir a su cuarto. Si ahora piensa que mi visita es inconveniente o inoportuna, con reti de la cama. Yo me había parado y la miraba rarme ne arregla todo. Buenas noches.
fijamente.
Pero no me dejó marchar. Con acento sua Señor tartamudeo yo soy una muchacha ve y persisivo, dijome: honrada, centiende usted. honrada. No, no se van a usted. Jesus. Qué hombre Me incliné de nuevo hacia ella y le hable.
más susceptible!
no sé qué cosas, con In boer cerca de en ros Procedo honradamente, siempre, y no me tro, aspirando el olor y sintiendo la tibiexa ngrada que se interpreten mal ni mis palabras de su cuerpo. Después.
ni mis hechos y mucho menos que se rían de No sé. El hombre, por instinto o por cosmi.
tumbre, conoce cuando una mujer es honvada. Pero no se enoje. Cierre la puerta. Ven. es decir, gn, siéntese ahi, cerca de la cama. Perdónemetan afligida, tan aslistada, que me dio intacta no lo es. Le vi Es usted un hombre tan raro, tan distinto de pena.
Pretendió los demás, que no sé qué pensar. Sus modales, ndio jugar, sin saber hasta dónde llega ria el juego y cuando lo adivino le dio miedo.
palabras, sus finezas.
Me separé de su lecho fufcerrar In ven ¡Ay, amigos Aquella mujer entró por tana, atravesé a largos pasos la libitación mal camino. Habló de mi con calor, con simabel in puerta; desde alli, dándome volt, patin, ensi con entusiasmo, como si yo no es le dije sonriendo: tuviera presente, diciendo que ella no llamaba mi atención, que seguramente ella es muy Yn es muy tarde. Perdone isted que la deje. Buenns noches poca cosa para mi, que era fea, sin gracin, y Me estaba mirando con sus grandes ojos que tal vez con otra mujer más bonita que Azules, In boca abierta, anhelante. Pase mi ella yo habría procedido de otro modo. Yo in cuarto y cerré in puerta despacio, or que decía: miraba, la miraba nada más, sin sentir nada, ningún atractivo, ningún desco, por mirar Oiga. oiga.
nada mas, así como miraba, de vez en cundo Pero yo ya estaba lejos.
y por ventana ann abierta, el estrellado cielo. Desperté al otro din cerca de las dier. Me Pero todo tiene su limite, hasta la castidad, levanté, me vesti y bajé, extrañado de que y de pronto nos encontramos mirandonos y en la habitación del Indo no se sintiern ninsonriéndonos, culindos, mirandonos con esa pun ruido. Hable con el administrador y este mirada única que lo dice todo, esa mirada me dijo: profunda y húmeda, y sonriéndonos con aque La señorita del 21 pidió y desayuno temlla sonrisa que agranda despaciosamente in prano, pagó su cuenta y se marchó.
book y que subsiste nun después que los ojos Esta es toda In historia, han dejado de mirarse Un momento de silencio.
Me incliné rápidamente y la besé. Se ende no la viste más? preguntaron dos o rezó en la cama y sacando un brazo desnuda tres voces a un tiempo.
lo eruxo sobre su cuerpo, sujetando la ropa Nunen más.
Se sintieron varios golpes de po sobre Manuel Rojas In mosa, ración Véase In entre anterior.
chen, el mejor.
cada tumbren Echrabajo literario de Gros Capítulo consagrado a estudiar la misión ninguna proporcione entre los del periodismo, a la considedel Padre Goicoechea maestro, el dia que no tiene de los problemas funque hacer, cierra el obrador damentales del Reino. EL en la evolución de Centro América despide a sus cficiales: aque trabajo más conocido de Goicoeharán éstos ese dia, ganando probablemente en los demás um jornal que es la aludida Memoria sobre la Mendicidad. Extractos de ella mus de los bosques. Dice la seria que aleja del pueblo toda no les permite ningún ahorro. Gazeta: idea de aseo y comodidad, Si comunidad mantuconocemos por lo In Gazeta, y no aquellos brazos útiles tendrán viese a sus pobres, sin ser solo es necesario salvarlos del Un pais que funda su riolvido sino que ellos nos guiaéstos onerosos a ninguna, se pocos destinos en que ocuparser que se acosqueza en el cultivo y benefi de aqui nocio y que adquie seúnte. Mas para esto, ein ne evitaria la mendicidad tranrá para apreciar mejor las cio de un solo fruto, cuya naideas de Goicoechea turaleza es tal que requiere ran los resabios y vicios que cesario que sus causas fueran La Gazeta, al comentar la gastos crecidos, anticipaciones son consiguientes. Esta es una de tal modo locales, que tu Memoria, señala como el mal de dinero, obras y operarios pintura de Guatemala, en don viesen su origen único en de fondo, la pobreza y mala asalariados, etc. es preciso que de la mendicidad es hija legi aquella comunidad cuyo organización agricola. Hace tenga grandes propietarios. Se tima de las expresadas causas cargo debiera estar el remedio.
ver los inconvenientes del cul Jesdeñan los demás frutos el anil.
fijas Por el contrario, sucede y constantes fuera de Sus tivo unico entonces, las por exigir operaciones más son accidentales. causas están en las ciudades, son la profecia de lo menos costosas nuestras puertas llegan fre y sus efectos se sienten en los darían ocupación a la que aún hoy mismo nos aconcuentemente hombres robustos, campos. Ya se ha dicho que del transcurso de cien años de vida es preciso que de ninguno de los cuales deja de una de ellas y tal vez la priindependiente, no los trabajos agrarios queden hemos salido sobrantes muchos brazos útiles. limosna: piden saber algún oficio: no piden mera, son los grandes propied. otro cultivo único, el café.
trabajo en tarios, los cuales por lo comun Si hay pocos que paguen tridejando en rudimentarias proejercitarse, y con qué mante no viven en sus haciendas. buto a las obras de la industria. ner a una familia espuesta cuántas familing de arrendaporciones los otros que con y los renglones principales tanto o mayor éxito permiti a perecer o a perderse. Cuál tarios ha dejado perecer un que de ella se consume son serà el rico empedernido que gran Beñor? sin contarse rin la feracidad de un suelo traidos de afuera: y si por niegue su socorro a estos in los dolorosos efectes del desper sus condiciones natura otra parte, las necesidades co felices aún en la duda de sitismo feudal en cuanto a la les añade la circunstancia de munes del alimento, el vestido, imploran o no de vicio? Porla fertilización natural contiopresión y vejaciones de todo el menaje, eto, son limitadas que es evidente que no todos género. el principal dano está nun por los residuos de las y escasas, bien sea por el In los que aman el trabajo pue siempre en pie, que es el de sustancias volcánicas y el hu bito o bien por la misma mi den dedicarse a él: no hay trabajar centenares de homqne la masa del pueblo.
que