Carmen LyraOmar Dengo

142 REPERTORIO AMERICANO recibia con estaba mu fué el centro de una ale capa de bautizo.
25 cen que 5 10 las últimas tentativas para renovar esas veladas, y lo más que se Una casa para la viuda e hijos en la sala, que era sa glorin, dijo con vox cariciante: conseguia era medio despertar a de Omar Dengo. Mi salita linda!
mi madre a la conciencia de lo Durante todo este tiempo algo que la rodeaba cual si un eco famiLa Comisión encargada de recoger fondos en Heredia parecia querer, pero como la que line hiciers oir su vox; pero dón avisa que faltan unos 000 00 para completar la suma siempre e adivinaba lo que ella que de estaba eso, ella no hubiern po con que se ha comprado ya, una casa a la viuda e hijos ris estaba muerta, le trajeron mudido decirlo, con su cabeza llenu de Omar Dengo.
chas cosas que ella del rumor del pasado, cual la de Ahora nos toca a los amigos del ilustre finado en un meneo de cabeza. No se daban.
San José, otras ciudades, reunir los 63. 000 00 que todavia cuenta de que fué el último presente para mi faltan. Se abre, pues, la suscrición y el Sr. García Monge riéndose, pero la siguieron con hermana. Lo regocijado de sus queda encargado de recoger los fondos que lleguen. sus tenores a a través de la casa. voces atrajo a los demás de la Rep. Am. 25 cuando volvió a la cama, comcasa a la habitación de mi madre José Guerrero prendieron que estaba muy decai25 donde por más de una hora ésta Octavio Jiménez 25 da. En cierto momento preguntó: una alegre fertulia, Alejandro Alvarado Quirós 25 Carmen Lyra. Eres tủ, David. luego creyó y tan clara estaba su cabeza, que Salas Pérez 25 oir a su padre que sacudía la nieve losdemás, prudentes al principio, se Angela de Guerra 25 de sus botas abandonaron Inego a la broma, y Tomás Soley Güell Volvible el deseo de tener aquecualquiera pulla que dijeran, mi Jorge Ortiz 25 llo que no podín recordar, y enmadre la devolvia como de antiJosé Prada Victor Cordero tonces comprendieron que lo que guo contra ellos mismos, hasta José Marla Zeledón Brenes queria era la que en defensa propia hubieron de Carlos González Cuando se la trajeron la desdoblo unirse tres contra una, y los tres Manuel Obando.
con manos temblorosas de orgullo.
10 on apuros. Cuanta no debió ser Eduardo Carrillo y cuando se convenció de que esla alegria de mi hermana! Una vez Ramon Zelaya.
taba sin mancilla, sus viejos bramis podia gritar. Has visto una XX zos la estrecharon con adoración, mujer como ésta? Me dicen Rafael Eduarte Dr. Herdocia 25 y en sa semblante habia el inefala fisonomin de mi hermana reble misterioso brillo de in materFrancisco Montagne flejaba tal felicidad, que hasta Leovigildo Arias nidad. De e pronto pregunto: mi mindre le llamó la atención, y Alberto Moreno Cañas Ha muerto algún niño? Hny después de levantarse para salir.
Dldima Sánchez.
alguno de los mios muerto. Pero Boza Cano 25 todos volvieron a quedarse fasciEscuela Mercantil Manuel Aragón.
los que la rodeaban no se atre25 nados por In vivacidad de ambas.
Sr. 50 vian a hablar, y entonces ella recuando por fin salieron las úlMario Fernández pitió uno a uno, a media vox los timas palabras que oyeron fueron Tomas Arias hijo nombres de todos nosotros, en el éstas: Oficina de Propaganda Catalana orden de su nacimiento. Sólo un. Se han ido, madre, ya lo ven, Alberto Cortés nombre se culo, el que debió venir pero yo estoy aquí y nunca te de tercero entre sus diez hijos, el jare.
lecho de mi madre a otra habita preguntar por ella. Los demás, nombre de la que estaba yacente No, tú nunca me dejarás, do ción. Descubriose que sufría de un estupefuctos, no se atrevieron a en la pieza vecina, pero al últimal interno. Nadie lo habia sossobra que lo sé.
nombrarla yn. Pero estoy seguro mo, tras una pausa, dijo su nomPor algún tiempo sus voces pupechado, ni siquiera ella misma. que no habia para qué tales te bre y lo repitió una y otra vez dieron ser distinguidas desde abajo.
Ya habia remedio. En ese es Huy misterios en la vida deteniéndose en el como si fuera tado de inconciencia puso mejor en la muerte, pero éste no es Is músics mas exquisita, y este pero de que hablaban, no hubiera podido decirse. Luego se hizo el vida sin darse cuenta de que de taba entre ellos. Un niño puede fue su canto de despedida. sin Silencio. Si yo hubiera estado en ja ba u su madre. De haber sabido entender lo que pasó Dios dijo embargo, no era más que un yo, al recibir la noticia de su casa, habria eutrado a la habitaque mi hermana debiu partir pri nombre harto común.
muerte, que había evitado ese do mero, pero El pnso su mano en Entonces comprendieron que es ción varias veces más, abriendo lor, seguramente habría podido este momento sobre los ojos de taba muriéndose. Les dijo que dola puerta con grandes precauciones afrontar con mis animo el re madre, y todo lo transformo. blaran la capa de bautizo y con y quedándome por un rato a con greso, al recuerdo de aquellas Dijeronla que yo estaba en en mirada easi severa espero que templarlas. Una y mil veces lo había hecho. Pero esa noche, ime palabras: mino, y ella respondió con un la guardarn, y luego estuvo ha habria retirado con in mente sonrisa confiada: Hando por algún tiempo de la Art thou afraid This power sul fail When came thy evil Wash Vendrá tan pronto como los tranquila, o hubiera podido notar larga vida de felicidad que le lo traigan.
habia tocado en suerte, de aquel el cambio que se efectuaba durante ¡Ah! cualquiera se lo hubiera fi Esta es el sueño?
esta es mi recompensa, esto es a quien se la debin. Dijoles gurado yo mismo lo lubiera crei lo que he cosechado con mis libros. cada uno de ellos, y por último Digámoslo en tan pocas pala do, pero ahora se a que atenerme, Todo lo que pude hacer por ella se volvió del lado donde la más bras como sea posible. Mi herma Al llegar a Londres supe cómo lo hice desde que era un niño; umada acostumbraba acostarse; y na se levantó con jaquerna la había muerto mi hermana, pero miro hacia el pasado y no puedo rexo por más de una hora. Solo männa siguiente. Toda su vida siempre me acobardaba. Dios haver ni la menor cosa que no se le entendieron un que otra palahabía estado martirizada por ella, bia Liecho tanto, y sin embargo, cumpliora.
bra, y las últimas fueron Dios y pero ésta, al igual que otras mu no podin esperar confiado en el Se las enterró juntas al cumplir Amor. Creo que Dios se sonrein chas, parecia dolorosamente aguda. para lo poco que faltaba por hu mi madre setenta y seis años, aun cuando In Hevó a su lado, como pesar de todo, se levanto, en cer. Al hombres de poca fe! que había tres dins de diferencia le había sonreido durante esos se cendió fuego en la habitación de Estas son las palabras que ahora en su muerte. El último dia mi tenta y seis anos.
mi madre, le subió su desayuno, me parece oir de labios de madre se empeño en levantarse y La vímuerta, y su cara ern de y luego tuvo que volverse a la madre, mientrns me mirn. con pena. recorrer la casa. Los brazos que na serena hermosura. Pero fui cama. Ya no pudo escribirme su Dios hizo toto tan sencillamente, con tanta frecuencia la habían a la otra pieza donde había en carta cotidiana para anunciarme que he dejado de maravillarme sostenido en estas undanzas es trado primero para caer de rodicomo estaba mi madre, y tal vex desde entonces ees, visto que era tan taban ahoru rigidos y helados, pero llas al lado de mi hermana. La lo ultimo que hizo fue pedirle claro que provenin de El. Mitimida quedaban otros apenas menos ca perfecta plenitud de una vida mi padre que me escribiera sin madre vio llevarse sin conoci riñosos, y así fue de habitación como la de mi madre no había dar a entender que estaba enfer iniento a la que no debia aban en habitación, como quien dice sido para ella. Ella no la quiso ina por lo que mi me afligirin. donarla jamás, y no se desespero adiós a las cosas, y en la mia dijo: con las codiciones que exigiu.
Se llamó el médico, pero elin pers Ella, que acostumbraba estrujurse Las hermosas filas y filas de li Nunca te dejare, madre. De dio rápidamente el conocimiento Ins manos si su hija se ausentaba bros, y él me dijo un dia que todos sobra sé que no me dejarás nunca.
En ese estado se la llevaron del por un momento, jamás volvió a El tiero contento de amar mucho y cada uno de sus libros era mio.
more trenes lo dios