250 REPERTORIO AMERICANO Pocaterra, el panfletario pio Martin Luis Guzmán, colmada de acen ganos insuficientes. Pero, en pie, la lección dramiento espiritual. Sencillez de prestancia námico, cinemático. Dominan los primeros de lo vivido. en pie este libro febril y planos, y el gesto puro, sin otros coadyuy maneras, libres de ese aire «pintoresco emocionante, rico en semblanzas del mejor vantes, define los caracteres puestos en (banal) que tantas veces oculta entre otros diseño, en juego. La grandeza bárbara de Pancho Villa hijos de América la firmes cualidades que, episodios del maes fugaces del paisaje, en más auténtico dramatismo, en se expresa con todo su vigor en el mosin duda, poseen. Al menos, sus mejores in trasposiciones artísticas del miedo, la an mento aquel de sentirse desarmado. en dividuos. El águila y la serpiente significa gustia, la esperanza, la piedad el horror. el otro, de ansiedad, ante el telégrafo que una introscopia detallada de la vida revo Mucho fluido vital zigzagueando sobre ne trasmite una contraorden. Melchor Fernánlucionaria de Méjico. Nos entera del por grura con luz finisima de ironía. Filmado dez Almagro.
que de los sucesos y de la raiz de su por es vocablo que lancé antes, buscando una qué. Con la menor cantidad posible de equivalencia fácil de comprobar. un film Nota: 3. 50 el ejemplar, vendefantasia novelesca, en escenas de variada equivale, efectivamente, este libro, más que dimos El águila y la serpiente. Dis.
ponemos de algunos ejemplares.
tessitura, dominando la dramática, nos pone el autor en contacto con el nervosismo del periodo revolucionario que comprende desde el pronunciamiento del general LOS ESCRITORES DE HIERRO Victoriano Huerta hasta el eclipse de Pancho Villa. Hay escenas crueles descritas sin veladuras de ningún género. Pero la maestria literaria de Guzmán se manifiesta principalmente en las sensibilizaciones impresionistas Memorias de un Venezolano de la Decadencia del color el calor revolucionario. El color en obras de esta clase se produce por una presencia de imponderables, de menudos Laguado Jayme con una muy grande satisfacción si estas paelementos, que sin corporeidad suficiente ginas le sirven para acrisolar atin más el oro puro de sus convicpara concretarse en acción o personaje, baciones y para retemplar el acero de sus energias que mucho admiro.
nan el espacio de la narración y se resuelJosé Rafael Pocaterra ven en emocional claroscuro. Lo emocional prevalece en la obra. Después van graduándose los demás valores literarios: desde la Este es un brevisimo boceto sobre la per. Yo no escribo ni para los energümenos sabiduría y gracias del estilo templado, visonalidad viril del gran venezolano José proclama en un libro de acusaciones casvaz hasta los modernos imaginismos conRafael Pocaterra, para acusarle recibo, pú tigos y reivindicaciones ni para los cinicos.
feridos a la frase en la parva medida, blicamente, del primer y segundo tomos de Escribo para la Historia, Escribo para la naturalmente, que consiente una obra de tipo sus extraordinarias Memorias de un Vene Justicia, Escribo para la Libertad.
objetivo y realista. Para nosotros, extranzolano de la Decadencia, reservándome la Agudo y sagaz observador de anchas y jeros aunque, como españoles, de un exbuena esperanza de perfilar más adelante, claras pupilas y conocedor profundo del tranjerismo muy restricto con relación a en una pequeña biografia. la vida revolu pueblo venezolano, de sus hombres dirigenMéjico. el libro de Martin Luis Guzmán cionaria e intelectual del estoico desterrado tes, de su historia, de sus males y de sus alumbra, como un reflector voltaico, la vida y del compañero ilustre de ilusiones liber necesidades urgentes, sus libros están consecreta, honda, de Méjico. Nos describe un tarias.
sagrados a la exposición psicológica de la periodo de crisis social, que creíamos ya La vida de Pocaterra es una vida que se quebrantada nacionalidad venezolana.
favorablemente liquidado para siempre. Ansale, por entero, del marco de la normalidad tonio Espina.
burguesa para entrar en el molde leyendario y novelesco Cualquier palabra de exaltación que le Cuando apenas era un niño de doce años El águila y la serpiente libro de que aplique al brillante fundador de Caracteres habia oído hablar con gran elogio me prose colocó en una zapatería, ganando un de Maracaibo, será una palabra de exactimisero jornal. Salió de ésta su primera duce admiración al leerlo. Yo no creí que, tud y de respeto hacia el escritor indepencolocación por haberle roto la nariz a un fuera de Valle Inclán, tuviéramos hoy en diente y hacia el patricio que con su civismozalbete, mucho más grande y fuerte que nuestra lengua quien supiera contar escenas mo altivo y romántico sirve de pauta a las él. Pasó a una imprenta como aprendiz, y de crueldad con el brío con que Martin generaciones soñolientas y desorientadas de del adolescente aprendiz de imprenta, en Luis Guzmán lo hace. Sus relatos breves Venezuela que, en medio de sus orgias de pocos anos, no más de veinte, entre la de ese tipo, son obras maestras. El nudo terror y maldad, buscan una brecha de libecárcel politica, los campamentos y el desde ahorcar, por ejemplo, es una obra maesración. Bien sabe Pocaterra que no le adulo, tierro, se ha transformado en uno de los tra. Pero fuera de eso, Guzmán traza los porque desconozco el arte del servilismo, más sobresalientes escritores políticos y en retratos de sus personajes históricos con como se odiar y sé despreciar con pleno uno de los más gallardos literatos sur ameuna penetración psicológica, una comprencorazón hacia todos los huracanes. Hablo de ricanos, y en una de las primeras figuras Pocaterra en alta voz y con deliberado prosión, un juicio, que son dotes de gran his revolucionarias de Venezuela, por su talento toriador. Parece imposible que se pueda posito para que mi verbo caiga en los odos varonil, luminoso y avizor y por recia y de piedra de muchos venezolanos byectos conservar serena, justa y fría la mirada en amplia cultura medio de tanta emoción, lucha y pasiones que por el extranjero andan sembrando la En los presentes momentos no tiene rival desenfrenadas. Pancho Villa y los demás intriga y discordia ya en nombre de inconscomo panfletario entre los escritores de la cientes ambiciones personales o de extravaguerrilleros son criaturas vivas. Asi serian América Latina, porque en él se suman: nuestros cabecillas del siglo xix, de la frangantes doctrinas suicidas para nuestros meinteligencia, saber, valor personal, frio y dios tropicales tan sedientos del agua limcesada y de la carlistada; pero no tuvieron temerario, agresividad impetuosa y apostola fortuna de encontrar un objetivo cinepia de la democracia bien entendida y bien lica integridad de ética pública.
vivida. No pertenezco a ningún grupo de matográfico como el que Guzmán aplicó a Es de la raza heroica de los Montalvos los suyos inmortalizándolos. Ramón Marla imbéciles y necios, no sigo ningún rebaño y de los Gonzalez Prada, pero con temeriTenreiro de farsantes. me tiene sin cuidado la acdad combativa.
titud menguada que algunos lideres pancisNo es Pocaterra el intelectual de gabinete, tas, jóvenes o viejos, observan coninigo, por Nuevo cronista de Indias es Martin Luis sino el escritor de combate y de barricadas el único motivo de ser yo andino, del pueGuzmán. Las grandes dimensiones y la ca que lucha sin miedo por llevar a la realidad blo de Castro y Gómez, de la región tachilidad misma del espectéculo en que le tocó sus ideologias. Ni tampoco es el prosista rense. Me debo a la revolución y me debo participar rudo drama impresionante, con ardiente de redacciones más o menos turi a la justicia, con todas sus consecuencias y curiosas interpalaciones de ballet le re ferarias, sino el periodista vertical y entero no rehuso responsabilidades de ninguna levó de la obligación de inventar cosa algu que por amor a la verdad y a la justicia clase.
na. El tránsito de lo vivo a lo pintado a presenta el pecho desnudo a las balas de Cuando laboro por la libertad y por la lo filmado, podriamos decir mejor sólo sus enemigos. Ante los veinte años funda dignidad de la esclavizada Venezuela jamás presentaba un riesgo: el de retener intacta su periódico Cain en Puerto Cabello y se consulto opiniones de mis compatriotas enla carga pasional. La pasión del beligeran lanza al ataque fiero contra la satrapia de greidos o farsantes, consulto a mi conciente torceria las mejores escenas de El águi Cipriano Castro, y el Mono de Capacho lo cia y los venezolanos justos, que por cierto la y la serpiente, si su autor no se acogiese encarcela son muy pocos al patrocinio de ese numen sedativo y mag. Mi batalla no es dice en las páginas nifico que es la distancia. no sólo la de su nuevo libro contra los Gómez de distancia que dan de consuno tiempo y lu Venezuela, sino contra los Gomez de la Los escritores contemporaneoe de la Amégar, sino la que marca el desencanto con América indo española.
rica Latina se dividen en dos agrupaciones, dedo trémulo. Martin Luis Guzmán vuelve Su grande y hermoso odio lo extiende distintas entre sí, por su ideología y por su de sus memorias mejicanas como un minis contra todos los sátrapas de la América fin: la de las panas y los lacayos; y la agrutro de la Decepción. Ideales no logrados, bolivariana, porque no entiende de fronteras pación de los apóstoles y soñadores. este medios fallidos, hombres estropeados, or egoistas.
último núcleo reducido de hombres libres e Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica