44 REPERTORIO AMERICANO burle de tejada por La fuga contagiaNada ni nadie pudo tranquili pendencia, el sobrante de es vender el tenducho, él redar tificarlo. Menos soñadora que tintos: han nacido en países tampas patrióticas.
güía con agrio humor: él, calculaba el porvenir de su opuestos, han recibido diversa Mil quinientos pesos recibió Seguro estoy que, de meter hija. en los momentos de educación, han rezado a distinel tio Petacóvsky por sus lá me a fabricar mortajas, la gen amargura, los insultos estallaban tos dioses, tienen desiguales minas. Con ese dinero en el te dejaría de morirse. Es lo en su boca: recuerdos. En resumen: ni él bolsillo sintióse optimista. En mismo. Cambalachero. Cambala ha dejado de ser cristiano, ni seguida liquido clientela Tales discusiones reprodu chero. Dios mío, quien se ca tú judía.
ya padecia de reumatismo y cianse en el mismo tono, casi sará con la hija de un camba Otra vez agregaba: se puso a la tarea de buscar todos los días. Desde la muer lachero. Es imposible. No se van a un negocio en el centro. Lo de hijita, Jane Guitel esentender. En la primera peleamismo le daba una cigarrería ba enferma, y frecuentes crisis y son inevitables las primeras que un almacén. El quid era Mucho antes de lo que imade nervios la debilitaban. El peleas te juro que tú le gritaun comercio con puerta a la tío Petacóvsky tanto de ello, ginaba, supo Jane Guitel quién rás cabeza de goi, y él, a macalle. Que los clientes lo fuelo deseaba casarse con su hija.
trataba siempre de calmarla nera de insulto, te llamará juran a buscar a él. No al revés, con alguna ocurrencia. si Primero un chisme de familia dia. puede que hasta se como hasta entonces. Ya le doña Guillermina, como él la la enteró de que Elisa era fesde cómo tu padre dice asqueaba hacer el marchante.
Carlos Bermúdez.
llamaba por broma en esas noivex.
De nuevo burláronse los paocasiones, se resistia, él invoNo quiso creerlo. Luego, alguien Mas, tan inútiles fueron las rientes de sus proyectos. Mien caba los aforismos de Schólom que los vió juntos, le confirmó.
sinceras razones del tio Petatras unos, aludiendo a el chisme. vinieron las priafiAléijem, su escritor predilecto: covsky como los desmayos freción por el mate, le aconseja Reir es saludable; los médicos meras sospechas. Por último, cuentes de Jane Guitel. La muban una plantación de yerba aconsejan reirse. o Cuando las misma muchacha, instada por chacha, ganada por el amor, en Misiones, otros le sugerian tengas la olla vacía, llénala de la sinceridad del padre, confesó huyó a los pocos meses con su una fábrica de mates.
sus relaciones con el ex socio.
risa novio a Rosario Mas el tío Petacóvsky, conPero lo cierto es que a pesar aquí fue la ruina de Jerusade Elisa acabó por tra el parecer de todos en gelem. Jane Guitel puso el grito de su Schólom Aleijem, el tío romper los nervios de la madre.
neral, y de Jane Guitel en Petacovsky se habia en el cielo. Cómo una hija suDos semanas se pasó ésta lloparticular, compró una pequena do de la tristeza de su mujer. ya iba a casarse con un goi?
rando, casi sin probar alimento.
libreria cerca del Mercado de Podia olvidar, acaso, la ingraYa no era el alegre tío Petaca Abasto.
de la fábrica de cuadros. Nada ta, que un bisabuelo de ella zarla. Al fin, por consejo médile quedaba del entusiasmo y (Dios lo tenga en gloria) fue del humor de aquella época. gran rabino en Kischinev, y co, tuvieron que internarla en Con el nuevo negocio la viel San Roque, donde al poco da del tío Petacóvsky se transSi aún reia, era para esconder que todos sus parientes fueron tiempo moria, acrecentando el sus santos puros judios. Dónde lágrimas.
formó por completo. Ya no reescándalo que la escapada proPorque como él mismo decía: había dejado la vergüenza esa corria la ciudad. Vestido a gusto, dujo en la colectividad. Cuando los negocios van mal, muchacha. con amplio guardapoldo de brin, Con la muerte de Jane Guitel se puede ser humorista, pero en su desesperación, acuy tocado con oscuro solideo de la muchacha volvió al hogar.
seda, pasábase las nunca profeta. él ya no tra saba de todo, por milésima vez, tras de ella vino Bermúdez, taba de serlo en nada.
a su marido y a sus negocios.
Como si los dos fueran los cauleyendo y Había tus ensayado, al reabrirse grandes mostrador, a la espera de cliensantes directos de esa muerte, tes. Elisa, su hija, que ya estaba las escuelas, la compra y venamigos del mate (Dios quiera lloraron lágrimas amargas sobre ta de libros viejos con algún envenenarlos. Ahi hecha una simpática criollita de tumba de la pobre mujer.
consecuencias de tus negocios llegar las.
dieciocho años, le cebaba el mismo Bermúdez, antes tan incon ellos. Un rayo los fulmivacaciones ya conocido como amargo por intermedio de Daflexible, renunciaba ahora a Elisa cambalachero nadie entraba ne. Todo por culpa tuya.
niel; mientras arreglaba la casa y consentia en que ella se quesino para vender libros usados. vencida por los nervios, se antes Jane Guitel volviera del dara a cuidar del hermanito.
En tanto, los días pasaban echaba a llorar como en lom Pero el tio Petacóvsky tuvo la monótonos, aburridos, iguales. Kipur el dia del perdón.
honradez de perdonarlos Después del almuerzo, el tio El hombre, siempre con su todo esto, el tio Petatorizar el casamiento a condiPetacóvsky hacía su siesta. amargo y los libros, y la mu covsky, que ción de que vivieran felices y las cuatro, ya estaba otra vez jer con su eterna loa del tiempo no había dejado de ser buen en su puesto y Elisa volvia a antiguo y su constante protesta judio, la calmaba, asegurándole para siempre en Rosario cebarle mate hasta la noche.
Después de hacerles notar a contra el actual.
que, Dios mediante, el casaAhora bien: de rendir la venque precio habian conseguido. Dios mío se quejaba al miento no llegaría a realizarse.
ta diaria un poco más que el el tío Petacovsky, contra marido lo que has llegado a Aunque por otras razones, el dinero indispensable para el el parecer de todos, resolvió ser en América: un cambala también era contrario al matripan y la yerba, es probable seguir en su cambalache solo monio de Elisa con Bermúdez.
chero! lloraba que todos vivieran tranquilos.
con su Daniel.
Sostenia al respecto la antigua En vano el tio Petacovsky Yo mismo dijo me encarPero como después de un año intentaba defender la condición fórmula de los nacionalistas. No garé de hacerlo hombre. Pierde ilusiones, se vió que esto intelectual de oficio y fingir podemos dejar de ser judios, dan cuidado, no nos moriremos no acaecia, las disputas se regrandes esperanzas para la mientras los otros no dejen de de hambre.
novaron. temporada próxima.
cristianos como en ver no hubo modo de disua De no querer tú increpá. Ya verás le decía cuando dad ni él se creía un hombre dirlo.
bale Jane Guitel reformar el empiecen las clases, cómo van libre ni tenia por tal a Bermúmundo y hacer lo que tantos a salir todos estos grandes sa dez, hacia lo posible por inculisraelitas hacen en Buenos Ai bios y poetas. Entonces hasta car a Elisa su filosofia Abandonado durante tantos res, estariamos bien es probable que encuentre un. Mira le decia una tarde, meses, el negocio se había conA lo que el hombre contes comprador de todo el negocio, mientras la muchacha le cebaba vertido del todo en un boliche taba: y me quede solo con los textos mate. Si te prohibo el casa de viejo, sin otra mercaderia Es que cuando a uno no le de medicina para que más tarde miento con Carlos, no es por que esos libros y folletos es.
va, todo es inútil.
Daniel estudie de doctor. capricho. Tú sabes cuánto lo panoles que se ven en todos si Jane Guitel lo instaba a La mujer no dejaba de mor aprecio. Pero ustedes son dis los cambalaches. Pero como hase las mañanas mateando junto al Ahi tienes a resultado. Pero mercado aua pesar del mate la unión, el ser Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica