46 REPERTORIO AMERICANO creación el talento de Aguirre No asi la afirmación de un prin humanidad, ya sea la del autor Morales fué iluminado por um cipio general en nombre del cual que las gentes llaman su perrelámpago de genio: la bebida pudiera condenarse toda crea sonalidad o ya la de las creaque al chincha arrebató las ideas ción artística que no se confor ciones mismas. El artista de de la cabeza, le infundió el don mase con el rigor del principio. verdad, cuando la divina locura de videncia, la visión profética, El cual, en las palabras de de la inspiración le arrebata, la voz trágica de los profetas Aguirre Morales, es como sigue: crea de acuerdo con principios de razas o naciones que ya no. volvi los ojos a lo mio, a que pueden no ser los suyos, saben oir ni obedecer la origi aquello en que, seguramente, pero que luego se ve compelinaria voz de su destino. Chin mi alma habria de palpitar con do a aceptar porque sabe que chacamac es el grito de una más fuerte emocionalidad y en aquel arrebato le hizo superior raza próxima a perecer, reso lo que habría de verterse mi a si mismo. Por eso es que el nando por las playas y las sie. espiritu con la cruda arrogancia artista sale más grande y exalrras que sintieron el paso de y la gracia de mi raza. com tado del seno de su propia obra.
sus triunfos en el zenit de su prendi que esa o cualquiera otra «No se escribe el libro que se grandeza. Asi fué el grito de ruta americanista que diera se desea. Hay una especie de faPan han muerto que oyera aquel llo propio a nuestro arte, era talidad en el primer impulso marinero que se llamó Tamuz, el único camino de los que sen que os dicta la idea. Después y que lleno de asombro las en tiamos de verdad el soplo di es una idea inconsciente, una cantadas riberas del Mediterrá vino de la belleza.
voluntad superior, algo como neo.
Deciaración fuerte y sincera, una necesidad de escribir que Las bellezas de la obra son apoyada en una bella obra rea os ordenan la obra y os traen grandes y numerosas. La trágica lizada de conformidad con el la pluma a la manos escribió primera grande escena. el cas principio entenciado; por tanto, Goncourt en sil Diario. Pero tigo de los jefes rebeldes chin más dificil de discutir. Pero en este es el consenso universal chas me hizo cerrar los ojos, nombre del Arte habrá que dis de todos los hombres que han tal la realidad de vida en ella. cutirlo.
sabido obedecer los llamamienRespiré la atmósfera emanada El sello propio de una obra tos de la inspiración o las imde la decadencia de Kosko; de arte no transita por rutas posiciones de su genio. El misasisti a combates, a emboscadas, americanistas o internacionales: mo Aguirre Morales escribe: a duelos, persecuciones, a in viene del hondo del ser huma. La época en que lo escribi (su trigas políticas y amorosas, a n10, del corazón o del genio del libro. ha dejado en mi espiritu sacrificios religiosos, a procesio artista. Las civilizaciones en que la impresión de una pesadilla nes llenas de pompa imperial: los artistas han aparecido, o luminosa. La expresión es copor espacio de algunos días he puedan aparecer, constituyen el rrecta: no siempre está a nuesvivido en intima comunión con conjunto de circunstancias den tro alcance el desterrar de la las gentes del antiguo Kosko. tro de las cuales el genio se mente una pesadilla. si el Tan completa, tan cordial, tan desenvuelve: la grandeza de su primer deber del artista como intuitiva ha sido la erudición obra depende de la humanidad del hombre es ser sincero conincásica de Aguirre Morales que que la anime, de la expansión sigo mismo y de respetar la se la siente en todas partes y de conciencia que implique, de inspiración que le viene de lo no se la ve ostentosamente en la visión de belleza, o de ver alto, oir la voz de su genio, si ninguna.
dad que haya incorporado en no quiere renunciar del todo a Las clausulas, amenudo tan ella. En todas las creaciones del su destino, entonces la ruta armónicas; las voluntarias repe arte sólo una cosa importa: la americanista es tan estrecha y ticiones encaminadas a evocar las caracteristicas de un personaje o de un paisaje; las muchas embriagueces de inspiraAmanecer ción que el autor ha experimentado mientras escribia y que para él constituyeron el mayor Crucifico mi angustia deleite de su trabajo, su recom en la indiferencia pensa espiritual que le hará de TODOS mirar todo elogio a su libro con una condescendiente simpatia; Su todo esto, digo, hace de la obra TRAICION uno de los grandes poemas de América y del autor, uno de los me hace guiños siniestros inas salientes poetas de la époy me invita ca.
a recorrer si este libro no llevase un las distancias prólogo, con esas palabras terininaria mi alabanza.
La belleza de la obra, los Su inuchos momentos de feliz insNOMBRE piración que ella contiene, los salta en todos mis caminos hreves, pero seguros toques de fenio que iluminan algunas de como un hermoso perro sus páginas, la honda y al misSALVAJE ino tiempo discreta erudición con que toda la trama se halla entretejida, todo ello confiere a al escritor una autoridad que justificaria nuestra exigencia de en mis ojos la canción callejera de un muchacho que el prólogo guardase el misy MI DOLOR mo compás y la misma elevación de los mejores pasajes de se expande y se recoge su libro.
en círculos concéntricos Esto, en mi opinión, por desgracia no ocurre asi. Pero proletarizo mi tragedia Contiene el prólogo dos clay el gesto amargo de mi boca ses de declaraciones: una explise rompe cación genética de la obra y la afirmación de un principio geneEN UNA SONRISA DE ESPERANZA ral. Esa explicación de cómo se generó su poema es útil para Mariblanca Sábas Aloma el historiador de la Literatura del Continente; es bienvenida.
Habana, 1928 tan falsa como la que ofrezca cualquiera otra escuela de arte.
Toda escuela artistica tiene la duración del genio que la descubrió dentro de si, porque sus discipulos y continuadores viven de la luz prestada hasta el momento en que su hora de originalidad se enciende en su vida.
La ruta americanista transitada por Aguirre Morales le ha conducido a la realización de una bella obra; pero el tiene en la estructura hereditaria de su ser una larga veta imperial que le predispone a la comprensión, a la adivinación de emociones y de ideas del Imperio. Por espacio de diez años toda su actividad intelectual se desarrollo en un ambiente incásico y se ha sentido, al fin, uno de los habitantes del Imperio. No de otra suerte, ni en más breve plazo, alcanzó Flaubert la intensidad de sus visiones de Salambó.
Por otra parte, la civilización y la cultura del Continente Americano se basarán en algo más grande y permanente que las tendencias americanistas, las cuales con un más vasto horizonte que el implicito en la declaración del autor, constituirán una parte una parte tan sólode la actividad intelectual y artistica del Continente.
La expresión de Nuevo Mundo debería tener para nosotros el mismo hondo sentido que tuvo para Dante La Vita Nuova: una más alta y más espiritual visión de América, como para el Florentino una más espiritual visión de la vida. Si América debe ser para los americanos es porque los americanos deben ser para la Humanidad. De otra suerte se perpetuarian en América los mismos elementos que hicieron la historia del Viejo Mundo lo que haya sido, y es aún, cuando signos preñados de sentido anuncian para la América un más bello y más espiritual destino, superior a todos los provincialismos que nosotros erigiriamos recorriendo «rutas americanistas.
Esté atento el artista americano a la voz de su genio y siga las sugestiones que de allí le vengan. Pero esté seguro de que son suyas; que no le vienen de afuera, porque esto significa una traición a su más sacro yo.
Todas las grandes obras de arte se desbordan de los continentes endonde aparecen y alcanzan la vastedad del corazón humano, el cual es tanto americano como asiático, y europeo tanto como del Africa, de los Hiperbóreos tanto como de Australia. El arte americano resultará no de la resurrección de diseminados fragmentos de civilizaciones que florecieron en suelo de América, sino de la conciencia que los artistas desenvuelvan respecto de la función del Continente dentro del conjunto de la Humanidad. El arte por excelencia americano habrá de ser profundamente humano, esto es, universal. Puede muy bien el pensamiento o la emoción vaciarse en los gráciles Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica