Violence

REPERTORIO AMERICANO SEMANARIO DE CULTURA HISPANICA San José, Costa Rica 1936 Sábado de Agosto Tomo XXXII Núm. Año XVIII No. 765 Erasmo de Roterdam La de ser cubans cavernicolas en España, y ac.
13 bandas y 48 estrellas La ultima lectura de Grandmontagne El emigrante fracasado Elegia del cuervo y los personajes novelescos Teresa de la Parra SUMARIO Azorin propósito del centenario de Garcilaso de la Vega Alberto Arredondo Oración fúnebre a una fábula Juan del Camino Rafael Alberi Obreros y fábricas Ricardo Sáenz Hayes Recado sobre un mito americano: el Calcuche, de Chile Benjamin Jarnes Fuego en la lluvia FM Reflexiones sobre la violencia Huichilobos y el bisonte de Altamira Juan Ramón Jiménez Adilio Gutierrez Paul Valery Gonzalo Dobles Gabriela Mistral Antonio Acevedo Escobedo Sanin Cano Miguel de Unamuno Miranda Nieto Erasmo de Rotterdam Por AZORIN te niño en el cuero se plantea a si misEn la noche del 11 al 12 de julio de 1536, expiró Desiderio Erasmo. El IV centenario de la muerte de Erasmo se cumple, por lo tanto, este año. Invita a meditar sobre la actitud del humanista esa fecha memorable. Cuál fué en la vida la actitud de Erasmo? Erasmo niño no era nada. Su padre fué un clérigo.
Tuvo el hijo antes de ser ordenado. Su madre fue una mujer desconocida. Los padres de Erasmo murieron durante la niñez del humanista. El padre se llamaba Gerardo; el hijo se llamó también Gerardo. uso de nuestra Mancha y de otros parajes. a esse le llamaba Gerardo el de Gerardo. El humanista adoptó un seudónimo: el de Desiderio Erasmo. Era Desiderio inteligente por modo sumo. Su salud adolecia de precaria. Delicadísimo cuerpo, vivísimo en la luz mental, Erasmo se mo Jos un emocionante problema. Posee caudalosa erudición. Conoce varias lenguas sabias.
La pluma la maneja habil y elegantemente.
Su prosa es clara, limpida y precisa. Ante Desiderio se abre el panorama de la vida.
Gracias a su inteligencia ha ido poco a poco elevándose en consideración social. Vivió siendo niño en un monasterio. Guarda de su antiguo encerramiento monástico el gusto vivo como Ernesto Ronán por las cosas espirituales. Le tienta la acción, y su contextura fisica no le permite intervenir en las agitaciones humanas. Ha viajado por toda Europa.
Conoce Francia, Italia, Inglaterra, Alemania, Suiza. En todas partes ha granjeado valiosas amistades. Le estiman reyes, cardenales, gran des señores. Dos o tres pontifices han sido amigos dilectos suyos. El problema de Eras mo consiste en tener un vivo amor a la libertad y en verse rodeado al propio tiempo por un ambiente de coacción social. su libertad intelectual no suede renunciar Erasmo. La coacción que representan usos, prácticas y sentimientos tradicionales no puede por Erasmo ser destruída.
Y, sin embargo, es preciso pensar. pensar con libertad. Fara llegar a este resultado, Erasmo se crea una patria ficticia. No Teniega de sus compatriotas. Holanda no la olvida en su cariño. Del pueblo holandés dice Erasmo que no lo hay más humano, aunque esté rodeado por todas partes de razas incultas. Pero si Erasmo, inteligente, libre, hubiese permanecido en Holanda, viviendo en un reducido círculo de amigos, sin tiéndose solidario con estos compatriotas, sujeto a sus modos peculiares de ser, el humaDe Ahora, Madrid ideal. En esa patria vive. En esa patria puede escribir lo que escribe. Desde lo alto, ajeno a las pasiones de partidos y patria. Erasmo asiste como espectador a las luchas de su tiempo. Se busca su trato en todas las selectas reuniones. Su conversación es delicada e ingenua. Como todos los hombres europeos sabe Erasmo anécdotas, lances y sucedidos atañederos a reyes magnates. En alguno de sus Diálogos se complace en contarlos. Si Rousseau puso el origen de la sociedad en el contrato, Erasmo lo pone en la conversación. Nada que tanto concilie, conserve y establezca la amistad entre los hombres como la conversación escribe el humanista. La conversación es la que ha congregado en las ciudades los hombres, antes dispersos como fieras, y la conversación ha unido ciudades a ciudades y naciones a naciones No interviene Erasmo en las luchas que desgarran el siglo. Ni se entrega a la Iglesia ni cede a los requerimientos de Lutero.
En su coloquio entre un cartujo y un militar, Erasmo habla de la limitación que se impone el cartujo. Me imagino. dice el monje. que el mundo está encerrado en es.
tas cuatro paredes. después añade: Por qué llamarías tú a esto soledad? La conversación de un solo amigo destierra la sole dad. Tengo aqui algunos compañeros que están al corriente de todo. Esos amigos son los libros. El monje se impone la limitación en cuanto al espacio. Erasmo, viajero incan sable, curioso de todos los pueblos, se la inipone en cuanto a la aceión. La acción le está vedada. La fragilidad de su salud haria que, al intervenir, se produjese de pronto en su organismo un doloroso desequilibrio. No podría seguir trabajando. De su posición de espectador, atento e inteligente, no le sacuErasmo rá nadie. luego, Erasmo, fino, sensitivo, Por Alberto Durero (1520. experimenta horror invencible por todo lo extremado. La violencia es forma indefecti nista no hubiera podido desenvolverse con ble de la extremosidad. Suma de todas las la bella libertad con que lo hizo. Había, por violencias es la guerra. Suma de todos los lo tanto, que romper con los vinculos de la desiquilibrios mentales es la pedantería. Supatria originaria. Dei pueblo en que naciera, ma de todas las licencias en su tiempo, en desentendiéndose del ambiente tradicionalisel tiempo de la Reforma y de la Contrarreforta, tenia Erasmo que elevarse a una región ma es el monacato. Las tres obsesiones de universal. En diversos países europeos esta Erasmo son, pues, la guerra, los teólogos y ban sus más valiosas amistades. En las más los frailes. Todas estas obsesiones le llevan, cultas naciones de Europa se le queria y adcontrapartida culto del pristino es miraba. Erasmo, fino y sutil, se crea para su píritu. Desdeñando el perifollo de las exteprovecho, en bien de la inteligencia huma rioridades, Erasmo rinde culto a lo intimo na, inderogable en sus derechos, una patria En Palencia, en Burgos, en Toledo, en Va