REPERTORIO AMERICANO 301 principio político, de cariz humanitario, se tome en realizaciones de despojos para unos, y de privilegio para otros. La libertad resuelve estos problemas mejor que los gobiernos. La realidad de Cildas, el milagro del Quindio, del valle de la Vieja, del Ri saralda. de nuestra cordillera central, han sido el fruto del derecho de propiedad inviolable, conyu gado con la pujante iniciativa de los fundadores El gobierno interventor sirvió casi siempre de es torbo. En lo veindero actuar como rector de un gran desastre y como abanderado de enormes in justicias Mis franco hubiera sido consignar en la legislación el principio soviético, que no alimenta esperanzas ni hace esguince al derecho individual, ni destroza el régimen juridico, y decir simplemente: Con el fin de realizar la socialitación de las tierras es abolida la propiedad privada del suelo, y todas las tierras se consideran como pertenecientes a la Hación entera, y se trasmiten a los trabajadores, sin ningún pago, basandose en el principio de la igual dad de posesión. Constitucion sovietica, titulo se gundo sabios y condenare la ciencia de los doctog! Perdan sapientiam sapientium et pru dentinm reprobabo, o cuando otra vez da las graciac porque habiéndosevelado a los salios ej misterio de la salvación.
se haya descubierto a los niños y a los ignorantes. Bueno será observar que en griego la palabra párvulo, significa lo contrario de la palabra sabio, y esto nos expiica que en el Evangelio se ataque repetida mente a los fariseos, a los escribas y a los coclores de la Ley, mientras que a los inoctos se los defiende a capa y espada. Qué otra cosa quiere decir el apostrofe: Ay die vosotros, escribas y fariseos! Voe vobis, seribce et pharisoei. sino, Ay de osotros sabios! En cambio, vemos que el Señor recibe gran jubilo de los niños de las mujeres, de los pescadores y que entre los animales da la preferencia a los que más se apartan de la condición astuta de la zorra. Por eso quiso cabalgar en una pollita. Aquel que, con solo su voluntad, hubie ra podido oprimir sin temor alguno el lomo de un león; por eso, el Espiritu Santo bajo en figura de paloma, y no en figura de águlla o le milano: por eso, los ciervos, los corzos y corderos, son mencionados por do quier en la Sagrada Escritura, y por eso.
Jesucristo llama sus ovejas a aquellos a quienes ha prometido la vida eterna, pues certan ente que no hay ningún otro animal de mayor simplicidad, como lo demuestra el que según Aristoteles, la frase hombre de condición de borrego. con la que se designa al que parece tener la estolidez de estas bestezuelas, suele tomarse como un traje que equivale a llamarle estúpido o Imbécil. sin embargo, estos son los que forman el rebaño de que Cristo se tice pastor Cristo, sl, a quien también le era stato el nombre de cordero, puesto que San Juan te enunció con las palabras Bece Agnus Dei que aparecen después en muchos lugares del Apocalipsis Cuanto llevo dicho proclama que todos los mortales, aun los piadosos, son estultos y que el mismo Cristo vino en apoyo de la eatulticia de los hombres, ya que, slendo latente de la sabiduria, quiso, sin embargo mostrarse en cierto modo como estulto cuando, tomando naturaleza humana, se revistió de carne mortal, de la propia suerte que quiso también ser pecador para redit mir el pecado: pero no se valió de otros medios de redención que de la simplicidad de la cruz y de apóstoles ignorantes y rústicos, a quienes con gran insistencia les prescribis In estulticia y les ordenó que desterrasen de si la sabiduría, presentándoles como ejemplos a los niños, a los lirios al grano de mostaza y a los pajarillos, seres y cosas de encantadere sencillez, que carecen de sentido y que viven solamente con la protección de la Naturaleza sin necesidad de artificios y de cuidados, amonestándoles, además, a que no se preocupasen de las palabras que nubiesen dt. decir cuando les llevaran las sinagogas o a la presencia de los magistra dos y potestades y vede vedándoles, en fin parar ni en el tiempo ni en la ocasión, para carles a entender que no fiasen nada a los propios alcances y que pusieran en El toda su esperanza, Tal es también el motivo que Dios, ereador del mundo, tuvo para prohibir que su gustase del árbol de la ciencia cual si ésta fuese algo asi como un tosigo de la felicidad y de que San Pablo, la condenase abiertamente por ser vana y causa de perdición, idea que fue a mi juicio, la misma que inspiró a San Bernardo cuando a quella montaña aonde fue a sentarse Satanás la llamó montaña de la ciencia.
Quizá no sea liviano argumento en pro de la estulticia el favor que logra entre los poderosos, los cuales no conceden su indulgencia más que a los que yerran por falta de luces, gracia que a los sabios no dispensan jamos: y de aqui que todo el que pide perdón por una falta, aunque la haya cometido conscientemente, busque en la estultila excusa y patrocinio. Asi, Aarón, según vemos ez el Libro de los Números, si mal no recuerdo, suplica perdón para su hermana al decir a Moisés: Te ruego, Señor, que no nos tomes en cuenta este pecado, porque obramos como ignorantes: Obsecro, domine mi ne imponas nobis hoe peccatum quod sulte conmmisimus: Saúl pide misericordia a David fundándose en que habia obrado estultamente: Apparet enim quod ztulte egerim, y el mismo David impetra la benevolencia de Dios rogándole que no le hega culpable de su maldad porque habia procedido como estulto: Sed precor, Domine, ut transferas inquitatem servi tui, quia stulte egimus; es decir, que parece que no es posible implorar el perdón sin que se invoque para ello la estulticia y la ignorancia. Pero el más vigoroso argumento de mi aserto es que cuando Cristo en la cruz pidio por sus enemigos, exclamando: Padre, perdónales. no alegó en su favor otra discul pa sino su ignorancia al añadir: porque no saben lo que hacen. Del propio modo, San Pablo escribe a Timoteo haber aleanzado la divina misericordia porque su incredulidad fue el efecto de su ignorancia: Sed ideo misericordiam Dei consecutus sum, quia igno rang Fei in incredulitate, que significa la fuase obre como ignorante. ignorans fci. mas que fué incrédulo por estulticia y no por maldad. qué otra cosa quiere decir con las palabras por esta razón he conseguido la misericordia, Gideo misericordiam consecutus sum. sino que no la hubiera alcanzado sin buscar su defensa en la estultiva? El salmista, de quien no me acorde en lugar oportuno viene también en mi abono cuando suplica al Señor que olvide los pecados de su juventud y de sus extravios: Delicta juventutis meoe et ignorantias meas ne memineris. Ya veis que par de excusas. la temprana edad, de la que yo soy, por lo general constante companera, y los extravios, cuyo número infinito nos revela la fuerza incontrastable de la estulticia Valencia y la Ley de Tierras De El Tiempo. Bogota, 14 80 Nada tan logico ni quia tan necesario, consola Oposicion de Guillermo Valencia, a la ley de tierras que comenzó a discutir anoche el senado. La ofensiva del Maestro prueba que la ley es buena, o sea que llena los fines a que esta destinada, y que la personalidad del eximio poeta, orgullo del paisy omista de America, es recia, inalterable y sigue gozando de las excelencias y singularidades que se le atribuyen justamente. La ley. hemos sostenido sus amigos, es moderada y moderadora, nada tiene de confiscatoria ni de demagógica. Traerá luz y normas precisas al caos en donde se mueve ahora todo lo relativo a la propiedad, y facilitara, contra lo que suele sugerirse, la defensa de los derechos del pro pietario, a tiempo que hai visible a adquisicion de la tierra por un gran número de colombianos que no tienen otra moneda para pagarla, que el esfuerzo de sus brazos. Por otra parte, es innega ble que solamente la pequena propiedad, adecuada mente protegida y estimulada por el Estado y por las cooperativas, le arrancará al suelo la plenitud de su produccion, y que Colonilia necesita de que ella crezca muy apreciablemente Pero también hemos dicho que la ley clausura la epoca feudal, e inicia con valerosa oportunidad la democratización de la tierra, es decir, el dar igualdad de oportunidades para entrar en su posesion. ahl es en donde hallamos inevitable y lógica la actitud negativa del Maestro Valencia, el último se por que nos queda No somos intolerantes, sino todo lo contrarin.
Respetamos con sinceridad todas las posiciones intelectuales y los mandatos de todas las conciencias, y les damos un gran precio todos los valores mentales, valores que tienen sus fueros, maxime cuando llegan a la cumbre donde está situada la inteligencia procer del ilustre Valencia. Se trata de un cerebro privilegiado, de a vastisima y solida ilustración de una información universal, y de una especie de intuición prodigiosa que deslumbra y maravilla. Valencia es genial. Grandes distinciones le ha becbo la república, en el curso de su vida. No hay honores que la democracia colombiana no ha ya intentado confentie, y si no lo ha conseguido débese unicamente a la ciega oposición de sus correligionarios. Sin embargo, ser siempre licito decir de la inmensa gloria que sobre su nombre irradia Pero a el debemos aceptarlo tal como es. es un hombre del pasado, fiel a su colto, y que la glorificado las ideas anejas con una pompa verbal incomparable. En su prosa tousical y magnificent su verso de una tersura y de una diafanidad per ſectas, verso de una orginalidad indiscutible, ha cantado la tradición y la librado batallas en su de fensa contra adversarios que fueron dignos de el.
Valencia es la tradición. Quienes sostienen sus mis.
mas ideas, suelen ser arrihistas de poca monta, que usan los sistemas ultramodernos, cn cuanto ellos tienen de ligeros e inescrupulosos. Valencia, no. El us un paladin a la antigua, incapaz de claudicacionee y acechanzas, incapaz también de ceder ante nada que no sea el golpe final del contendor. Va lencia, desinteresadamente, habla de ser el preconi rador del latifundio, no por su aspecto economico, sino por su aspecto nobiliario. Pero el pais quiere ya otra cosa Armando Solano Guillermo Valencia que Colombia quizá no se haya dado cabal cuenta ataca el proyecto de der Galerie Valencia Ley de Tierras. De El Tiempo. Bogota, 10 3 el periodico claridad publica hoy un edi.
torial del maestro Valencia, en el que, al comentar el proyecto de ley de régimen de flerras, dice En pueblos fuertemente sacudidos por las inVesiones y guerras interiores, la adquisición de la tiera iba tras la seguridad, como una previsora manera de ahorros. y asi lo fue para los colombianos, lo mismo en la colonia que durante la republica.
Esta nueva desamortización de ultima hora será tandes trosa para la economia nacio como para la de los bienes eclesiásticos, y tan fructuosa como ella para los mimados del poder público, como ha ocurrido en Mexico.
Asi se produce la estraña antinomia, de que un