170 REPERTORIO AMERICANO maestro comenzó a hablar reconociendo, como no podia menos, lo que estaba en la conciencin de todos. Dijo que, ciertamente, los ejemplnres que contemplábamos harian pensar en que el hombre era un descendiente del mono, que las semejanzas con éste y las transformaciones que el hombre mismo ha sufrido en los miles de años de su historia que nos son conocidos, asi parecen indicarlo, pero que tal cosa no debia creerse pues es un error que los sabios del Museo Field se han encargado de destruir como iba a demostrarlo en el acto Se sabia la lección. Sin duda otros muchchos en veces anteriores le habian hecho dasar el mismo mal rato. acudió entonces a un truco para el cual parecia estar prepara do un letrero puesto efectivamente por los sabios del Museo Field, pero que el maestro desvirtuó dolosamente como va a verse escamoteando su lectura completa y cambiando por tanto, las verdaderas palabras de los antropólogos de Chicago.
Un discreto letrero lateral dice que hay razones para pensar que el hombre no desciende del mono, pero y esto fue lo que el maestro intencionalmente suprimió para sembrar el desconcierto en los alumnos dice con toda claridad también, que es igualmente cierto que tanto el hombre como el mono tienen un antepasado común, ya que en todo caso no son más que ramas paralelas del tronco uniсо en la escala biológica. Es decir, para los sabios de Chicago, el hombre no desciende del mono; pero el hombre y el mono juntos descienden de una especie animal progenitora de los dos. Esto era lo que había que haber explicado a los alumnos sinceramente, porque en ese hecho de la ascendencia anima! y por in tanto común con el resto de los mamiferos está la nuez, la médula del pensamiento da winiano respecto al origen del hombre El maestro de Chicago sabia que le era imposible eludir de parte de sus alumnos, si abordaba el temn, una pregunta como ésta bueno, y cómo deberemos llamar a et bisiluelo común del hombre y del mono? PorGue nos encontramos cogidos por una tenaza animal implacable. o el bisabuelo ern ya hombre o era todavia mono o cosa semejante. mientras más nos empeñamos en negarle el carácter de simio será peor, pues si el bisabuelo común era hombre nos veremos arrastrados a una conclusión tremenda, mas bumillante para la dignidad divina de la especie humana que el darwinismo original en vez de que el hombre descienda del mono.
el mono desciende del hombre, es decir, el hombre es hasta tal punto un mono, u mero animal, que muchos de sus hijos acreditando al árbol por sus frutos conforme a lu sentencia biblica. son los actuales chimpancés y orangutanes. El naturalista mas ateo no encontraria peor solución que la primera de las dos planteadas por los antropologos del Museo Field.
La segunda solución posible es la buena, vuelve a colocar la cuestión en sus términos justos: el bisabuelo común no era un hombre, era sencillamente un animal, no le llamemes mono, llamémosle antropoide, que engendo, por el lado derecho: hombres, y por el lado izquierdo: monos. No somos hijos ni padres de los monos, somos sencillamente sus her manos.
Esta otra punta de la tenaza biologica no podia haberla eludido el maestro de Chicago, y lo hubiera conducido a explicar sus alumnos lo que escamoteó con su silencio: que el hombre es una especie animal de rivada de las otras y no una creacion sui generis de la divinidad. Pero esto no puede enseñarse en las escuelas de Chicago, nurau para ello sea menester aprovechar dolor mente la mitad de un letrero discreto, que han sido puesto muy oportunamente por los sabios del Museo Field. Los sabios dicen la verdad, el maestro se come de ella la mitad que le conviene y salen de las escuels neraciones y más generaciones con esta idea concreta: nuestros antropólogos reconocen que es falsa la teoria del origen animal del hombre.
En las caras de los muchachos leí el desconcierto. Los vi oscilar por un instante en el vacio. Rápidamente la contradicción dejó de herirlos. Había sido aplastada por la autoridad del maestro que además se apoyo, mafiosamente, en el text oficial de los sebios. Habían quedado troquelados en un instante por la doctrina ortodoxa oficial, la que apoya la explotación pacifica de las masas Cuando sali del Museo Field el edific me parecía menos grande. Valorizaba en moncs que antes, la riqueza, el orden, la magnitud externa de las cosas. Mi entusiasmo al presentir que el museo llenaba una vigorosa fun.
ción educativa, había muerto. Quedaba sólo un soberbio esqueleto de mármol, tan fosilizado e intecundo como los huesos de mamuth que dentro vi. no pude resistir la tentación de denunciar el truco de Chicago. Un truco que es por lo demás, universal y constante: falsificar la ciencia para ponerla al servicio de los fines políticos.
México no tiene aún grandes museos. Pero confiemos en que cuando llegue la hora de levantarlos, nndie saldrá de ellas como los niños de Chicago: con las verdades vueltas al revés.
La Mistral, Martí y Puerto Rico hermosas vilnie o comprou pequeno cuarto de in Por PEDRO JUAN LABARTHE Envio del autor. Valley Forge Military Academy, Wayne. Pa Primavera, 35.
cuperación dos; de Iba para Europa. Esta vez tenía para mi España una más potente atracción que antes.
Cuando la visite la primera vez fuí porque es un deber de todo hispano el de visitar la siguiendo el canto popular Ay no te mueras sin ir a España como es también obligación católica el visitar a Roma y el Santo Sepulcro en Jerusalem Mi itinerario era: primero visitar a Paris, también bién deber de todo artista y ansias de toa Alemania para cerciorarme de las persecuciones contra los judíos y vivir el nacionalismo socialista: ir a Rusia y empaparme de otro ismo: sovietismo o comunismo: Hoy hay que visitar a Rusia, Alemania e Italia para estar al día con los movimientos centripetos políticos europeos. Los cambios gubernamentales, el funeral de las democracias, de los letreros: Liberté, Egalité et Fraternité y of the People, by the People and for the People. Nació la democracia al fin del siglo xvm y murió con la guerra del 1914. Hoy se evoluciona hacia las dictaduras, sean socialistas, fascistas o comunistas. Las riendas de los estados se dan al hombre de mano de hierro que en periodos caóticos económicos sabe ampararse sobre los hombros de los atolondrados y trae esperanzas, optimismo y momentáneas victorias. La conglomeración que antes era heterogenea en ideas, que estaba loca y se preguntaba: Quo Va.
dis responde al fuerte latigazo y al ronco mando del dictador y se hace homogénea y sólo hay un partido y todos los ciudadanos como sólidas columnas sostienen y dan rienda absoluta al libertador y auriga. Mas estas dictaduras que no dejan de ser meteoros vislumbrantes que alumbran al camino de la rede la confianza no duran largo tiempo y de dictadura se pasarán las monarquías constitucionales que son el ideal de los pueblos que desean permanencia o a los congresos que estarán llenos de politiqueros que darán todos sus derechos cada diez o doce al presidente visionero que se hará dictador en la práctica pero presidente en teorín. NRA, AAA, y otros alfabetos roosveltianos, por ejemplo.
Bien, la atracción que tenia España para mi esta vez torció mi itinerario trazado en Nueva York. El deber que me habin impuesto como estudiante de polities internacional fué subordinado por el corazón y fuime a donde el corazón me guiaba, a Madrid, para recoger las palabras diamantinas de la primera mujer consul hispana, Gabriela Mistral, quien ha iniciado a las mujeres de su raza en la carrera diplomática. Méjico siguiendo el ejemplo de Chile envía hoy a Palma Guillen como ministro a Colombia.
Me esperaba en la estación del Norte mi buen amigo Luciano Dorta y de Eguiluz, amigo de Paris, erudito joven que por humildad Castellana leyendo, observando, escribiendo y guardando sus hermosos articulos y estudios filosóficos antes de darlos a luz. Egoismo inconsciente de los grandes. Como hay muchos en España que a su corta edad están ya desilusionados, cansados de los dolores de la vida y prefieren la quietud de un monasterio (y fui yo quien lo rescate de uno en Paris en 1932) al maelstrom politico enfermizo que hoy existe no sólo en España sino en todo el mundo.
Una vez en los brazos de la gentilisima familio Eguiluz de raigambre vasca noble, saboreando sorbo a sorbo ese carino y ternura de familia del que vengo sufriendo orfandad hace dos años, me puse en marcha hacia el consulado chileno, Mil cosas llevaba en la cabeza que debia decirla a la gran Gabriela Muchas cosas han transcurrido en la colonin hispana en Nueva York por la cual ella siempre se ha interesado desde que la dejé de ver en el 31. Cuando estuve en Europa en el 32 corriendo, dando conferencias pro Puerto Rico y la Bandera de la Paz Roerich en Holanda, Bélgica, Francia y España estaba ella en Italia y mi licencia de seis semanns no me permitió verla, pero esta vez iba con dos meses y nada ni nadie me prohibiria visitarla y estar a su lado todo el tiempo posible Asi fué. Un mes estuve en su compañía. Alli me encontré a In erudita Margot Arce, que como yo corrió este verano hacia esa atracción educativa. Pero, solo Margot y yo? No. Cuanto portorriqueño llega a Madrid tiene que tocar el aldabón del consulado chileno y ya bien descansa el consulado