Imperialism

REPERTORIO AMERICANO 51 Re baño Colaboracion Madera del autor. San Jose, Costa Rica Por el mismo camino a recobrar mis penas, las cruces de mi via tienen abierto el brazo, la mano es de pastora, las cruces azucenas, el cesto tiene el borde de maternal abrazo. Habia dejado penas? Hoy vuelvo a recogerlas.
no hubo en mi vereda los pájaros del cuento.
Con opal de sus ojos, y el hilo pensamiento, fidelidad que espera, sarial que se hace perlas.
Por el mismo camino a recobrar rebaño, ovejar de mi alma que apacenta en mis venas, sin mengua y sin nunca, y más lejos que el daño, por fieles y por blancas, y por mías mis penas.
мах Jiménez Julio de 1936 MAX El caso de Joseph Jolibois Los portorriqueños vigilantes no quieren República de trapo Por JUAN DEL CAMINO Colaboración. Costa Rica y Julio del 36.
por el La independencia de Haití tiene un combatiente menos y la pérdida repercutirá hon.
damente, porque ese combatiente es Joseph Jolibois. Dos años estuvo preso en una mazmorra en Port au Prince y sin enfermedad previa, acaba de devolverlo la satrapia haitiana carne muerta para el sepulcro. La sa: trapia es hechura del Departamento de Eslado imperialista. Representada la comedia de dar independencia a Haiti, el imperialismo formó la casta constabularia que tomó los puestos de dominio dejados por las milicias yanquis. El haitiano Jolibois no capitulo. Habia luchado dentro y fuera de su nación enfrentándose a las mayores penalidades. El Departamento de Estado, movido por el faviseismo de la politica del buen vecino, adobó la cosa de la independencia. Pero Jolibois siguió en la pelea. Como buen luchador no tuvo respeto para el régimen servil al imperialismo yanqui. Se le encarceló enton ces junto con otros haitianos. de la prisión sale apagada esa voz denunciadora de las pillerias de la conquista imperialista.
Asi convenia al Departamento de Estado La obra que va haciendo en estos pueblos exige la destrucción de sus opositores. De otra manera no es perfecta la factoria. Haiti está concebido como la factoria perfecta.
La inteligencia que dirige y da destino a la vida haitiana reside en el Departamento de Estado. De esta agencia funestísima del imperialismo yanqui salió el decreto de independencia vergonzoso que coloca a Haiti en estado perpetuo de vasallaje al yanqui. Las realidades las cantaba Jolibois. Este luchador habia sufrido y el dolor le había dado visión. Para deshacerse de él y matar asi el estorbo, lo sumió el Gobierno de la factoria haitiana en la prisión, inventándole el delito de haber distribuido un articulo denigrante para el titere Stenio Vincent que hace de presidente de Haiti. No valieron protestas fuera del feudo de Vincent. Un comité importante de hombres de valer trabajó por su libertad y como iba creciendo la proy el mundo conocia los detalles del crimen, la satrapia optó por matarlo.
Haiti sentirá la muerte de Joseph Jolibofs, porque para Haiti trabajo siempre. Lo recordamos cuando vino a nuestro pais a mover opinión en favor de nación. Conmovia verlo. Algunos debieron mirarlo sin fe. Pero otros lo acogieron y pusieron cariño por su causa, la causa de la independencia haitiana. Hizo vida honrada y de decoro en nuestro país. Esta afirmación hay que hacerlo para que sea testimonio de su paso por pueblos de la América nuestra. Estamos acostumbrados a recibir a mucho farsante que migra con el pretexto de trabajar por la libertad y otras mentiras. Lo acogen quienes están dispuestos a ser acogedores. Pronto se desengañan. Lo que han estimulado es un fraude. No sucedió así con Joseph Jolibois.
Todos los dias de su estancia aquí los dedico sinceramente a ganar voluntades en favor de la independencia de Haiti. Dio conferencias y fué conservador infatigable acerca de asuntos de Haiti. Es claro que vino a pais lerdo y comodidoso que no quiere hacer por otros nada. Sin embargo, no lo vimos desanimado. Su mejor confidente fué don Jor quin Garcia Monge. Si llevó recuerdo per manente de nuestro país fue senor Garcia Monge, quien abrió su Repertorio al luchador que salia acongojado de Haiti, no anclarse comodamente, sino a continuar en la pelea. Joseph Jolibois relató la condición de Haiti con alma encendida.
Murre en una prisión organizada por el imperialismo yanqui en una de sus posesiones insulares del Caribe, ese luchador entero. No podía vivir perturbando la obra de conquista. La farsa de la política del buen vecino necesita hacer creer que a Haiti se dió su independencia. Cuando todos los que no duermen y vigilan el desarrollo de los planes imperialistas comprenden que lo de Haiti fué la mentira cruel y malvada de una politica de conquista que sólo mira en estos paises la factoria, el Departamento de Estado se empeña dar otro sentido al mal.
El casa de Joseph Jolibois es digno de meditarse para saber hasta donde llega el poder destructor del yanqui imperialista. No ha de escudarse la destrucción diciendo que el go testa