REPERTORIO AMERICANO 371 SELECTA La Cerveza del Hogar ELEONES Leo EXQUISITA SUPERIOR luntad osada, pero no morirán sus sober bias hipérboles, sus magníficos anatemas, sus proféticos arrebatos, sus sobrehumanas concepciones de las viejas y portentosas teogonías. su vez en Santo Domingo, la juven.
tud literaria tenía el evangelio huguiano como guía de sus entusiasmos y en el pe riódico y la tribuna, la gran sombra del lirida francés se proyectaba ampliamente.
Apolinar Tejera lo parafraseaba gallarda mente y Eugenio Deschamps, el orador que ascendió a las más señeras cumbres de la elocuencia, no sólo se asemejaba al Hugo del destierro en sus flamígeras catilinarias a la tiranía, sino en la pompa de sus períodos y en la torrencial abundancia de sus tropos, mientras Américo Lugo, repujado estilista, si no ponía el gorro frigio al dic.
cionario, de lo que se ufanaba Hugo, le da.
ba a su prosa la rotundidad marmorea de las más tersas páginas huguianas. en Puerto Rico, en esa islita de oro, la pauta a nuestras elucubraciones. de Córdova, el soplo de Hugo animó toda de sol y de jade, de palmeras y de mar. qué citar más nombres que el de Ru la literatura de la época post romántica, también Hugo encuentra prosélitos desde bén Darío en Nicaragua? Ventura García precursora del modernismo y otro tanto se Braschi, Corchado, Marín, Lola Rodríguez Calderón lo expresó ya y con él lo afirman realizó en los demás países sudamericade Tió hasta el inclito Hostos, Baldoristy muchos otros: Rubén Darío es un discí nos, por ejemplo en el Brasil donde Víctor y Negrón Sanjurjo.
pulo de Hugo. el propio aeda de Prosas Hugo encontró el terreno fértil para frucTemerario resulta en una charla en que Profanas. como ya lo consignamos, se ufa tificar opulentamente, como puede verse apenas se desflora tema tan vasto, hacer nó de ello hasta al titular su libro con una en las colecciones de La Marmota y Nitenómina detallada de poetas y novelistas palabra sugerida por un verso de Hugo. roi, revista esta última, que publicada en hugianos, pero, por lo menos, para seguir en su casi testamento lírico de Cantos de París, era el eco directo de cuanto concerla trayectoria de esa influencia en Améri. Vida y de Esperanza ¿no dijo que había nía al movimiento literario de Francia y, ca, espigando solamente algunos nombres sido con Hugo fuerte y con Verlaine am por ende, al sumo pontífice del Romantiproceros, descendamos de las Antillas a biguo?
cismo. En ese solar edénico donde el espí.
Centroamérica, cuya fecundidad literaria es En estas menciones rápidas, que hagan ritu europeo se expandió con más afincauna de sus mejores preseas. Encontrémo. acto de presencia Aquileo Echeverría, miento, los condoreinos y Goncalves Díaz, nos desde luego con el guatemalteco Batres Justo Facio y Roberto Brenes Mesén, Barreto, Castro Alves, Ruy Barbosa, FaMontúfar, el romántico autor del célebre de Costa Rica, para que saltando por mon gundes Varella, Alencar, Martins Penna, madrigal Yo pienso en ti. y a su zaga, a tes y mares, lleguemos en nuestro vuelo de enarbolaron las banderas románticas, agiSalomé Gil, con su novela Juan Chapín, a abeja hasta la tierra del Libertador Boli tadas por los vientos huguianos.
Domingo Estrada, Joaquín Méndez, Máxi var, y allí anotemos que si Calcaño reco Antes de que en la Argentina resonara mo Soto Hall y Enrique Gómez Carrillo, gió la herencia de Bello en Venezuela, en el olifante de Andrade, Echeverría, el auque tantas deliciosas crónicas consagró a lo que a traducciones de Víctor Hugo se tor de La Cautiva. fué el precursor del hablar de Hugo. En El Salvador se yerguen refiere y Soffia, en Chile, realizó magnífi. romanticismo y después Rafael Obligado, las figuras de Vicente Acosta, bardo do cas versiones también, seguido en la mo Estanislao del Campo, Guido Spano, Alliente y alquitarado, del escultórico Fran dalidad romántica por Blest Gana, Barros mafuerte continuaron embrazando el mis.
cisco Gavidia, que paseó su ropón sérico de Grez y Samuei Lillo, en Colombia, como mo broquel literario. en Uruguay Magafakir por las florestas natías, y de José siempre que se trata de manifestaciones riños Cervantes y Acevedo Díaz y luego María y Román Mayorga Rivas. Todos, cual poéticas, se dió y se ha dado proficua co Pérez Petit iy por qué no el insigne Romás cual menos, habían encendido sus lám secha de traductores huguianos, desde dó. impregnaron su pensamiento en la y se habían inspirado en el Víctor Hugo Pombo, José Eusebio Caro y Arboleda a técnica y la manera de Hugo.
enfático. en el Víctor Hugo satírico, penFidel Cano, Torres, pasando por Londoño, sador y filósofo.
Carlos Restrepo, Gutiérrez González, Gui En este largo recorrido por los campos ¿Y qué decir de su influencia en Hon llermo Valencia y sobre todo Ismael Enri de la historia literaria de América, que seduras? Preguntadlo al ilustre poeta de El que Arciniegas, que ha hecho de la traducguramente os ha fatigado a pesar de mi Banquete. en cuyos plateados cabellos se ción un arte refinado de genuino artífice. afán por sintetizarlo lo más posible, aún han entretejido los délficos lauros del triun El Perú, por su parte, desde los buenos haciendo penosas omisiones, habéis tal vez fo. El os dirá mejor que yo que desde que tiempos del insigne Corpancho, contó des. percibido como influyó el genio de Víctor ondearon en América los gonfalones del pués con Ascensio, Palma, Salaverry, Amé.
Hugo en las letras iberoamericanas. Es cla.
romanticismo, todos los escritores hondu zaga y al fin con Santos Chocano, entre la ro que ello no se prueba sólo con citar reños saludaron con sus hosannas de júbi pléyade que de cerca o de lejos fué iman nombres, pues había que examinar con delo al rapsoda de Hojas de Otoño. El mis tada por el genio de Hugo. Ventura Gar tenimiento cómo se desenvolvió ese fenómo, tradujo numerosos poemas de Hugo y, cía Calderón ha proclamado en célebre po meno y seguir paso a paso el proceso de como era natural, cuando estuvo en París, lémica que debemos mucho a esa influen esa influencia; pero la enumeración de las Luis Andrés Zúñiga, reverente fué a la ca cia en América y en su hermosísimo y la. personalidades que en su actuación literasa del genio para ver emocionado las re pidario ensayo, obra maestra de ironía y ria se distinguieron como adeptos el vicliquias de aquel domador de tempestades. donosura de lenguaje y pensamiento, Ex torhuguismo, evidencia por lo menos que Yo, me ha dicho, y Antonio Domínguez cusas a Víctor Hugo. exclamaba: El mun en las letras continentales se registró ese y el divino Juan Ramón Molina, Julián Ló do repercutía en él como en la montaña y influjo. si él en dicho sector de la cultupez Pineda y Froylán Turcios y todos los la selva. Todavía sentimos crujir el alma ra fué profundo y abarcó a la vez la poe.
escritores de mi generación y quizás has. bajo la ráfaga, e hinchada de negras cerra sía y la novelística, también se palpó en ta don José Cecilio del Valle y los mismos zones, va a llorar la de todos.
las costumbres y en ciertos aspectos de la fundadores de la Universidad y de la Aca Como en su vecina y hermana, en El sociedad de entonces, principalmente por demia Hondureña de la Lengua, Soto, Ro Ecuador, desde el cantor de Junín, Olme la enorme popularidad de Los Miserables.
belo, Girón, Chirinos, Gómez, Vallejo, Mem do, que aunque neoclásico y quintanista es Esta obra colosal, serie extraordinaria breño, Robles, Alvarado Guerrero, Padilla, índice romántico, hasta la generación que de cuadros maravillosos. como la califica Inestroza, Ramírez Fontecha, Ferrari, Ma tuvo sus más descollantes expositores en un crítico, paso de las manos de los grupos tute Brito, Lazo, Céleo Arias y tantos más, Antonin Toledo, en Mera, Dolores Ven. selectos a las del pueblo. sus personajes nos movimos dentro de la influencia del timilla de Galicia, Numa Pompilio Llona, cobraron tanto predominio y se adentraron magno poeta francés, cuyas obras dieron Miguel Angel Corral y Joaquín Fernández con tanta hondura en el alma multitudi Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica