por su 130 REPERTORIO AMERICANO en el norte, Walt Whitman, y en el sur, lo insondable de sí mismo. Nieto de de sueño. y lo repite a través de todos Lugones, Herrera Reissig, Amado Nervo Dios, hijo del diablo. dijo de él Torres sus lamentos.
Es indudablemente poeta y hasta aquel alucinado y bamboleante Rioseco. eso, para mí, no es la condi del sueño, que vaga sonámbulo vizconde de Lezcano Tegui. Hay en ción de un mistico sino del atormentado mundo de nieblas y fantasmas. Cada cual él, y perdura siempre, subyacente, un por el demonio interior que perseguía a a su modo, todos los poetas lo son: sólo romántico elemental, que también sub Nietzsche. Como los eremitas del de que cada cual tiene y cultiva su prosiste en la mayoría de los poetas moder sierto fabuloso, se debate a perennidad pio sueño, a veces dormido, a veces en nistas de la primera hora. Como ellos, entre la carne y el alma, engañado por la vigilia. Lo singular suyo consiste en que es ante todo un poeta de evasión, aunque mujer y tentado por Satanás. En ocasio ni él mismo puede establecer la fronte no viva confinado en su torre de marfil. nes, desciende de su columna de granito ra entre ambos dominios, entre ambas Existe en él la materia prima de un ro para seguir a la encantadora. y torna conciencias, que se interfieren flotantes, mántico de cepa becqueriana, de senti luego a la penitencia, a la soledad y al móviles, inciertas.
mentalidad muy siglo XIX, refinada en ayuno, sin decidirse jamás por el tálamo Pero no es siempre así. menudo se alambiques modernistas.
o la yacija, por la rosa o el cilicio.
muestra lúcidamente despierto; y lo está, Según Alberto Velázquez, es el prosobre todo, cuando el incentivo erótico totipo del poeta abandonado al sueño y pica su médula espinal y provoca las Dije antes que Arévalo Martínez no a la alucinación. Gabriela Mistral lo disfrazadas apetencias de la libide. Enalcanza la dimensión mística, pese a que tonces ve, con ojo sensual y aguzado, observa en sempiterno duermevela: Ni bajo la falda corta, unas botinas que merodea por sus aledaños. Lo que bulle duerme ni anda nunca despierto. y cantan algo suave por el suelo. y recaen él es angustia metafísica, pavura anve las cosas sentado en dos orillas pacita en que ya tengo medio siglo, y te el misterio, horror hacia la muerte, grandes de sueño y de veras. El lo con sin embargo, los ojos se me van tras las desolación de infinito, caida sin fin en firma: Yo vivo con modos tan hechos muchachas. y confiesa, con sereno inPedimos la palabra. En Rep. Amer. Apartado Postal 574.
México, abril 12 de 1956.
Señor Secretario General del Comité de Derechos Humanos.
New York, Señor Secretario General: tras ideas políticas con flagrante violación de los artículos 199, 200 y 210 Delitos son en Nicaragua bajo el gobierno de facto de Somoza todo reclamo de cualquier derecho politico elemental y aún de muchos derechos civiles como que, por ejemplo, cae en desgracia el empresario industrial que no lo haga coparticipe graciosamente de las acciones de su empresa. Un libro sería preciso p1ra enumerar las violaciones de la ley y los ultrajes a la dignidad humana que se cometen diariamente en Nicaragua; pero nos abstenemos de hacerlo, siendo nuestro propósito el momento rogar a usted una pronta y eficaz investigación encaminada a obtener la libertad de los señores Luis Armando Morales Palacios, Roberto Chamorro Zink, Amadeo Baena Lazo, Julián Salaverry Zapata, Gustavo Adolfo Zavala Cornejo, Carlos Prado Corroto y Jorge Ribas Montes.
Los que suscribimos, ciudadanos nicaragüenses, nos dirigimos a usted y por su digno medio a la más alta institución moral del mundo, para rogar su intervención en favor de compatriotas nuestros, que son víctimas de un trato inhumano en la cárcel de la ciutdad de Managua, Nicaragua, en donde la dictadura que desgraciadamente oprime a nuestro país los tiene aherrojados.
Acompaña a la presente una copia de la carta dirigida a Somoza, por los compatriotas que desde hace dos años sufren inicua prisión. El delito de que se les acutsa no es más que el haber ejercido el derecho de conbatir la tiranía para restablecer el régimen democrático subvertido por el general Anastasio Somoza desde 1936.
Confiamos plenamente en la altruista, pronta y eficaz intercesión de usted, Señor Secretario General, y por ello nos es grato suscribirnos y protestar la expresión de nuestro reconocimiento y el de los parientes de las víctimas que nos han rogado dirigir a usted esta súplica.(f. Hernán Robleto, Edelberto Torres, César Pasos, Olga Silva, Luis Felipe Gabuardi, Alberto Gámez, Rosendo Solórzano, Armando Amador, Escobedo Gloria Silva. Fernando Robleto. Guillermo Genie, Narváez, Orlando Argüello, Carlos Ibarra, Aura Lila Silva, Armando Rodríguez Montes, Juan José Meza, Mireya Duno de Meza. Alberto Solórzano Thompson Como el señor Somoza desprecia profundamente la Carta de Derechos Humanos, es demás invocar ante él al artículo 5º que es el que más violaciones sufre bajo su régimen. Los que suscribimos la presente somos víctimas suyas con violación del artículo 99, y antes de hallar hospitalidad en el suelo mexicano en que hoy estamos, sufrimos persecuciones y prisiones por nues Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica