Popular Fronts

REPERTORIO AMERICANO 163 sa ca española, refiriéndose a quienes asi la a na dentro de la República, durante el cual no y más aún, por su contenido social. El ca.
maron. lo que el personaje de Cervantes. es ya únicamente caso de procurar que los rácter del Rey tuvo, pues, influencia decisiva en Mis amores y los suyos han sido siempre cambios que ha prometido la Constitución la manera como España llegó a la Repúbliplatónico, sin extenderse a más que a un se queden escritos y no se cumplan jamás. ca: porque fué el desamparo en que por obra honesto mirar.
sino cosa de atreverse a proceder, dentro de la de ese carácter del Rey, quedó por fin el Lo peor del caso fué que, mientras que España republicana, como ni el mismo dic Trono lo que posibilitó la revolución pacirepublicanos honrados y timoratos miraban tador don Miguel Primo de Rivera oso ha fica que dio con éste en tierra. Pero esta misasí a su República, y con muy poco más que cerlo cuando la Monarquía. pues al fin. ma facilidade inccuencia del cambio fue mirarla así quedaban contentos por hoy. aunque parezca mentira, cupo a un Gobier parte a que España, trocada ya en Repúbli.
dejando para un mañana siempre futuro el no republicano español la triste gloria de ha ca, se viese libre de odios, es verdad, más no llegarse a esa República para poseeria tan ho ber sido quien aparte de llenar las cárceles porque la transformación que para el común nestamente como la miraban, otros republi. de presos políticos. y no monárquicos, sino de los españoles suponía el cambio de régicanos del jaez de don Alejandro Lerroux, y republicanos, fuese el primero en llevar a la men estuviera llevándose a cabo sin engencon ellos quienes sólo modo de calamidad Península tropas del Tercio Extranjero a fin drar tales odios, sino porque, hablando de inevitable habían acabado por aceptar la Re de lanzarlas a matar españoles en Cataluña un modo absoluto. la Nación española se pública, empezaron a discurrir tretas y a y en Asturias hallaba como suspensa, embelesada y en es.
idear artilugios para que, sin que aparente Los dos períodos que quedan. no descri pera de algún milagro que hiciese el impomente dejase de haber República, no la hu tos, pero si definidos en lo que tuvieron de sible de dejar contentos a todos allí donde la biese ni por soñación en lo que, al fin y al mis genial, dan paso ahora a ese tercer pe causa del descontento eran unos pocos, a los cabo, era lo que hacia que la República re ríodo al cual he llamado yo el de la reafir cuales no habia de tocarse: de acabar con sultara tan apetecible para unos españoles, mación. pasión y consumación de la Repú los privilegios injustos y con las explotacioque venian a ser los mayores en número pero blica. Como quiera que este período, que em nes inicuas, sin que los privilegios ni los exlos menores en numerario, y tan aborrecible pieza con la destitución del señor Alcalá Za plotadores hubiesen de sufrir merma o sujepara otros, que si pocos al contarlos mora y la elección don Man Azaña ción Puesto el caso más concisamensumaban en cambio mucho dinero contante para Presidente, es el que nos suministra los te, ido el Rey. España entro, no en la Repúy en bienes a dinero convertibles. Motivo de antecedentes inmediatos para entender la re blica, sino en un compás de espera.
asa apetencia y de ese aborrecimiento era a belión del general Franco y sus compañeros. Si atendemos a que desde el tiempo de la quello de que la República hubiera de orga bueno será considerarlo con un poquillo más Dictadura el Estado español babia querido nizarse en régimen de Libertad y de Jus de detenimiento que los dos anteriores. buscar el adelanto material por el mismo caticia. esto de que, por cuanto toda la tiIII mino que lo han buscado en la América laqueza del país, sea quien fuere su dueño.
tina gobernantes del tipo de don Porfirio está subordinada a los intereses de la econo Fue don Alfonso XIII, como Rey, vícti Díaz, de don Gerardo Machado de don mía nacional y afecta al sostenimiento de las ma de los embaimientos de una vanidad que. Enrique Olaya Herrera, esto es, por el entrecargas públicas, con arreglo a la Constitu haciéndole sentirse gran general, lo empujó guismo que a cambio de unas cuantas obras ción y a las leyes. resultara estotro de que a ser causante de los desastres en que nu de progreso, más aparatosas que verdadera la propiedad de toda clase de bienes podrá rieron a cientos los españoles en Marruecos: mente benéficas, deja mediatizada la econo.
ser objeto de expropiación forzosa por cau que, induciéndole a suponerse muy capaz de mía nacional, habremos relevado una cirde utilidad social mediante adecuada indem jugar con políticos y no políticos, llevóle cunstancia que conviene tener presente para nización, a menos que disponga otra cosa u primero a subrogar con la dictadura que en la mejor inteligencia del caso que estamos na ley aprobada por los votos de la mayoría cabezó el marqués de Estella la Constitución considerando. Porque cuando en una naabsoluta de las Cortes. y lo de que con a la cual había jurado fidelidad, y a serie des ción potencialmente rica y de rudimentario los mismos requisitos la propiedad podrá ser pués desleal al Dictador, cuando su veleidad y desarrollo industrial entran en son de consocializada. sin olvidar cosas como esa de engreimiento borbónicos le representaron en quista, que así y no de otra manera es como que la República asegurará a todo tratal paso una maniobra llena de sagacidad po ellos entran hoy en día, capitales de fuera.
bajador las condiciones necesarias de una e litica. Como quien con nadie es consecuente problema social de esa nación no tarda en xistencia digna. para lo cual. su legisla acaba por quedarse solo, el último Borbón cobrar un viso distinto del que antes había ción social regulara: los casos de seguro de reinante en España llegó por fin a verse sin tenido: pues no será ya caso, al buscarle soenfermedad, accidente, paro forzoso, vejez, un amigo. fuera de los del círculo de sus lución. de hallarla tal como convenga o la invalidez y muerte: el trabajo de las muje cortesanos: y la Monarquia que en el encar quieran los nacionales. sino de que la solures y de los jóvenes y especialmente la pronaba, convertida cosa indiferente, cuando ción que se adopte resulte aceptable al capitección a la maternidad: la jornada de tra no indeseable, para aquellos en quienes hu tal extranjero.
bajo y el salario minimo y familiar: las va biera ella hallado, de ser otro el Rey, sus na principios de 1936 y siendo Presidente caciones anuales remuneradas: la participa turales defensores frente a adversarios que de la República española don Niceto Alcación de los obreros en la dirección, la admi comprendian desde el republicano cuya difenistración y los beneficios de las empresas lá Zamora, ocurre precisamente lo mismo que renciación con el monárquico era la en estos a mediados de 1931 y siendo Rey de EspaCon la llegada de don Alejandro Lerrous tiempos muy tenue de la forma de Gobierna don Alfonso XII había ocurrido: a la Presidencia del Consejo de Ministros no, hasta los que eran contrarios a la Moluntad nacional, expresándose por medio del empieza ese periodo de negación republica narquia no solo por su forma política, sino.
voto, derroca el régimen. mejor dicho, la voluntad nacional apela por segunda vez al voto ganosa de terminar con lo que supuso hubiera caido con el Trono, pero que, aun cuando ya haya desaparecido éste. sigue en pie. Ahora exactamente como cinco años antes. la coalición que lleva a cabo la empresa comprende los mis variados matices poUN BUEN CIGARRO UNA COPA DE líticos, que van desde el rojo atenuado de los liberales como el señor Azaña hasta el más encendido rojo de los socialistas y el ultrarrojo de los anarcosindicalistas. Hay, empero tres diferencias cuya mención no puede excusarse: Es la una, que los que componen SUAVE. DELICIOSO. SIN IGUAL esta coalición del llamado Frente Popular no son como si fueron los de la que en abril de 1931 acabó con la Monarquia. gentes a FABRICA NACIONAL DE LICORES quienes sólo ha unido el propósito negativo de ir contra algo contra alguien. Es la otra.
San José, Costa Rica que la indecisa República de don Niceto Alcalá Zamora, más afortunada en esto. acaso porque ha sido, por obra misma de su inVO In Angello Cum Libello. Kempis En un rinconcito, con un libreto, ANIS IMPERIAL