334 REPERTORIO AMERICANO precioso madri rencia, se reunia con Angelo Policia literarios y de alta filosofia. la Pobre barquilla mia, de Lope de Anacreonte, se junta a ella la terna, Pico de Mirandola, Botticelli, Como las estrofas de Strozzi te Vega en La Dorotea.
nura, la delicadeza y la naturalidad Marsilio Ficino, Luigi Pulci y otros, nen una música encantadora, he Puede apreciarse el entusiasmo de una oda de Catulo. Damos en coterie literaria con toda probabili mos querido dar aqui aunque sean que despertaron en Coleridge al seguida cuatro estrofas que hemos dad, la más brillante en intelecto que una pocas de ese poema que re asegurar éste nunca haber leido una seleccionado este se haya reunido en un mismo tem cuerda el dolce stil nuovo, y que composición como esa que se hubie gal, insertadas en su propio idioma po y lugar, cenáculo en donde se también sugieren la música delicada ta poses onado tan rápidamente de para no perder los arpegios que broimprovisaban y se leian las dulces de las poesias de Garcilaso, de su espiritu con plena satisfacción; y tan suave y armónicamente de esas canzoni, como se discutian temas Fray Luis de León y sobre todo de que: asi como ofrece el encanto de lineas, ni la pureza del tono: Gelido suo ruscel chiaro, e tranquilo che non fammi, sassi, Rosa il mattin lieve? insegnó Amor di State a mezzo giorno; Orivi, o belue, o Dii. questa mia vaga chi te, como neve, Ardean la selve, ardean le piage, ci colli. Non so, se ninfa, o maga l mio core teco, e la mia vita strugge.
Ond io ch al piw gran gielo ardoe e sfavillo, Non so, se donna, o Dea, Subito corsi; mas si puro adorno Non so se dolce o vec?
Anna mia, Anna dolce, oh sempre nuovo Girsene il vidi, che terbar no yolli: Epite chiaro concento, Sol mi spechiara, e dolce ombrosa sponda Bel Fior, tu mi rimembri Quanta dolcezza sento Mi stava intento al mormorar dell onda. La rugiadosd, guancia del bel vino; In sol Anna dicendo? Io mi par pruovo, si vera assembri Ne qui tra noi retrouvo, Hor come un scoglio stassi, Che te sovente, come in lei affiso; Ne tra cieli armonia, Hor come un rio se fugge, Et hor del vago piso, Che del bel nome suo pin dolce sid: Ed hor crud orsa rugge, Hor del sereno sguardo Altro il cielo, altro Amore, Hor canta angelo pio: ma che non fassi? lo pur cieco riguardo. Ma qual fugge. Altro non suona Ecco del mio core.
no La guerra civil.
el cristianismo, al cual ha querido susti(Viene de la peine 122) tuir con el antiguo culto nórdico. Quién mucho de decir, si es que lo sabian, que mueras a las fuerzas del mal. Ni por un iba a notar tampoco la incongruencia de esos templos quemados habian servido an momento se han detenido a reflexionar si estos paladines católicos que asisten tes de arsenales y reductos a los facciosos. en esta tragedia no le cabe alguna culde moros para ir a la defensa de la civiy que esos frailes, curas y monjas lamen pa a un clero que según las palabras de lización cristiana? No, aqui no había el tablemente asesinados por las turbas du Salvador de Madariaga, es el enemigo menor riesgo de que a nadie se le ocurante los primeros dias de la revuelta más rigido de toda transacción razonable rrieran tales cosas. Aqui era seguro precran en muchos casos conspiradores contra con el espíritu del tiempo en la España dicar la santa Cruzada, y si se hubiera la República y en todo simpatizantes de contemporánea. Para ellos resultaba mequerido hasta expedir y vender bulas la militarada, a juzgar por el gran número de ella. Todos las habríamos tomado de jor y para estas gentes más fácil de ende ellos que tomaron armas en el campo tender la explicación de que las puertas buen grado, aunque fuesen tan falsas corebelde. Pero decimos mal, la verdad es que del infierno se habían abierto y las hordas mo aquellas que vendia el desenvuelto ni esa preocupación hubo de seguirse, pues del diablo se habian vaciado sobre la Pebuldero de que nos habla el Lazarillo.
que los Padres Dominicos de San José no ninsula. Asi todo el mundo estaria disLos cartagineses y la mayoría de los tuvieron empacho de dar a la publicidad puesto, si no a costarricenses inscribirse bajo las superamos en maliuna carta de un su hermano de Galicia, banderas de Mola y Franco, a reverencia ni entendimiento a los rústicos feliFray Luis Montes, la cual podria muy bien ciarles como los salvadores de la fe, como greses de la Sagra de Toledo por donde ilustrarnos acerca de los sentimientos de los nuevos Macabeos, que decia el folle anduvo predicando y haciendo de las sucierto sector de la clerecia española, irre tito aquel en que se publicaron aqui los yas el inmortal echacuervos, uno de los ductible enemigo del régimen republicano últimos discursos en las Cortes de José tantos amos del Lazarillo de Tormes.
En esa carta el benigno Fray Luis Montes Maria Gil Robles y José Calvo Sotelo.
Se relame de gusto ante la idea de que este Discursos que eran verdaderas invitapleito se liquidará de un modo definido ciones a la rebelión y que desataron la tempara uno de los bandos, y como ellos (los pestad que hoy envuelve a España! Al rojos) serán indefectiblemeste vencidos. fin y al cabo, quien podia. deben haSituado en el centro de la ciudad tendremos el gusto de asistir a sus funera berse dicho estos clérigos rebeldes. SOS Teléfono Planta alta: 2861 les. En ella también llama bellaca a Ca pechar entre nosotros de la ortodoxia de Teléfono Cantina: 4220 taluña y las provincias de Levante lea aquellos dos arcángeles guerreros, por APARTADO 1193 les al Gobierno, y dice que el no pudo más evidentes que sean sus ligas con Hiconseguir que le admitieran en el frente, ytler a quien los alemanes acreditan de Precios Reducidos que por eso está, el pobre. añorando la haber limpiado a Alemania de algunos Alimentación Suculenta Hólvora. Palabras bien distintas por frailes y de algunas monjitas. y cuyos San José, Costa Rica cierto de las que vertió el ilustre Carde sentimientos antisemitas alcanzan hasta nal Verdier, Arzobispo de Paris, doliendose de la horrible hecatombe y de que las naciones no hayan podido separar a estos hermanos que se entrematan.
La mayoria de nuestros curas, al conDe la pureza administraliva de San Marlin, habla Mifre en su trario de Monseñor Verdier, han optado Historia de Cap. IX del Tomo 1: por la prédica del exterminio, han orgeUltimo rasgo humoristico de pureza admiuistrativa. Dueño absoluto de la renta nizado peregrinaciones que llamaron de Cuyo, se le ocurrió una vez hacerse sospechar de ladrón. Ordenó que todo peso sella rogativas de paz, pero que resultaron en do que entrase en arcas con las armas españolas, le fuese entregado dia por dia. La orden se cumplin estrictamente, y algunos pensaban que el se apropiaba este dinero.
el fondo incitaciones a la guerra, con viEn visperas de emprender su campaña de Chile, llamó al tesorero y le preguntó si vas al triunfo de las armas católicas y habin llevado cuenta exacta de los pesos entregados, como era su deber y en vista de ella devolvió al tesoro público en la misma especie las monedas de que era depositario, Hotel Metrópoli