World War

REPERTORIO AMERICANO 15 El oficio de la florida picardía lo llama Guzmán de Alfarache, quien soporta todas las adversidades por conservar aquella gloriosa libertad El pícaro soporta con estoicismo sus males y sus adversidades. Ha aprendido a mirarle a la vida cara de hereje. no esperar mucho de ella y a no darle nada. Paciencia y barajar dirá a lo sumo cuando las cosas empeoren.
Así es en la literatura y así es en la vida.
Así estuvo en la España del siglo XVI y así vino a América y permanece en ella.
Yo lo he visto mucho en mi tierra. Recostado de los portales de un mercado, mirando con indiferencia las gentes que pasan, ignorante de su ilustre pasado y de las nobles raíces de su filosofía, pero lleno de orgullo de su dignidad humana y dispuesto a no renunciar a su libertad a ningún precio. Se acerca a los que juegan, se acerca a los que se embriagan. los que parecen tontos que son los más. de un modo suelto y poético empieza a hilar su mentira y a imaginar su engaño.
Si le preguntan lo que sabe hacer dirá con un gesto risueño y sabio que es todero. Toero que es como dice. dice verdad, no porque sepa hacer de todo, sino porque sabe en todo momento lo que hay que hacer para salirse con la suya. Para comer sin trabajar y sin perder la libertad.
Para enseñarlo a trabajar habría que reformarle alma. Cambiarle la tradición cultural que ha formado. Verá a los otros trabajar con lástima. No supo sembrar en España, ni quiere sembrar en América. Para él los campos no son sino caminos y posadas. Cortos paraderos para la aventura y el engaño. Lugares para sacar a la luz del candil las barajas o los dados.
Su traje ha cambiado en cuatrocientos años pero su alma sigue siendo la misma vieja alma del pícaro castellano. La de Lázaro, la de Pablos. Lee poco y no sabe sino lo mucho que la vida le ha enseñado, pero si tuviera más letras explicaría su caso con las mismas palabras y el mismo gusto de aventura con que lo hacía Guzmán de Alfarache: Viéndome perdido, comencé a tratar el oficio de florida picardía.
Nueva York. Agosto de 1949.
NUESTRA CIVILIZACION El progreso maquinal (En El Tiempo de Bogotá. Septiembre de 1949. El actual sistema de producir, cambiar y hombre actual en presencia de los nuevos indistribuir los productos de la industria y de ventos. El hombre de hoy todavía no ha emotras actividades humanas tiene entre otras ca pezado a desconfiar de la máquina aunque alracterísticas la deplorable en verdad de ponerse gunos filósofos, Spencer entre otros, han exmuy a menudo en contra de lo que llamamos presado sus aprensiones con la debida reserva.
progreso, de acuerdo con las necesidades y as Pero como para explotar las posibilidades y piraciones de la civilización corriente.
objeto de una máquina, como el motor Diesel, Hay un decir, aceptado por algunas auto por ejemplo, o un agente físico, como las onridades en la materia, según el cual los chinos das hertzianas, es menester emplear grandes cafueron un pueblo de grande inventiva hasta pitales, las empresas ocasionalmente fundadas un preciso momento de su historia. Habían con este fin, viven en angustiosa expectativa realizado grandes inventos así en las ciencias por el temor de que uno u otro día se invente como en las artes. Se les atribuye la invención un motor más eficaz y más barato que el imade la pólvora, de la porcelana, de la brújula, ginado por Diesel o una energía más poderosa del cultivo del gusano de seda y de la produc o de más sencilla manipulación que las corriención de telas de esta fibra animal. Un día, sin tes electromagnéticas. Sucede en efecto muchas embargo, dice la historia o la leyenda o las veces, que tales empresas de naturaleza humados a la vez un sabio chinesco juzgó oportu na, pues están regidas por hombres bajo el no prevenir a sus compatriotas acerca de los sistema de la competencia, se oponen con todo peligros adjuntos a la inventiva desenfrenada su poder a la fundación de nuevas empresas y éstos, atentos a los consejos de la experien capaces de rivalizar con ellas. Celosas de su cia del saber, resolvieron en su modestia fi clara superioridad dichas empresas ponen de su losófica renunciar para siempre a los peligros parte lo posible para evitar que nuevos invenenvueltos en la tarea de arrancarle secretos a tos, especialmente aquellos de los cuales imala naturaleza y de valerse de las leyes físicas y ginan o saben ser superiores a los por ellas de la resistencia o capacidad expansiva de al explotados, se pongan en uso y explotación.
gunas substancias para crear nuevos modos No vacilan para esto en emplear grandes sude producción o de ahorro de esfuerzo huma mas para comprar las patentes no con ánimo no.
de explotarlas, sino para evitar que otros usen Por los años de 1872 apareció en Ingla de ellas en detrimento de los inventos conociterra, imaginada por Samuel Butler, una nove dos.
la de título Erewhon, palabra que invertida, Es sabido de cuantos se interesan en semecomo casi todos los nombres propios introdu jantes estudios (y en estas columnas se ha cocidos en ella, significa En ninguna parte. inentado el hecho otras veces) cómo al ocupar Este libro profético discretamente humorístico a Berlín las tropas de los Estados Unidos, fuey lleno de la ciencia del hombre y sus anhelos ren descubiertas en las oficinas de la respectiva y desvíos, es la descripción minuciosa y en administración varias patentes de lámparas de partes risueña de un país donde con gran pre gasolina compradas, las patentes, por las comvisión se llegó en un momento dado a la con pañías de electricidad, sin el menor deseo de Ficción fundamentada de la necesidad impo explotarlas, ya que su uso lastimaría seguranente de suprimir las máquinas para salvarse. mente el negocio por ellas establecido. De una En ese pueblo la enfermedad era un crimen y eliminación semejante fué testigo el presente la religión un sistema bancario. Pero en cuan escritor en Londres. Un empleado de una cato a la manera de considerar las máquinas el sa constructora de una máquina para oficios libro tuvo caracteres de profecía.
domésticos ideó una combinación más sencilla Tiene relación un tanto forzada con el y ofreció su invento a la casa constructora.
pensamiento de aquella novela la situación del Fsta lo compró por una fuerte suma para evitar que su inventor fuera a ponerlo en manos de otra empresa. Pero no lo compró para explotarlo sino para arrinconarlo.
Ocurre que muchos de estos productos del ingenio inventivo comienzan por aplicarse a la destrucción de seres humanos o animales.
El principio de la compresión de los gases fué usado por el indio americano para la propulsión de proyectiles envenenados o no contra sus semejantes o contra las fieras y aves, sus enemigas o su posible alimento. Más cerca de nosotros se usó la fuerza expansiva de los gases para acortar las distancias y aliviar de la cargas los hombros del hombre y de las bestias.
La energía que nace de la combustión interna primero se uso para las armas de fuego contra los enemigos del hombre y de su patria que para los usos mecánicos en el motor de Diesel. Atañe observar que el rigor letal de alguna de estas invenciones no se usa siempre en las guerras en toda la extensión de su poder destructor porque el hombre es un elemento explotable. Llega un momento en que la eliminación de unidades humanas puede ser tan cuantiosa, que venga a dañar a la industria y el comercio por la restricción de los mercados. Diez o quince millones menos en una nación europea pueden contraer las ventas para jas empresas productoras. Así hemos visto que en la segunda guerra mundial, de mayor número de naciones empeñadas en un contraste armado de seis años de duración, hubo menos Lajas humanas que en la primera, más corta en dos años y llevada a cabo con armas menos perfeccionadas. Después de todo, la inteligencia humana, asesorada por el interés inmediato de los negociantes suele dar muestras de poseer también sentimientos plausiblemente huinanitarios.
En el evento de la bomba atómica la energia a que debe su eficacia asoladora ha sido usada primero contra el hombre y se está meditando todavía en la conveniencia de dejar Ibre ese principio a los transportes y a las artes mecánicas. Las grandes empresas industriales miran esa posibilidad con desconfianza.
Desaparecerían multitud de negocios industriales, si llega a ponerse en práctica la energía atómica, como elemento productor de fuerza mecánica, piensan los explotadores de muchas industrias; y quedarían sin trabajo muchísimos obreros añaden los gobiernos constituícos inspirados también en sentimientos humanitarios.
Ya se habla de que la industria de los tejidos está amenazada y con ella las fibras naturales como el algodón, la seda y la lana. La producción de fibras artificiales de sutileza, clasticidad y fuerza optativas pondrán fuera del mercado y de la industria textil a los actuales usufructuarios de los viejos sistemas. Es catural, es humano, por lo tanto, que éstos usen de toda su influencia y poder para conservar empresas de que derivan, entre otras cosas tal poder e influencias.
Es un hecho histórico la resistencia eficaz ejercitada por un tiempo en Estados Unidos por las compañías privadas de telegrafía eléctrica al establecimiento de la comunicación inalámbrica.
En esta vía y con varios procederes se ve cómo el interés privado es humanamente opuesto, dentro de sus aspiraciones y de su proyecto, al progreso material o a los que conocemos prácticamente con ese respetado y expedito nombre. SANIN CANO. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica