Omar Dengo

REPERTORIO AMERICANO 167 Las cosas de la Provincia Colaboración de Jorge CARDONA II Registramos en estos comentarios un hecho insólito: la consagración de mi Provincia (Costa Rica) al Corazón de Jesús, que llevó a cabo el ex Presidente señor Otilio Ulate. Consumado el hecho, acudimos con nuestra protesta a las oficinas de Diario de Costa Rica, de que él es dueño, creyendo que, a pesar de que el periódico ha sido tribuna acogedora para el pensamiento libre, que se enfrenta a los actos de los Gobiernos que equivocan el sentido esencial de su misión, que no es otra que la de valorar al Hombre a fin de darle actividad creadora, la protesta no se publicó.
En ella lemantábamos como ahoraque Costa Rica haya perdido, quizá por medio siglo el magnífico renombre que tuvo hasta ayer de permanecer exenta a las argucias del clero católico, colocándose debido a la funesta ceremonia, en situación de atraso, y de que un capricho inexplicable haya puesto sombras en el camino político del referido gobernante.
Creemos que el pacto moral palabras con que otro periódico calificó la aventura o desventura se llevó a cabo sin la consulta debida a la opinión pública o, en su defecto a la Asamblea Legislativa que, aún cuando por descontado hubiera aprobado los santos designios del Mandatarios, la cosa hubiera, al menos, recibido el espaldarazo acostumbrado.
Observando el paso del clero católico, podemos asegurar que a la Provincia le corren vientos de yermo, de esos quc hielan el ánimo. Por todas partes hay ahora conventos y más iglesias, y en todas las dependencias oficiales, casi sin excluir una, sin contar con innumerables oficinas públicas, nos encontramos con las feas imágeres del Corazón de Jesús, con sus velitas encendidas día y noche. En el edificio de Correo y Telégrafos, en las Aduanas, en el Ferrocarril Nacional y hasta en los patios de la Casa presidencial se ha ido con ellas.
Pobre Provincia mía! y cómo se fueron al olvido aquellas lecciones de otrora, dadas con el ejemplo y con el Libro por Maestros y Varones como fueron estos distin.
guidos costarricenses: Julián Volio, Salvador Jiménez, Próspero Fernández, Mauro Fernández, Omar Dengo, Ricardo Jiménez Oreamuno, hombres todos que no supieron ni entendieron de simulaciones para las cosas del Espíritu. ahora, que nos asisten mentores que no saben nada de Dios, pero que no comen carne los días viernes, como decía Gonzá lez Prada en su tierra, esperamos que la imagen del Corazón de Jesús presida muy en breve las sesiones de la Asamblea Le.
gislativa, con lo que habremos abierto la puerta a otro orden de calamidades que, por sabidas, no merecen del análisis, pero sí de la voz alerta, que repudia la vieja tradición en la Provincia mientras camina el Pueblo a pie desnudo e ignora otros afa.
nes de elevación a que ya nos hemos de referir. 9 3 cuando y distraer el ánimo, Camba. Como lengua recuerdo ahora a Bueno y a Bello.
Hay otros, en cambio, que pasan por hablistas y estilistas y en rigor no son sino ebanistas de la lengua. Dedícanse a una labor de marquetería, con retazos e imitaciones de nuestra peor época, el siglo XVII, con voces y giros que huelen a latín indigesto, no romanceado. Este nuevo preciosismo me apesta. Una lengua sin incorrecciones, sin transiciones bruscas, sin anacolutos, es una lengua puramente escrita, es decir, muerta. Lean a Santa Teresa y verán que cualquier dómine Valbuena encontrará allí una falta de sintaxis por línea. es que aquella mujer admirable hablaba con la pluma. este nuevo preciosismo hace estragos en España y en la América de lengua española ahogando bajo sí la lengua jugosa, máscula, recia y apasionada. Puesto que entre ustedes hay un argentino, el señor Luque, no tiene sino comparar la lengua no ya hablada, declamada, enfática, pero recia, apasionada y viva, de Sarmiento, con el estilo sudadísimo de Lugones en alguna de sus obras. No en todas porque otras veces se abandona y escribe como debe de hablar, es decir, bier. no quiero poner ejemplos de españoles. Andrés González Blanco sentenciaba una vez que son nuestros tres primeros hablistas, tres de esos ebanistas de marquetería pseudo clásica estilo siglo XVII decadente.
No me atreveré a concretar mucho pero como lengua de los que más me gustan son Da. Emilia Pardo, Bueno, Bello y el ya casi retirado Troyano, el veterano Nackens y algún modesto periodista que no firma. ahí, en esa ciudad de Barcelona, tienen ustedes a uno de los mejores escritores en lengua castellana, y es Juan Bar.
co, el director de Las Noticias. La de Barco es lengua viva y no artificio. Lo era también la de Nogales, como lo fué la de aquel maravilloso escritor que fué Alarcón.
En América es acaso en Colombia y Venezuela sobre todo en la primera, donde mejor se escribe el castellano. Rodó pasa por un gran estilista, pero es artificioso y rebuscado. En la Argentina, Rojas según se va curando de ciertos preciosismos, escribe llano y conciso.
Pero quién sea hoy el mejor cronista no les puedo decir porque los conozco nal y de algunos que pasan por ser de los me.
jores y que tienen partidarios que los disputan a cada uno de ellos por el primero sus admiradores respectivos, de algunos de éstos, digo, apenas conozco sino dos o tres crónicas que leí y he olvidado.
Les saluda su afmo.
Una carta inédita de don Miguel de Unamuno (En Rep. Amer. Como hace algunos meses, un hijo de Don Miguel de Unamuno, solicitó por intermedio de Repertorio Americanocartas escritas por su padre a amigos de Hispanoamérica me permito enviarle al amigo García Monge, una que poseo des.
de hace 41 años, en que el entonces Rector de la Universidad de Salamanca, sir.
vió de árbitro en discusión sostenida poi el suscrito, en El Liberal de Madrid, con el literato Gómez de Baquero, a propó.
sito de Enrique Gómez Carrillo.
de, etc. lo veo de higos a brevas. Hay cronistas a que no leo aunque alguna vez le.
yéndolos me hayan gustado. Los hay que tienen un estilo suelto y fácil y una lengua viva, que hablan con la pluma, pero me dicen tan poca cosa, que apenas los leo. No me gusta leer sólo para pasar el rato y la amenidad cuando no tiene algo más debajo, me cansa pronto. Una crónica de Carrillo, gr. cada ocho meses no me está mal, pero cada lunes me aburriría. es que siempre he creído que una ardilla dando vueltas en una jaula es más pesada que un elefante a marcha lenta. Be.
navente es acaso uno de los que más me gustan pero también a la larga me fatiga algo su ingenio sutil y su malignidad fría.
Le falta pasión. Para divertirme de vez en Salamanca, 19 II 12 Señor don Mario Santa Cruz y compañeros Barcelona (Fdo. Miguel de UNAMUNO Les agradezco muy vivamente la confianza que en mi juicio crítico ponen ustedes, señores míos, pero no estoy en disposición de poder responder derecha y redondamente a su consulta. no lo estoy porque para decidir cuál sea hoy el mejor cronista en lengua castellana es menester ante todo, me parece, conocerlos bien sino a todos por lo menos a los más celebrados. yo apenas los conozco. Leo muy poca literatura castellana contemporánea y po.
quísimos periódicos. Repaso en 10 minutos La Correspondencia de España para leer noticias, los lunes El Imparcial y algún que otro diario de provincias que ojeo.
El Liberal, gr. donde más crónicas se publican (Carrillo, Zozaya, Cortón, Répi.
CASIMIRES INGLESES FISCHER 100 lana Enorme surtido ALMACEN CASTRO QUESADA TELEFONO 3275 Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica