Soviet

30 REPERTORIO AMERICANO elefantes que con la trompa realizan tan hacerdosa se le buscara un príu to de los relatos para dejar hablar todas las actividades del hombre? cipe, es decir, un ocioso del antiguo únicamente a las bellas ilustraciones de los álbumes de Benjamín Rabier, régimen.
en colores, algunas a la altura de auel mago que dibuja la caricatura, lleténticas obras maestras. Lo ficticio na de gracia, de todos los animales, y Por lo que hace a las adaptaciones lo verdadero, lo sabio y lo candorolos hace hablar como seres humanos?
de muchos de los grandes libros, se ha hecho la observación de que éstas los abuelos y el alma de los niños, se so, la fábula y la historia, el alma de De todas estas joyas literarias y resultan a menudo verdaderas carica. armonizan en forma tan perfecta que pictóricas podría decirse que son distracción apropiada para niños de a el ejemplo, profudamente humanos palabras y penetran hasta lo más returas. Don Quijote y Sancho, valga en sucesiones de imágenes hablan sin 70 años. La verdad es que no hay límite de edades para gozar del ingeen la obra de Cervantes, no son, en cóndito del alma infantil.
su versión infantil, nos dice Brauner, nio y la belleza.
más que dos locos a los que acontecen Sobre decir que no nos referimos este propósito es interesante aventuras bastante tontas.
aquí a esas ilustraciones mcdernistas comprobar que Perrault y Audersen que deforman la realidad como lo haSea como ello fuere se calcula que cen ciertos pintores contemporáneos, y Grimm y Schmid están hoy en los cinco continentes. La Caperucita Ro.
100 millones de libros para niños de y que el niño, que nada sabe de snoja es negra en Africa, amarilla y de las más diversas procedencias se pu bismos, ni surrealismos, di desequiojos oblicuos en el Japón y en la blican hoy en Rusia. La competen. librios, ni desniveles, ni enigmas China, color aceituna en La India, y del mundo se manifiesta, como lo der la belle za en clave de esas crea cia entre las dos grandes fortalezas abstraccionistas, se queda sin entenblanca en las naciones de Occidente, vemos no únicamente en las coaas pero es la misma Caperucita y con ciones que sólo son descifradas por el mismo lobo que la engaña y la atañederas a la guerra.
los iniciados. Es cierto que a veces devora en esas ilustraciones se alcanza a enEstos cuentos upiversales compiten trever su espanto, y crean desarreCada país expresa la intimidad de en belleza expresiva y en buen gusto su alma en estas adaptaciones. No literario en los diversos países. Tene. glos nerviosos en los pequeños lectores que todavía no tienen la madurez puede uno menos de sonreír al obser mos la impresión de que los dibujannecesaria para poder reír de ellas.
var algunas de ellas. En Rusia el tes de los tiempos modernos han su Prívcipe que se casa con la Cenicien perado en delicadeza y fuerz emotiva ta es un obrero rpulento, valer so a los escritore. Tal ha sido su acierAgustín NIETO CABALLERO y trabajador. No entenderían los pe to y tal la gracia de su expresión que queños del Soviet que para una niña a menudo pudiera suprimirse el tex Bogotá, Febrero de 1958.
DEBUSSYANA EL DOLOR AJENO Florece; se abre en el pecho como otro corazón junto al dolor nuestro.
y membrana permeable para el dolor ajeno.
Lenta suavidad me circunda resbala como gotas de arpa cayendo sobre el agua.
Humeda caricia larga de ávidos dedos largos untados en la espalda; en desiertos de la piel, y en los cauces de la sed del otro lado del alma.
Crecen los silencios unidos dialogando lo que no se ha dicho; desvanécense contornos, y se llora la lágrima ajena cuando la nuestra se seca.
Dolor que se busca y se encuentra a sí mismo al ofrecer alivio.
Dolor que se encuentra sin cesar y se resigna a no buscar olvido.
Sumergidos rumores de caracoles olvidados en mares interiores.
Cortinas diáfanas de peces transparentes e incoloras medusas de mí, me separan. el lánguido estar de las horas difusas se derrama, mientras se deslizan sobre camas de algas amorfas nostalgias.
Hay el dolor del pan y del espasmo; del huérfano cariño; del diálogo tronchado y el progreso prostituido.
Hay dotores hembras, hay dolores niños y varones humillados.
Hay dolores mendigos, plenitudes devenidas dolor, al no encontrar la súplica tendida.
Hay el dolor del plazo; de la cárcel del espacio, y el dolor de no saber si somos nosotros el ser o es el ser quien nos es.
Hay dolores espirales, concéntricos, circulares, dolores con agujeros que nuestro yo vuelve plenos.
Dolores que conocemos que ya no son ajenos.
Cuando el dolor llega, se queda; una atmósfera propia entonces nos individualiza: ceniza en saliva suspendida; cortina de sal derretida; cadáveres de otros que fuimos y sudor cristalino disueltos en neblina.
Atmósfera inviolable del intimo universe Sol Rubén de la BORBOLLA Sol Rubén de la BORBOLLA Acapulco, Febrero de 1957.
México, Agosto de 1957. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica