120 REPERTORIO AMERICANO 23238 fícil con Jorge Ubico, de cuyas garras lo gró escaparse para recostarse en esta Cos.
ta Rica pródiga en hospitalidad y afecto.
De esto hace 15 años. Desapareció el ti.
rano y Edmundo no pudo regresar, porque con el tiempo y la colaboración de este pueblo de artistas había hecho realidad un ideal suyo: reunir en completa armonía el arte de dos continentes, Europa y América, para que juntos, en un lugar de San José que se llama El Sesteo. muestren al viajero sus maravillas.
Pasase LA REALIZACION. Esto no es obra mía. dice Edmundo; es el resultado de la colaboración de los ar.
tistas Paco Amighetti, Manuel de la Cruz González, Carlos Estrada y el eminente decorador español Eugenio Penón.
Cuando platicamos, recorremos los distintos salones que forman uno solo y los cuales están separados únicamente por los arcos y la distinta decoración. Empezamos a ver lo que tiene el estudio, sitio que ocupa la orquesta y el cual está contiguo a la Pista de Baile.
Dos murales de Amighetti llaman nues tra atención y, al lado, el cuadro decorativo de costumbres típicas, original de Ma nuel de la Cruz González.
En la pista encontramos solamente cho rotegas: puerta y faroles de hierro forjado hechos en México por el catalán Gabe lich y en los cuales figuran las salaman.
dras y los jaguares sagrados de los indíganas. Diseminados en las paredes los famosos platos chorotegas diseñados por Juvenal Valerio y pintados por Carlos Estrada, los cuales representan El Genio de la Tierra. La Serpiente del Bello Plu, maje y La Figura Humana.
Complementa este decorado especial un significativo juego de luces, con el cual se puede simular desde una puesta de sol, hasta un amanecer brillante, según sea la música que se ejecute, a cuyos acordes puede atenerse el artista para efectuar los movimientos luminosos. Según afirman entendidos en la materia, este salón Chorotega es único en el mundo.
La Puerta Sevillana del Salón español de El Sesteo.
Llena de gracia y levedad en medio de su reciedumbre hispana.
Desaparecerá El Sesteo. Por Erick GARZA (Es un recorte de La Prensa Gráfica de San Salvador. Marzo 29 de 1953. San José es una ciudad en cuya tranquilidad se encierran bellezas imponderables; larga larga y ancha ancha, su amplitud se traspasa al espíritu de los moradores, la mayor parte de los cuales ha comprendido el valor de la virtud, manifestán.
dose ésta en una inmensa floración de bondad.
Muchos y variados son los atractivos de San José: parques, avenidas, pueblos ale.
daños, campos de deporte, piscinas, etc.
pero tiene algo que no poseen las otras ca potales centroamericanas: un centro de es parcimiento de tal naturaleza que da goce al cuerpo y al alma: El Sesteo.
UN EXILADO, UNA IDEA Edmundo Fernández es un tipo especial de español. Desde hace muchos años vaga por América. Su constante contacto con las cosas nuestras le hizo amar este suelo privilegiado e impresionado su espíritu sensible por la tierra del quetzal, instalóse alla, pensando que su caminata había concluído.
Pero he aquí que su misma inquietud de joven impetuoso lo colocó en posición diCreated Patio español de El Sesteo. Un tesoro de América. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica