Democracy

266 REPERTORIO AMERICANO Romance de Agapito Cascante esta nueva institución de la Orden de la Liberación para premiar servicios como los prestados por el Profesor don Federico de Onís. Se premia en el distinguido recipiendario no sólo su labor en defensa de la cultura y propagación de la cultura hispánica sino su abolengo Republicano y su defensa de la democracia en todos los terrenos y cedió la palabra a Por Alvaro Cardona Hine (En Rep. Amer. Este admirable poema, escrito por mi hermano en Ellensburg, Estados Unidos, ha sido realizado en circunstancias que no deben pasar inadvertidas. Alvaro salió de Costa Rica siendo aún niño, y se ha formado en ambientes extraños a su naturaleza idiomática. Pero la ausencia del español y el poco o absoluto contacto con ambientes literarios nuestros, lejos de detener en el su impulso verbal, lo han acrisolado, al extremo de que nos asombra con un poema en donde por cierto la fluidez expresiva corre a lo manantial. Alvaro es un artista genuino que ha dedicado la mayor parte de su tiempo a la investigación musical, y no precisamente de letras. Ultimamente ha escrito poemas, y de ellos el primero que llega a mis manos es este romance, lleno de valores internos y externos, de imá.
genes frescas y animado de un prócer sentimiento nativo. Es el caso que la patria se ve más cerca desde lejos. El pescador no sabe de qué color es el mar, pero pónganlo tierra adentro y verán como acuerda de los matices más íntimos de Thalassa.
Por otra parte, este es un poema de tema costarricense que no incurre en el aldeanismo, con todo y ser un aldeano su héroe. Sépanlo ver con ojos limpios los poetas nuevos de mi tierra.
Alfredo Cardona Peña.
México, Don Federico de Onís Las primeras palabras de tono vibrante y emocionado fueron para afirmar que es republicano y antifranquista desde antes de nacer y que lo seguirá siendo siempre y lo llevará hasta mucho más allá de la muerte. Expresó que afirma lo primero pues recuerda los ideales de su padre a los que rinde un sentido recuerdo y por ello su formación es la de verdadero demócrata como ya se dijo en el acto del pasado enero. Esa herencia la cultiva y asegura que hace 38 años que no visita a España y que no lo hará mientras España no sea España. aclaró que no puede reconocer como España a la que dirige con escarnio para la cultura ese dictador militar que es la antítesis de lo que vió y estudió en la Universidad de Salamanca. Para el orador el General Franco es un tirano que hizo abandonar España a valores como Machado que murió en el destierro y que le recomendo defendiera las Instituciones como lo hizo con su palabra y su pluma en todo momento a partir de la subversión de 1936.
Recogió Don Federico lo dicho por los oradores que le precedieron en el uso de la palabra y recordó la formación demo.
crática de Bowers y su magistral forma de ayudar a la cultura hispana. La afir.
mación categórica de Onís de que no retornará a España ni después de muerto mientras exista la dictadura y su afirma.
ción de que representamos para él la verdadera España fue muy elogiada y con trastada con otras conductas que ceden al propio interés o al halago. La recia personalidad castellana de Don Federico de Onís representa uno de los grandes valores de nuestra obra todos gullecemos.
se nos enorto Recepción Final Terminado el acto oficial se ofreció una recepción a los organizadores del acen donde pronunciaron breves pero sentidas palabras los Sres. Avilés y Arro.
yo, Víctor Simón y otros. La ilustre ac.
triz Marita Reid declamó algunas poesías y el recitador cubano Eulogio Peraza, dijo en honor de las dos personalidades homenajeadas los mejores poemas de su repertorio. Un grupo de jóvenes del Club España con el compañero y paisano Ovi.
dio Díaz obsequiaron a don Federico con cantos y canciones populares. Onís es un amante del canto español y ha coleccio.
nado en la biblioteca del Instituto Hispá.
nico de Columbia University todo cuan.
to ha podido recoger. Esto es prueba de que lo que intentan los fascistas con Sán.
chez Bella y la Sra. de Castroviejo es in.
necesario pues lo hicieron los hombres de la República. Unas palabras de des pedida de Dorado y Juan Salorio pusie.
ron fin al acto en que todos los presentes se honraron en estrechar la mano de don Federico de Onís que en breve sale para Puerto Rico. Porque en la vida de estos hombres, y cuando se ven muy angustiados por la situación económica. 1900. y tántos.
iy el conocer a Agapito, Golpe de oído al cráneo!
peón que fué fué peón cuando vivo Golpe de alas y de muerte!
y que vive todavía Erame niño en la tierra porque de muerto lo echaron verdinegra de mi padre, en panteones de mañana!
sin que fuera más que un niño soltándome del silencio, Peón de mi padre Agapito, escuchando el viejo gozne lo recuerdo única imagende los marea imprevistos, trabajando bajo un clima y el rumor interminable de neblina hecha jirones.
de cada abeja en la lluvia, Peón de mi padre Agapito cuando ocurrió este suceso desde que amigos lo fueron, que recuerdo con las penas lo recuerdo en las afueras de la memoria, y que canto de luna y sol como nube, con lentos rumbos de fuerza, sol húmedo y nube espesa por tratarse del humilde toda vapor, toda niebla, campesino de mi tierra.
esa niebla que no entabla más que un eco de cerillos.
Erame niño de ancianos ¡Qué voz tan pequeña tiene en el aire y en el agua, para todos los oídos cuando mi padre cuidaba la sombra de sus murmullos!
de la res y los corrales Madrugaba con señales y lograba un presupuesto de puntual fogata negra, de geranios en la niebla, y negros eran los ojos de alimentos subterráneos: del café que lo miraba; yuca, tiquisque, camote.
madrugaba a los compases cornucopias de tan leve de girasoles en cinta, y sabia resurrección, cuando poca era la lumbre que llegaban a la mesa y huecos eran los jarros con filamentos de ángel, del inseguro alimento.
de pájaro y su congoja, Peón de mi padre Agapito, y tanto que la cosecha último sueño de vacas, desprevenida y alerta apagaba a la redonda del siempre y nunca entre siempres, el obstáculo del grillo iba guardando en la sangre y dejaba a cada paso el murmullo de los ríos adaptadas las conquistas traspasados de misterio, atmosféricas del sapo, la carreta, el monte, el eco (Echa, húmedo filósofo, con su horizonte de gritos, el gong de tus amorios una loca en los cipreses al saco roto del agua.
jugueteando con las aves.
Que se inicien tus burbujas. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica