CommunismWorld War

REPERTORIO AMERICANO 269 VO Mi personaje inolvidable ran ido en busca de treinta francos para llevarlo al Hotel Inglaterra, que era (Viene de la pág. 264)
superior al de La Paix. Recuerdo que el Doctor Espinosa estuvo decidor y festiera un extranjero que daba crédito a un en la que sobrestimando mi adhesión a en medio de obreros y estudiantes esfuerzo visto con tanta indiferencia por su hijo, me dice En la ciencia tuve fe pobres en el restaurante de la Rue Calos hombres de mi patria; pero las cosas para que reconfortara a Ricardo, ignorouge, a un franco el cubierto.
no habían ocurrido así, sin el padrinaz. rando que también le asistía el consuelo Ricardo acababa de obtener con las go del beau garcon como llamaba el del corazón brindado por su amistad.
más altas notas que confería la UniversiProfesor Laskousky, a Ricardo Moreno Muchos años después cuando el dolor dad, su diploma de Bachiller en Ciencias Cañas.
en forma cruel visitó el hogar de RicarMédicas. Para qué decir que tal éxito En la Pensión Masson, Rue Lombard do entonces médico y sintió que no despertó en él ni el más ligero sentiNº 4, donde yo vivía, nos reuníamos dia las lágrimas discurrían abundantes por miento de vanidad? Poco tiempo desiamente alla por los años 1911 1914 sus mejillas, de su pecho varonil brotó pués, un compañero suyo, alcanzaba las Ricardo Moreno, Alejandro Montero y la misma sentencia Qué cobarde soy mismas calificaciones para optar al misyo. La cita era a las cuatro de la tarde y dejó, que sin exteriorizarse la angustia mo título; Ricardo, entonces, sacaba en y su objeto tomar café dentro de la más royera sus entrañas.
hombros a su compatriota, manifestanencantadora camaradería. Ricardo pre Ricardo Moreno como introverso do una alegría que él mismo no había paraba el café que era para él y para era capaz de concentrarse en sus estu evidenciado al alcanzar éxito similar!
mí la más deliciosa de las bebidas; yo dios que lo hacían uno de los mejores Sin embargo, Ricardo, joven correcto iba en busca del pan, la mantequilla y estudiantes de la Universidad, haciendo y estudiante modelo, estuvo a punto de la confitura y don Alejandro, así llama cago omiso del mundo que lo rodeaba; ser expulsado de Ginebra, tan celosa bamos en obsequio a su seriedad al hoy y como extroverso. procuraba los más del estricto cumplimiento de sus leyes.
doctor Montero Segura, era el encarga agradables ratos a quienes en su com La razón? Un día Ricardo, rumbo a do de la limpieza de la modestísima va pañía estaban y le permitía darse por la Universidad, sorprende a un fornido jilla. Mientras tomábamos el café, re entero a la amistad y a la patria con sacuerdos de la patria lejana, de la familia, crificio de sus intereses, de su salud y mozo ultrajando de palabra y hecho a una mujer, desconocida para él, pero y con más frecuencia, conjeturas sobre de su vida.
una mujer. Ricardo se exalta y sin medir la escasez de numerario o su tardanza Una noche, viene Ricardo a mi casa las consecuencias, castiga severamente en llegar a nuestras manos. Esta zozobra con una cara más placentera que de cosal cobarde. El asunto va a los Tribunano alcanzaba a don Alejandro, cuya ren tumbre. El Doctor Espinoza, que estaba les; y aunque Ginebra no tolera a un ta era mayor que las nuestras o que la en Ginebra de paseo, lo había invitado extranjero tales actitudes, el gesto era nuestra, pues entre Ricardo y yo no exis a comer en el Hotel de La Paix, uno de tan noble y desinteresado que las autotía lo mío ni lo tuyo. El domingo era los mejores de la ciudad y nosotros coridades, no sólo perdonan, sino que concosa distinta: otros se ocuparían en ser nocíamos mucho. por fuera. Ricardo, gratulan al transgresor de sus leyes.
vir un café superior en calidad y mejor para corresponder a la invitación quería La guerra mundial puso término a presentado; hacer los mandados y lavar que yo los acompañara. Pero La Paix nuestra vida de colegio, vida de congolos utensilios. Los domingos encontrába es muy caro. le argumenté yo. No, mos un pedazo de tierra costarricense en me respondió Ricardo: almorzaremos en jas y pasajeras alegrías, de ilusiones y contrariedades. Ricardo salía para París el generoso hogar Martínez Nussbaumer. el mismo hotel donde yo habitualmente El tiempo volaba alli oyendo a don Gre almuerzo. y en un modestísimo restaua los hospitales de guerra donde al lado del eminente cirujano Desmaret, debía gorio, profesional honorable y caballero rante de la Rue Carouge, nos reuníamos so, hacer recuerdos del pasado, sus via al día siguiente el Doctor Espinosa, Mo alcanzar la pericia que haría de él el primer médico de su patria, y pocos meses jes por Europa y anécdotas de la Admi reno y yo. Así era Ricardo: simple, nanistración Soto; a doña Martha, dama tural, espontáneo, enemigo de artificios.
después salía yo para los hospitales de Lyon.
bondadosa, inteligente y severa; oyendo Otros más vanidosos, o no devuelven al los cuentos y hazañas de Ricardo (Mar Doctor Espinosa su invitación, o hubieSan José, Costa Rica, 1954.
tínez. las fantasías y exageraciones de Oscar; los sutiles comentarios de Margarita y la fogosidad bulliciosa de Claudia El caso de Guatemala y Fernando. Con frecuencia, alrededor de la mesa había una compañera más. Testimonios recogidos para el Rep. Amer. la mutter, la madre de doña Martha, una preciosidad de viejecita, producto Rodeando a Guatemala neto de la encantadora Suiza alemana.
Con el Dr. Nieto Caballero La figura central era siempre Ricardo Moreno: su inteligencia clara; su juven(En El Espectador, Bogotá, 29 VI 54)
su prestancia, se imponían Creo, me dijo el doctor Nieto Ca. timo modelo con bombas que revientan siempre. mí me dominaba un comple ballero, y eso es consolador, que en toda la frágiles habitaciones de sus hijos, es jo de timidez del cual no me he podido la América Latina, a pesar de la gente un pueblo que en moral y en derecho de desprender jamás. Pero oh las cosas de vendida, de los hijos del odio y de los be estar acompañado, si no es posible la vida. Algunos años después debía falderillos que en todo rancho salen la ayudarle de otro modo, con los votos de repetirse una escena similar a la de aque drando cuando pasa la gente, ya se ha todos los hombres de bien, porque logre Ila mañana oscura y fría del mes de no ido formando una conciencia nítida en sortear las dificultades, y con las más ro.
viembre, de 1911, en París: personajes, lo tocante a cuanto impone, como dig. tundas voces de oprobio contra los in.
los mismos; teatro, Ginebra; papeles, nidad, como independencia, como segu vasores.
invertidos.
ridad, como deber de solidaridad, el caso Pero dicen que el gobierno del co.
Una tarde encuentro a Ricardo presa de Guatemala.
ronel Arbenz es comunista.
de una aguda crisis sentimental. Yo. De simpatía por su gobierno. Aunque lo fuera! Yo le juro que regreso a Costa Rica o me dijo fir Ni siquiera. De simpatía por su pue. estaría sintiendo parecida indignación a memente al verme. a mi turno, contes blo. No es indispensable, acaso ni nece. la que ahora siento si el atropellado por tarle: tú no regresas a Costa Rica ni. sario, saber quién está al frente de un un poder como de bomba atómica fuera nada; volverás cuando seas médico, an pueblo atropellado. Cuando el lobo o el Batista, fiera Trujillo, fuera Somoza, o Transcurridos algunos días de tigre saltan sobre un cordero, el hombre fuera cualquier otro de los dictadores que mucho invierno afuera y mucho invierno normal está con el cordero, sea cual fue humillan a sus países, porque el castigo en el alma durante los cuales no me se re su dueño o la tierra donde busca sus sería para Cuba, para Santo Domingo, paré de su lado, Ricardo, reaccionó con raíces Un pueblo sin elementos de de. para Nicaragua, pueblos hermanos nuesesta frase Qué cobarde soy y reanudó fensa, cuyos dirigentes dicen con pala. tros, pueblos hidalgos, pueblos inocencon el celo de siempre sus estudios. De bras de angustia No tenemos cómo re tes. Hemos de convenir en que la interla buena madre de Ricardo guardo una peler la agresión cuando sobre sus ciu vención del hierro, del fuego, de la po.
carta fechada el 25 de mayo de 1914, dades y aldeas se lanzan aviones de úl derosa brutalidad, es mala, cuando se tud sana; tes no. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica