José Carlos Mariátegui

REPERTORIO AMERICANO 11 cada uno. La gente no iba rápidamente a Discurso ninguna parte y cada cual iba a lo suyo Por Pedro CABA guiado por los hilillos de su propio pensamiento, de modo que cada cual iba a donde (En Rep. Amer. tenía que ir. Pero hoy, en la urbe, la gente no va a ninguna parte ni llega a donde El verbo discurrir tiene en español lla en con currir a donde los demás se reliiba. Su discurso (como pensamiento y codos sentidos netamente diferenciados, has nen para discurrir moviéndose; el que más mo marcha) se desvía a cada paso por el ta el punto de llegar a ser o parecer con re curre a los demás y más caidas o re cupensamiento y la andadura ajena, de mo.
trapuestos. De una parte, decimos que el rrencias tiene en lo multitudinario, es el do que lo más acertado arec tomar el agua discurre por el cauce y la gente por la que menos piensa, el que menos dis curre pensamiento y la dirección de los demás, avenida. Esta fué la primera acepción que con su intelecto, y que más parece necesiintegrándose en muchedumbres. La urbe tuvo el verbo discurrere en latín y su tar del pienso o lugar común, de que tanto de hoy es nerviosa y precipitada y la genequivalente en español. Pero de otra, el necesita el ganado humano.
te sólo discurre por sus avenidas en riadas dis currir es oponerse, o desviarse al me.
Hoy, época de muchedumbres mal ca de andadura urgente. Por si fuera poco, el nos, del correr. Este segundo sentido acla nalizadas en las grandes urbes, hay más ritmo apresurado del cine traduce a las ra por qué el discurso, como operación gentes que dis curren por las calles y las muchedumbres en marcha y hace que se mental, aparece cuando el hombre se aparavenidas y son las que menos placer halian nos aceleren nuestras impresiones desde la ta del correr de la calle para quedar maren dis currir con el intelecto por las gran butaca. Se comprende que con este aceleginado y meditativo en la orilla de la vida des vías del pensamiento y la meditación. rado andar o discurrir de la gente por la tumultuosa que fluye, y en vez de correr Como el hombre no sabe ya estar sólo, dis calle coincida una cierta ligereza y nervio(currere) frena la andadura, se aparta o curre con los demás con curriendo con ellos sidad de nuestro pensamiento y de nuestra desfibra del haz de la corriente de lo tupara hallar el sucedáneo al pensamiento habla. Parece como si nos hubiéramos damultuoso humano, y se pone (y casi se que le falta. Antes, en la ciudad, en la pe do vacaciones para discurrir alocadamente o pone) a dis currir. Siempre el intelectual, queña ciudad (como hoy todavía en la al. por las calles del vivir tumultuoso, des.
el hombre meditativo, nos parece solitario dea) la gente paseaba, andaba despacio, dis cansando del discurrir intelectual.
y lento en su andadura un poco al margen curría (en ambos sentidos) con premiosi.
de la vida colectiva, convulsa y espumeante.
dad y respetando el discurso personal de Valecia, España. 1952.
Observemos que todos los actos intelectuales aluden a esta suspensión o distrac: ción de lo vital y multitudinario para que darse al margen, devanando lentitudes y silencios al huso de la propia soledad. Pensar deriva de pensare que significaba a (Colaboración para Rep. Amer. la vez, pensar y colgar o pender, pues el que piensa queda suspenso, oscilante, du Por fin apareció el primer libro sobre gui, Sánchez, Haya, More. Pero la subraya bitativo, precisamente porque pesa o mide Abelardo Gamarra. Esto ocurre a los cien para discutir esas interpretaciones y, luecomo en la balanza de su intelecto. el años de su nacimiento. El libro no sale de go, alinear su propio original aporte para pensar y el medir es un acto de perplejilas filas pardas de la inteligencia oficial. destacar la envergadura cívica y la prodad. Por eso, el pienso del ganado tomó pro naturalmente. Es obra de un paisano de yección docente del batallador ideólogo bablemente su nombre del hecho de darlo Gamarra un paisano digno, se entiende huamachuquino. Del libro emerge así, boa las caballerías en bolsas que penden o capaz por eso de enfrentarse con sinceri cetada, una figura de repúblico, de maescuelgan del hocico. Por donde el pienso ani daa y sin rubor al hombre que batalló 50 tro, de creador literario, visto por primera mal o ganadero resulta un símbolo de lo años para enseñarnos varonía cívica y pe vez en su ancha trayectoria. La revelación intelectual. Observemos, sin demasiada iroruanismo varón. Buena piedra, pues, esta no es definitiva. El mismo autor lo reconía, ese raro perfil de intelectual que toma primera piedra de un monumento que el noce cuando prepara un segundo libro pael animal cuando come lentamente su pienPerú debe a Gamarra, como se lo debe a ra ahondar, aún más, en este surco reivinso, y ese aire rumiante que se percibe en Vigil, a Sánchez Carrión, González Prada, dicador al que todos le debemos algo de todo intelectual de raza cuando está penBenito Lasso, y al propio Mariátegui tan acción. Porque no es una deuda sentimensando. Notemos que saber deriva de sapecertero al decir que a Gamarra no lo re tal, sino de justicia, la que esperan cobrarre y alude a un sabor o paladeo, en golosa cuerda casi la crítica, sino el pueblo. se vida y obra de Gamarra; y nos subleva soledad; y que cogitare es, en principio, Julio Galarreta González autor del que esta justicia ande con pies de plomo un coger y comer en rancho aparte; y libro reivindicador le conocí en las pri cuando vemos a diario la exaltación de poque de ducir es sacar y aun son sacar; y siones políticas del Sexto y El Frontón. En bres nulidades literarias o consagrar a que re flexionar indica retraer la atenesos campos de concentración totalitarios tanto Areche y Arriaga de la literación del mundo de los demás, para hacerla purgábamos aún lo purgan otros perua tura.
recaer en sí mismo. Siempre nos encontranos. el llamado delito de rebelión contra Si González Prada fué el primer insmos con que toda operación intelectual es la Seguridad Pública, que no es otra cosa tante lúcido de la conciencia peruana. un apartarse, un recluirse en la propia guaque el legítimo derecho a rebelarse contra Abelardo Gamarra es el primer realizador rida par roer la osamenta de los conceptos la oligarquía colonialista que usurpa el goliterario de esa conciencia. Los sacristanes y las cosas cazadas en las selvas de lo bierno peruano. Estuvimos allí, pues, pa o colonialistas y los vates inefables amasocial.
ra probar los metales de nuestra fe en la mantados por las vaquillas de extramares, Pero el hombre no sólo dis curre (en Justicia. Ninguna prueba más directa y critican el estilo desgarbado, el lenguaje el doble sentido, intelectual y callejero) sielocuente que ésta, para conocer la medi popular, la sintaxis académica de Gamarra, da moral y la consecuencia ideológica de Pobre y ocioso reparo. Un Perú de cholos no que también ocurre y trans curre como los hombres. Puedo responder por ello de e indios no tuerce jamás el cuello a la esser temporal que es, y concurre a la plaza, la sinceridad literaria de Galarreta y de su al mercado y al espectáculo, y re curre a pontaneidad de su prosodia, no achata con los demás y tiene ocurrencias (hallazgos o limpia pasión democrática por el Perú. gominas su encrespada sintaxis ni puede Puedo afirmar, también, que está bien ca expresarse con la masturbada retórica de tropiezos imprevistos) y re currencias o lificado para hablar de temas entrañable los llamados arios de la Literatura. El caídas, hábitos y reiteraciones.
mente peruanos y para interpretar el men Perú genuino está en el lenguaje brusco y ocurre ahora que el que más dis curre saje de figuras tan entrañablemente, perua mechado de modismos, en la sintaxis queintelectualmente, menos habla oralmente, nas como la de Abelardo Gamarra.
brada y jugosa, en la dicción enérgica y como si la oratoria y el parloteo tuviera más Galarreta ha intentado una visión orgá sabrosa de todo lo que escribió Gamarra.
de riada e inundación incontenida y calle nica y cabal de la obra de Gamarra.
Lo está, también, con todo el atuendo desjera que de recurso y discusión mental y intención corresponden las distintas face venturado de sus cien años de vida perreflexivo. El que más dis curre con el inte tas que estudian los capítulos del libro: dularia. y con las esencias primordiales lecto, menos dis curre con los pies. que es Ubicación Literaria, Hombre y Escritor, de aquella levadura histórica donde maduel modo de dis currir de las muchedum Escritor silenciado, Creador Literario de ra el porvenir de una patria que no ha de bres) y menos gusto encuentra en con cu Pelagatos, el Poeta, el Educador, etc. etc. ser más lo creyó Gamarra, lo creemos rrir a donde los demás van en piaras de Por una parte, Galarreta subraya la inter nosotros, una falsa patria erigida a pesar multitudes arrastradas, móviles y gesticu. pretación crítica de los que se han atrevi del indio, sobre el indio y en contra del lantes. viceversa, el que más gozo ha do honradamente con Gamarra (Mariáte indio. Porque Gamarra tuvo ideales conesa Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica