200 REPERTORIO AMERICANO SRAITREA Canto a la Flor de Pascua y siete poemas nemerosos El simbolismo francés es todavía posituarios del avance editorial de Guatemala ción espiritual en que se asilan los poetas Alberto Velázquez y estupendos grabados en madera del ar.
de firme solera ante las nuevas modalidatista Roberto Ossaye, el poeta, además de des anarquizantes de la poesía. con el (Colaboración de Diego Córdoba) flor de Pascua, horóscopo de fuego. se simbolismo muchos han retornado a Gónñal trémula de la poesía del mundo cangora, la fuente más pura de las renovaciota las dalias episcopales. nes de la lírica castellana.
Cuando agoniza el cisne de Darío, de gigantescos rubís cuyas facetas engañoso plumaje y el inmarcesible Enrison calabozos de la luz cautiva.
que González Martínez nos señala al buho Exalta el cardo. flor áspera. ja.
sapiente. balí de las flores. anticristo del tré.
El no tiene la gracia del cisne, mas su bol. y le dice: inquieta pupila, que se clava en la sombra, aprendiendo de tí el estoicismo interpreta con que acendras recónditas virtudes dentro del clan de los opacos seres el misterioso libro del silencio nocturno.
destilo amor bajo mis alfileres.
desde su grata y recoleta Guatemala, comienza a ofrecernos sus versos Alberto Loa al lirio y al trébol. En su EncoVelázquez. Con los años, los desvelos de la mio de la rosa, poema diamantino termi cultura y la dedicación al hacer lírico, lenna: tamente transfórmase en gran poeta y de Rosa de los poetas, sultil rosa cuando en cuando nos envía sus hermosos que en el yambo dibujas la sonrisa.
mensajes, como este Canto a la flor de PasEstrella que en abstracta nebulosa cua y siete poemas nemerosos. Si en la etacolibríes de ensueño hacen precisa.
pa post romántica, la evasión para los esFlecha definitiva y trascendente píritus supersensibles, como, por ejemplo disparada en el arco de la lira José Asunción Silva o Julio Herrera y y en el reino interior omnipresente.
Reissig, era la torre de marfil o la de los Espejo en que la tórtola se mira panoramas. hoy, es la penumbra silensobre el sueño espiral de la serpiente.
ciosa y fecunda, alejada del vocinglerio Síntesis de incesante torbellino literario, tan propicio al verso político y Alberto Velázquez que gira en torno de su mismo anhelo.
a la confusión de valores estéticos. 1953)
Lámpara de milagro que Aladino Personalidad ya madura, en Alberto descubre en el vestíbulo del cielo.
Velázquez el estilo es el hombre. La frase Me apercibo a la tregua de mis sienes, tan manoseada del ingenio francés, cíñese, ya en ti el desasosiego se reposa como apretada armadura, a este poeta casu dogma concluir sus poemas en apreta.
balleresco, tanto en las letras como en la das armonías, coloreadas por luces y ma.
y la mano demiúrgica detienes bajo la voz de Juan Ramón Jiménez: vida. Los artistas u hombres de cultura tices nativos, pero ensanchada la visión. No le toques ya más, que visitan la ciudad de Guatemala y se cristiana en panoramas de universos.
que así es la rosa!
acercan a Velázquez palpan en seguida la Ultimamente el poeta se ha apegado (Y tú estás en el aire, carnazón espiritual y la elegancia señoril más a su tierra maya quiché. Hombre ár vestida de perfume y de donaire. de este como príncipe transmigrado de las bol se siente, y, por fuerza del ser, se arrairuinas todavía luminosas del mundo mayaga con ardor en ella. Así lo sorprendió un Pero donde más se siente este hombre.
quiché. La presencia física del hombre otodía y lo canta en ceñido soneto gongorino árbol es en su encendida declaración de ñal, la cadencia de todos sus movimientos, la ilustre argentina Frida Schultz de Mon Los Alamos: Oigámoslo: su sensibilidad de antena. hasta la voz tovani. Arbol humano que se palpa el misAlamos.
profunda y como resquebrajada, misteriomo en su destino y responsabilidad vegeTengo una obsesión de álamos.
samente consoladora, parecen esencias de tal y acaricia sus raíces que le vienen de Una vieja obsesión de álamos.
los siglos, de raza artística, prodigiosa de una raza muerta, pero vigente en él.
Una homogeneidad de sangre y cepa.
La corriente materialista que nos atroimaginación.
Yo mismo soy un álamo pella y la posición poco varonil del falso Todos los ritmos y las rimas, anímulas que trocó sus raíces, intelectual corren muy lejos de la existendel organismo poético, aún los más huidi por pies humanos.
cia recogida y ardorosa de este fino seño. zos o escondidos, los alcanza fácilmente De álamos mi abolengo, rón de Guatemala. Acaso por su extraña este espíritu zahorí, adivino de todos los y mi memoria y mi horizonte de álamos, calidad espiritual abstiénese de publicar vuelos de la música verbal. Por eso sus sus producciones y prefiere regalárnoslas, poemas, compactos, armónicos y ágiles, como sorpresivas y ricas Navidades, cada son como tropel de pájaros sagrados. En Soy, más que un hombre, año. Así ha llegado el presente de estos veces acendran gran fuerza cósmica y la un árbol.
tidos de vida subterrestre, cuando no la entre la gran familia de los árboles poemas encendidos de profunda ternura; frescura de la rama verde, recién nacida. soy y he de ser hasta el final un álamo.
y de ahí que sea poco conocido en Améri.
Muchos de sus versos llegan como trinos ca Alberto Veláquez, poeta. Los sorbos de o quejas de ave o como hojas que caen del Alamos de mi vida y de mi noche, su cuenco, de vinos intimos, el goza guar árbol, con tan suave y misteriosa natura sabedlo: por mi oz se expresa un árbol, dándolos para ofrecerlos, oportunamente, a lidad que nos obligan a cuidarlos tierna. se expresa un árhoi con el doble enigma sus amigos, entre los cuales figuró el in mente, como temerosos de que pudieran y la dual herencia de los álamos.
fortunado Porfirio Barba Jacob y hoy cuen herirlos manos u ojos zafios. Pero donde Mi corazón es sólo una alameda tan un Pablo Neruda, un Andrés Eloy el poeta es magistral es en el manejo de del jade y el argento de los álamos.
Blanco y un Germán Pardo García, para los símbolos, don inconfundible de su tra. Conozco igual el polvo que la lluvia nombrar sólo a tres de sus cofrades.
bajo lírico. cada paso nos sorprende con y sé soñar sobre el envés del llanto.
Uno que otro escorzo del antiguo par las riquezas de su tesoro imaginado y su Hago esta confesión boio ias frondas nasiano y ciertos reflejos del Darío de originalidad deleitadora. esto es ya bas. y junto al pulso eterno de los álamos.
Cantos de vida y esperanza no han esca. tante, porque simbolizar es también crear, Bello pecado el de Alberto Velázquez.
pado aún de la bruñida forma de Veláz iluminar, hender caminos ocultos y descoNunca ha accedido a que sus producciones quez. Pero quien parece haber influído nocidos, y el autor de estos Cantos es tan sean mercancía de libreros. Pero cuando más en él es Antonio Machado, el del rea profundo y preciso en sus creaciones simlleguen a manos limpias será consagrado lismo mágico. El poeta canta, de preferen bólicas que nos descubre un mundo vege.
por la crítica, sin controles editoriales, cocia, las inquietudes humanas que lo ro tal, en el que parece palpitar una inquie.
mo uno de los mejores poetas de America.
dean y que sólo pueden ver los que tiene tud humana.
los ojos bien puestos en el espíritu, y es En esta plaquette, con los lujos sun. México, 1954. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica